OMNI N°4 – 02/2012
OMNI
Directeur – Director
Cédric Lopez
Directeur adjoint - Director adjunto
Iago Urgorri
Maquettiste – Diagramación
Aurélie Paulous
Comité scientifique - Consejo científico
David Frances Vañó
Franck Derouet
Jean-Louis Mirmand
Leonardo César Bailo
Pablo Rueda Rodríguez-Vila
Ramón Rodríguez Pérez
Serge le Gall
Víctor Almeida García
1
OMNI N°4 – 02/2012
Editorial
Chers collègues numismates,
Nous voilà déjà au numéro 4 avec la publication de plus de 10 monnaies inédites !
Vous êtes nombreux à nous proposer des articles pertinents, scientifiques ou divulgatifs. Déjà plus
de 60 auteurs ont vu leur(s) article(s) publié(s) dans OMNI !
Dans ce numéro 4, il faut souligner le résultat de la démarche entreprise par OMNI depuis 6 ans,
consistant à encourager les jeunes numismates à partager leurs idées, leurs connaissances, au même
titre que les professionnels. Nous sommes donc fiers de donner ici l‟opportunité à trois jeunes
auteurs de publier leur premier article, trouvant leur place aux cótés d‟auteurs déjà reconnus.
Merci aux auteurs, aux annonceurs, au comité scientifique et aux lecteurs qui soutiennent la revue
OMNI.
En espérant que ce numéro soit toujours à la hauteur de vos attentes, nous vous souhaitons une
agréable et enrichissante lecture.
Cédric Lopez,
Directeur OMNI.
¡¡Seguimos adelante!! Un nuevo número, y ya van cuatro, en el que continuamos mejorando la
calidad de los trabajos presentados. ¡¡Más de diez inéditas!!
En esta ocasión contamos con colaboraciones de mano de muchos de los mejores autores e
investigadores en sus respectivos campos, tanto en los artículos del territorio galo como del lado
peninsular.
Al igual que en anteriores números, seguimos incluyendo estudios de diferentes ramas de la
numismática. Monedas romanas, galas, ibéricas, visigodas, medievales francesas, rusas y de la
Hispania de todas las épocas, todas ellas son objeto de estudio en este número. Debemos destacar la
publicación de un cruzado inédito de Enrique II, una pieza que apareció recientemente en nuestro
foro y que sin duda dará mucho de que hablar en el futuro. Retrocedemos en el tiempo hasta el siglo
I a.C. donde Ramón Rodríguez Pérez nos enseña un plomo monetiforme de gran calidad e increíble
rareza. También resulta muy interesante la aportación de Carlos Alajarín Cascales, colaborador
habitual de nuestra revista, que da a conocer un documento procedente de un Archivo Municipal
relacionado con el resello de 1641. Para concluir, un pequeño artículo de moneda visigoda de la
mano de Ruth Pliego que nos muestra un tipo de pieza que aunque conocida llevaba más de 100
años queriendo ver la luz más allá de un dibujo.
Esperamos sea del agrado de nuestros lectores.
Iago Urgorri,
Director adjunto.
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OMNI N°4 – 02/2012
3
OMNI N°4 – 02/2012
Index
Monnaies antiques
Monedas antiguas
A propósito de un nuevo gran plomo monetiforme
p. 8
de la serie de Atenea y la Victoria
Une drachme « à la croix » inédite découverte en
p. 11
Charente-Maritime
Une nouvelle obole au loup ailé
p. 13
attribuable aux Cadurques
Les monnaies antiques de la grotte de Coste Guizon
p. 16
(Meyrueis, Lozère)
Les deniers d’argent au cheval, s couché et
p. 21
bucrane, variétés et divisions
L’obole à légende KT des Volques Arécomiques p. 24
Une obole à la croix inédite p. 29
Emerita Augusta y sus imágenes monetales I p. 31
Itinéraire d’un empereur romain
p. 43
aux IIème et IIIème siècle
Deux pièces romaines exceptionnelles pour l'atelier
p. 45
monétaire d'Arles
Semis inédito de una ceca incierta Turdetana p. 49
L’orbis terrarum nella monetazione romana p. 51
4
Index
Ramón Rodríguez Pérez
Cédric Lopez
Jean-Marc Périé
Jean-Claude Richard
Ralite, Alain Vernhet et
Cédric Lopez
Jean-Louis Mirmand
Jean-Albert Chevillon et
Cédric Lopez
Jordan Latournerie
Miguel Ángel Cebrián
Sánchez
René Pierini
Philippe Ferrando
A. Guardeño
Alberto Trivero R. Antvwala
OMNI N°4 – 02/2012
Monnaies wizigothiques
Monedas visigodas
Aportación a la moneda visigoda p. 66
Ruth Pliego Vázquez y Iago
Urgorri
Monnaies médiévales et modernes
Monedas medievales y modernas
Nota breve descriptiva de un cruzado de ceca
p. 70
inédita
Les princes de Sedan : 66 ans de frappe p. 72
Un écu d’or au soleil inconnu au nom de François Ier p. 74
L’histoire de l’aigle bicéphale des armoiries de Russie
p. 76
à travers le monnayage
Iago Urgorri y Antonio
Roma
Quentin Hohmann
Antonio Roma Valdés
Bruno Visentini
La serie de un maravedí de cobre de Felipe III :
p. 81
revisión crítica y nuevas aportaciones
Iago Urgorri y Pablo Rueda
Rodríguez-Vila
Un ejemplo de fuente documental respecto al
p. 85
resello de 1641
Carlos Alajarín Cascales
El resello de Maura, una España dividida p. 88
Alex Lascano
Le coin littéraire
Rincón literario
Miscelánea p. 92
Óliver A. Riera
Index
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OMNI N°4 – 02/2012
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OMNI N°4 – 02/2012
Monnaies antiques
Monedas antiguas
A propósito de un nuevo gran plomo monetiforme
p. 8
de la serie de Atenea y la Victoria
Une drachme « à la croix » inédite découverte en
p. 11
Charente-Maritime
Une nouvelle obole au loup ailé
p. 13
attribuable aux Cadurques
Les monnaies antiques de la grotte de Coste Guizon
p. 16
(Meyrueis, Lozère)
Les deniers d’argent au cheval, s couché et
p. 21
bucrane, variétés et divisions
L’obole à légende KT des Volques Arécomiques p. 24
Une obole à la croix inédite p. 29
Emerita Augusta y sus imágenes monetales I p. 31
Itinéraire d’un empereur romain
p. 43
aux IIème et IIIème siècle
Deux pièces romaines exceptionnelles pour l'atelier
p. 45
monétaire d'Arles
Semis inédito de una ceca incierta Turdetana p. 49
L’orbis terrarum nella monetazione romana p. 51
Ramón Rodríguez Pérez
Cédric Lopez
Jean-Marc Périé
Jean-Claude Richard Ralite,
Alain Vernhet et Cédric Lopez
Jean-Louis Mirmand
Jean-Albert Chevillon et
Cédric Lopez
Jordan Latournerie
Miguel Ángel Cebrián Sánchez
René PIERINI
Philippe Ferrando
A. Guardeño
Alberto Trivero R. Antvwala
Monedas antiguas
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OMNI N°4 – 02/2012
A PROPÓSITO DE UN NUEVO GRAN PLOMO
MONETIFORME DE LA SERIE DE ATENEA
Y LA VICTORIA
Ramón Rodríguez Pérez
Las presentes líneas pretenden dar a la luz un nuevo gran plomo monetiforme que, aunque no tiene
carácter inédito, presenta un magnífico estado de conservación, dejando entrever leyendas que
pueden esclarecer o ayudar a configurar con mayor precisión este tipo ya publicado.
Fig. 1. Nuevo plomo de la serie Atenea y Victoria
E
n el catálogo de Casariego, Cores y
Pliego, obra todavía de referencia para
el estudio de los plomos monetiformes
de la Hispania antigua, encontramos dentro del
grupo III, entre los llamados medallones con
motivos grecoitálicos, una serie de plomos
donde se representa en el anverso una cabeza
de Atenea con casco corintio y en el reverso
una Victoria que porta una corona, motivos
inspirados en modelos griegos e italianos. En el
número 1, el cual da nombre a la serie, se
adivina delante del busto del anverso un objeto
que se identifica como un fruto o grano, las
letras N.M. y tres puntos. En cuanto al reverso,
los autores reconocen no haber podido
identificar por completo las letras que en él se
vislumbran, aun así aventuran dos leyendas
distintas según los ejemplares estudiados: en
unos (L. AMITI) y en otros (P.P. ITA).1En
cuanto a la distribución geográfica de
hallazgos, se nos informa de que “muchos de
ellos aparecen en la zona de Alcalá del Río”,
así como en otras zonas de la provincia de
Sevilla.
1
Casariego et alii, 1987, p. 135-136.
8
Monnaies antiques
Fig. 2 Plomos monetiformes de la serie
Atenea /Victoria
(Catálogo de Casariego et alii)
OMNI N°4 – 02/2012
El plomo que aquí presentamos, perteneciente a
la misma serie, es un hallazgo relativamente
alejado de dicha región sevillana. Según nos
consta apareció en el sureste de la provincia de
Córdoba y actualmente pertenece a una
colección particular. Este dato nos resulta de
gran interés para comprender la dispersión de
estos plomos ya que, aunque habitualmente han
sido asociados a zonas mineras de Sierra
Morena, son también muy frecuentes los
hallazgos en zonas agrícolas del valle de
Guadalquivir y otras más alejadas, como es este
el caso.
Características tipológicas
La pieza aquí tratada, confeccionada en plomo
y de porte espectacular, tiene un peso de 107,
39 gramos, un diámetro de 45 mms. y 0,9 mms.
de espesor. Presenta una iconografía que quiere
emular a las que portan algunos tipos griegos
de cronología en torno al año 200 a.C, en
concreto los tetradracmas de Side en Pamphilia
y algunas italianas como los calcos de Capua,
Campania. También con estos mismos tipos
hay emisiones en Seleuceia ad Calycadnum, en
Cilicia, y en Phrygia, en Eumenea, con fechas
más modernas, en torno al año 100 (Fig. 4).
En el anverso se representa un busto de Atenea
mirando a derecha con casco corintio, y frente a
éste un objeto que se ha venido interpretando
como un fruto o grano y las letras A.P.S. En el
reverso se muestra una Victoria portando una
corona, la leyenda L. PLAVTI y una T aislada.
El estilo es de buen arte.
Fig. 3.Disposición de las leyendas
Como dijimos, el interés de nuestra pieza, al
margen de aportar un nuevo ejemplar a este
escaso tipo, reside en las leyendas inscritas en
sus áreas, diferentes a las que hasta ahora se
conocían. Los paralelos2 conocidos aportan
escasa información en este aspecto dado el
desgaste que ofrecen, si bien podemos observar
que existen diversas emisiones tanto por la
diversificación en las inscripciones como por
los módulos de diferentes tamaños encontrados.
En cuanto a la distribución geográfica de esta
serie debemos señalar que, a igual que sucede
con la mayoría de estos grandes plomos, los
hallazgos se circunscriben exclusivamente a la
Bética y, en este caso, a zonas agrícolas del
valle del Guadalquivir. Y aunque se han venido
relacionando tradicionalmente estas piezas con
la producción minera de Sierra Morena,
también algunos autores como Domergue han
insistido en la relación entre las llanuras
agrícolas del Valle del Guadalquivir y las minas
de Sierra Morena en base al transporte fluvial
de los metales o quizás a posibles fundiciones
asociados a importantes compañías mineras.3
Otra teoría que nos parece plausible es que
estas piezas, dada su aparición en zonas
claramente agrícolas y por el hecho de que
carezcan de símbolos mineros, puedan
pertenecer a explotaciones agrarias cuyos
dueños también fuesen (o no) propietarios de
las minas. No hay que olvidar que estos plomos
se han concebido para una circulación
restringida en áreas concretas de trabajo, por lo
que podríamos estar ante una “moneda privada”
concebida para gastar en el ámbito de trabajo
de una explotación agraria. En cuanto al
nombre que se inscribe en nuestro plomo éste
pudiera tratarse de un negotiator, particular
capitalista encargado de una de dichas
explotaciones. Dichos particulares tenían
concesiones para explotar minas y parcelas
agrícolas de las que antes se ocupaban
poderosas compañías de publicani, o quizá
fueran sus legítimos propietarios. Se tiene
constancia, por Diodoro, de que dichos
negotiatores eran mayoritariamente itálicos,
sobre todo del sur de la península, dato probado
también en base a los estudios hechos sobre los
nombres impresos en numerosos lingotes de
2
El catálogo de Casariego et alii (1987), le otorga a este
tipo un grado de rareza 2 (entre 8 y 14 ejemplares
conocidos).
3
Domergue, 1972, p. 616; Casariego et alii, 1987, p.35.
Monedas antiguas
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OMNI N°4 – 02/2012
plomo hispanos4. Esta inmigración de
comerciantes itálicos al sur de la Península
ibérica desde finales del siglo II a.C. gira en
torno a la concesión de explotación de minas y
también al sector agrícola, sobre todo a partir
de mediados del siglo I en el que se baraja la
hipótesis de que las guerras civiles provocarán
cierta crisis minera que impulsará a una mayor
inversión de capital por parte de los
negotiatores en las explotaciones agrícolas de
la Bética, sobre todo en la exportación de aceite
a otras zonas del Imperio5. Son los llamados
negotiatores olearii.
Por otra parte, esto también explica la particular
iconografía de estos “lujosos” plomos acuðados
por estas acaudaladas familias de la Bética,
inmigrantes que importarán los motivos
característicos de las piezas greco-itálicas con
los cuales están familiarizados.
Calco de Capua
(www.magnagraecia.nl.coins)
Bronce de Seleuceia ad Calycamnum
(www.coinproject.com)
Fig. 4. Modelos iconográficos del nuevo
plomo monetiforme
Tetradracma de Side
(www.muenzauction.com)
BIBLIOGRAFÍA
CASARIEGO, A.; CORES, G. y PLIEGO, F. (1987): Catálogo de plomos monetiformes de la
Hispania antigua, Madrid.
DOMERGUE, C., (1965): “Les lingots de plomb romains du Musée Archeolñgique de Carthagène
et du Musée Naval de Madrid”, Archivo Español de Arqueología, 38, pp. 41-72.
DOMERGUE, C., (1972): “Rapports entre la zona minière de la Sierra Morena et la plaine agricole
du Guadalquivir a l´epoque romaine”, Melanges de la Casa de Velázquez, 8, pp. 614-622.
GARCÍA BELLIDO, M.P. y GARCÍA FIGUEROLA, M. (1986): Álbum de la antigua Colección
Sánchez de la Cotera de Moneda Ibero-Romana, Madrid.
SEAR, D.R., (1978): Greek Coins and Their Values, Vol. I, Londres
4
5
Domergue, C, 1965, p. 64.
Domergue, 1972, pp. 619-622.
10
Monnaies antiques
OMNI N°4 – 02/2012
UNE DRACHME « À LA CROIX » INÉDITE
DÉCOUVERTE EN CHARENTE-MARITIME
Cédric Lopez
Cette note présente un nouveau type de drachme s‟inscrivant dans les frappes indigènes dites « à la
croix et assimilées ». Il s‟agit d‟un type très original à la fois par les éléments apparaissant à
l‟avers et ceux apparaissant au revers.
C
es dernières années, le monnayage
indigène pré-augustéen a fait l‟objet de
nombreuses publications. Le récent
ouvrage intitulé « Dictionnaire des monnaies
découvertes en Gaule méditerranéenne »
recense tous les types de monnaies indigènes
connues à ce jour. La monnaie que nous
présentons ici manque à cet ouvrage et motive
cette publication.
La monnaie faisant l‟objet de cette note1 est
une drachme appartenant au groupe « à la croix
et assimilées ». Alors que la thèse de G. Savès
proposait une fabrication de ces monnaies par
un découpage d‟une barrette d‟argent au
préalablement
frappée
(Savès,
1976),
C. Larozas a démontré que ces monnaies
résultent de frappes de flans individuels
(Larozas, 2006).
L‟exemplaire que nous présentons a la
particularité de provenir du département de la
Charente-Maritime, à 8.5 km du village
d‟Écoyeux) anciennement le territoire Santon,
alors que la zone d‟émission principale du
monnayage « à la croix » concerne l‟Aquitaine
et le Languedoc, entre l‟embouchure de la
Gironde et la basse vallée du Rhône.
Description
A/ Croix bouletée au centre et aux extrémités.
Série de (cinq ?) S joints entourant la croix.
R/ Croix bouletée. Croix bouletée au centre et
aux extrémités dans le premier et quatrième
canton (et deuxième canton ?), hache évidée au
troisième canton.
Les drachmes ne présentant pas de tête à
l‟avers sont assez rares et énigmatiques.
Parfois, l‟avers se voit doté d‟un triskèle
entouré de volutes (DCR-98E), d'autres fois on
note la présence de protubérance entourée de
croissants (DCR-58 par exemple). Les
éléments apparaissant sur l‟avers de notre
exemplaire ne se retrouvent pas sur les
monnaies connues, aucune comparaison de
style n‟est donc possible avec des types déjà
publiés.
Concernant le revers, la monnaie présente une
croix bouletée, où la hache évidée apparaît
dans le troisième canton, comme à son
habitude. Les autres cantons semblent présenter
une croix bouletée au centre et à ses extrémités,
un élément déjà bien connu sur certaines
drachmes du type « négroïde » (DCR-245).
Même s‟il nous a semblé intéressant de publier
cette monnaie afin d‟étoffer les futurs
catalogues, il n‟est pour l‟instant pas
raisonnable
d‟établir
des
hypothèses
concernant une quelconque attribution de ce
nouveau type monétaire, et attendons
impatiemment de nouvelles découvertes.
Figure 1 : Drachme inédite (Argent).
Prov. Écoyeux (Charente-Maritime).
Poids inconnu. 11*12 mm.
1
Merci au propriétaire de cette monnaie pour la
confiance qu‟il nous a accordé.
Monedas antiguas
11
OMNI N°4 – 02/2012
BIBLIOGRAPHIE
PY M. et FEUGÈRE M. (2011), Dictionnaire des monnaies découvertes en Gaule méditerranéenne,
Editions Monique Mergoil et BNF.
LAROZAS C. (2006), Technique de fabrication des monnaies dites "découpées au burin". Cahiers
numismatique n°168, p. 9-22.
SAVÈS G. (1976), Les monnaies gauloises "à la croix" et assimilées du Sud-Ouest de la Gaule,
Toulouse.
12
Monnaies antiques
OMNI N°4 – 02/2012
UNE NOUVELLE OBOLE AU LOUP AILÉ
ATTRIBUABLE AUX CADURQUES
Jean-Marc Périé
De nos jours, le monnayage cadurque est principalement connu par les types dits « à la tête
triangulaire » et «au triskèle ».
La découverte récente de plusieurs oboles présentant comme particularité la présence sur leur
revers d‟un loup ailé semble ajouter un nouveau type, complètement inédit jusqu‟ici, chez les
peuplades du Sud-Ouest de la Gaule.
Cette note présente cette nouvelle obole bien différente du style classique connu aujourd‟hui.
L
e monnayage cadurque semble débuter
entre la fin du troisième siècle av. J.C. et
le début du second siècle av. J.C., avec
l‟émission de drachmes lourdes1 connues par
les trouvailles d‟Uzech les Oules2 et de Calès3.
A la même époque, devaient circuler à
l‟intérieur du territoire des oboles de Marseille,
représentant l‟un des seuls numéraires
disponibles alors. Ce ne sera qu‟un siècle plus
tard que se généralisera l‟expansion des frappes
monétaires propres aux Cadurques, avec les
séries, très abondantes et documentées de nos
jours, de la drachme dite « à la tête
triangulaire ».
La série monétaire présentée dans cette note
semble faire partie d‟un monnayage primitif
cadurque et pourrait être une interprétation
locale du type massaliote.
A la différence des séries des oboles cadurques
au cheval, triangulaire et au triskèle qui ne
dépassent pas les 0,4g, en moyenne, et se
caractérisent par un style celtique, elle présente
un poids moyen nettement plus élevé, de 0,6g
et une qualité de gravure soignée. Il est à noter
que ce poids moyen correspond au poids des
oboles de Marseilles.
1
LT pl.LV, D2 ; Savès 493-495.
Dans la commune d‟Uzech, au lieu-dit « le Piatger »,
en bordure d‟un chemin,en 1880,a été retrouvé un vase
grossier en terre contenant une trentaine de monnaies
gauloises imitant des drachmes de Rhoda.
3
Trouvaille de 5 exemplaires, dans la commune de Calès
au lieu dit « St-Marie-est ».
2
Dans cette étude, parmi la série d‟oboles
étudiée (fig.1), deux oboles ont déjà été
présentées mais non documentée dans
l‟ouvrage de M. PY et M. FEUGERE4 où elles
ont été attribuées de façon incertaine au peuple
pétrocore (exemplaires A et C, fig.1).
Cependant, les deux lieux connus à l‟époque de
leur publication laissaient déjà apparaître une
appartenance cadurque. Cette hypothèse est
corroborée par une troisième découverte faisant
l‟objet de cette note (exemplaire B, fig.1),
toujours localisée sur le même territoire,
cadurque, lui aussi. Notons de plus un
exemplaire sans provenance (voir WM
n°76025).
Métrologie :
Les trois monnaies étudiées sont en argent à
haut titre et affichent des poids respectifs de
0,55g, 0,59g et 0,64g pour un diamètre moyen
de 10mm.
Description :
A/ : tête juvénile à gauche à chevelure bouclée
(proche de la représentation de l‟obole de
Marseille), grènetis.
R/ : loup ailé, tourné vers la gauche. Gueule
ouverte (dents), langue pendante. Départ des
ailes ainsi que l‟extrémité des pattes
représentée par des séries de points. Cercle
entourant le loup. Queue passant entre les
pattes arrières.
4
Cf. Dictionnaire des monnaies découvertes en Gaule
méditerranéenne, OCR-310, p.288.
5
www.wikimoneda.com
Monedas antiguas
13
OMNI N°4 – 02/2012
Figure 1 : Oboles attribuables aux Cadurques
Figure 2 : Carte de répartition des oboles « au loup »
En examinant attentivement les trois
exemplaires dont nous disposons, présentant la
même gravure d‟avers et de revers, nous
pouvons supposer qu‟ils sont issus du même
coin monétaire.
Au vu de cette caractéristique et tenant compte
du fait qu‟un coin monétaire ne pouvait frapper
qu‟un nombre limité de monnaies du fait de la
dureté du matériau et de l‟usure qui se
produisait au fur et à mesure des frappes, il est
envisageable de penser que la masse monétaire
frappée pour cette série devait être très limitée,
14
Monnaies antiques
du moins cantonnée à la quantité possible
réalisable à l‟aide d‟une seule et même matrice.
Pour conclure cet article, et étant données les
provenances connues actuellement (fig.2) du
type « obole au loup ailé », tout laisse à penser
qu‟il est fort probable qu‟il s‟agisse d‟un
monnayage spécifique à la tribu des Cadurques.
Comme bien souvent, les découvertes à venir
devraient confirmer ou infirmer cette théorie.
L‟avenir écrira la suite …
OMNI N°4 – 02/2012
BIBLIOGRAPHIE
BLANCHET A. (1905).Traité des monnaies gauloises, trésor 142, pl.II, 1.p.279 et p.574.
DE LATOUR H. (1892).Atlas de monnaies gauloises, Paris.
DEPEYROT G. (1979), Inventaire des monnaies antiques du musée de Cahors, dans B.E.S.L,
p.130.
FEUGERE
M & PY
M. (2011). Dictionnaire des monnaies découvertes en Gaule
méditerranéenne, Montagnac-Paris.
FILIPPINI A. (2010). Carte Archéologique de la Gaule .Département du Lot, p.223, Paris.
LABROUSSE M. (1969), Inventaire archéologique du département du Lot, p.477-478.
MAXE-VERLY L.(1885).p.248-251.
SAVES G.(1976).Les monnaies gauloises « à la croix » et assimilées du sud-ouest de la Gaule,
Toulouse.
VIRE A. (1938-b). Les monnaies du Quercy du IV ème siècle avant J-C au 19ème siècle de notre ère,
fig.3, 5, p.4-5, Cahors.
VIRE A. (1938-c).Les monnaies du Quercy du IV ème siècle avant J-C au 19ème siècle de notre ère,
p.57-58, Cahors.
Monedas antiguas
15
OMNI N°4 – 02/2012
LES MONNAIES ANTIQUES DE LA GROTTE DE COSTE
GUIZON (MEYRUEIS, LOZÈRE)
Jean-Claude Richard Ralite, Alain Vernhet et Cédric Lopez
Cet article a pour objet la publication d‟un lot de 10 monnaies provenant de Meyrueis (Lozère). Cet
ensemble se compose de frappes indigènes locales et romaines. La découverte de ces monnaies
apporte de nouveaux éléments pour une meilleure compréhension de la circulation monétaire dans
la Gaule du Sud.
4 ou 5km au nord-est de Meyrueis, sur
le flanc sud du Causse Méjean et à 1 km
au sud de la ferme de Coste Guizon,
dans la falaise dominant la vallée de la Jonte, se
trouvent des petites cavités communiquant
entre elles, à quelques mètres les unes des
autres.
À
À la fin du 19ème siècle (1866-1868), l‟abbé
Boissonnade et l‟abbé Cérès ont recueilli là,
dans des coulées stalagmitiques et dans des
gours, une centaine de fibules en bronze ou en
fer (Tène III), des céramiques campaniennes,
des pichets gris de la côte catalane, des vases
communs des IIème-Ier siècles avant J.-C., et
une vingtaine de monnaies romaines.
Malheureusement, tout ce mobilier qu‟ils ont
sommairement décrit dans leurs publications a
aujourd‟hui disparu (1).
Dans les années 1960-1962, le docteur Morel,
sénateur de la Lozère et Président de la Société
des Lettres, a repris quelques fouilles dans ces
cavités et a récupéré une fibule de Nauheim et
de nombreux fragments de céramiques de la
Tène III. C‟est le docteur Morel qui, un jour,
ayant mal garé sa voiture au-dessus des grottes,
a reçu trois procès verbaux et a donné aux
cavités qu‟il fouillait le nom de « Tres
Berbaous » ! (2).
En 1966, à la suite d‟importantes fouilles
clandestines, André Soutou et Alain Vernhet
ont recueilli sur place une monnaie gauloise de
Tatinos, quelques monnaies romaines, des
fragments de fibules et de nombreux fragments
de céramiques datables de l‟Age du Bronze, de
l‟Age du Fer, de La Tène finale et de l‟époque
gallo-romaine (sigillées de La Graufesenque,
vases d‟offrandes). Ces trouvailles ont été
16
Monnaies antiques
immédiatement signalées à la Direction des
Antiquités Historiques mais aucune poursuite
n‟a pu aboutir (3).
Il est clair qu‟il s‟agit d‟un petit habitat
protohistorique transformé en une grotte
sanctuaire celtique et gallo-romaine, du même
type que celles que l‟on a retrouvées dans les
Grands Causses (4).
1 : Obole MA
0.54 g ; Dictionnaire (5) : OBM 10 ou 11
A/ Tête à gauche, chevelure en boucles à
crochets avec une grosse boucle frontale et une
mèche cachant le haut de l'oreille et une boucle
en S allongé sur la nuque. Les favoris sont
naissants ou absents.
R/ Croix pointée et MA bouletées. Obole qui
présente les caractéristiques du type Entremont
2-2-3, variété A, avec des nuances car ce profil
très fort n'est pas présent à Entremont
(G.Gentric avec la collaboration de J.Cl.Richard Ralite, Les monnaies d'Entremont, à
paraître).
2 : Drachme au cavalier (Rutènes)
2.11 g ; Dictionnaire : RUT-282 ; CL-070.
A/ Tête à droite, cheveux en arrière ; grènetis
au pourtour.
R/ Cavalier à droite sur une ligne de terre,
tenant une lance dirigée vers le bas ; derrière
lettre V bouletée ; devant, légende NR ou NB.
3 : Drachme au sanglier (Rutènes)
2.15 g ; Dictionnaire : RUT-277 ; CL-044.
A/ Tête à gauche avec collier de perles.
Chevelure en deux arcs de cercles.
R/ Sanglier à gauche et spirale au-dessus. Sexe
de l‟animal spiralé.
OMNI N°4 – 02/2012
4 : Obole au sanglier (Rutènes)
0.34 g ; Dictionnaire : RUT-208 ; CL-082.
A/ Tête à droite.
R/ Sanglier à droite, le dos souligné par un trait
continu.
5 : Obole NEM-COL (Nîmes)
0.32 g ; Dictionnaire : NIM-2718
A/ Anépigraphe. Buste casqué et drapé à droite.
R/ NEM COL - Légende en deux lignes dans
une couronne de laurier.
6: Auguste.
(Nîmes)
Demi-as
au
crocodile
6.24 g ; Type 1 ou 2 (Avant 9 av. J.-C.).
Auguste non couronné.
A/ IMP DIVI F. Têtes d‟Auguste et Agrippa
adossées.
R/ COL NEM. Crocodile enchaîné à une palme.
7: Auguste.
(Nîmes)
Demi-as
au
crocodile
3.56 g ; Type 1 ou 2 (Avant 9 av. J.-C.).
Auguste non couronné.
A/ IMP DIVI F. Têtes d‟Auguste et Agrippa
adossées.
R/ COL NEM. Crocodile enchaîné à une palme.
1
2
3
8 : OCTAVE/AUGUSTE. Semis à l’autel de
Lyon.
4.54 g ;
A/ CAESAR AVGVSTVS DIVI F PATER
PATRIAE. Portrait d‟Auguste lauré.
R/ ROM ET AVG. Autel dédié à Rome et
Auguste.
9 : Claude. Dupondius.
4.65 g ; RIC.116
A/ TI CLAVDIVS CAESAR AVG PM TR P
IMP. Tête de Claude à gauche.
R/ SC dans le champ. Minerve debout à droite,
lançant un javelot et tenant un bouclier.
10 : Galba. Fraction de denier.
0.64 g ; RIC I /2 p.24O-243, Rome juillet 68janvier 69 ap. J.-C.
A/Tête nue ou laurée de Galba à droite, [IMP]
SER GALBA CAESAR AVG.
R/ Livie debout à gauche tenant une patère dans
la main droite et un sceptre vertical à gauche,
[D] IVA [AVGVSTA].
4
5
Monedas antiguas
10
17
OMNI N°4 – 02/2012
6
7
Les monnaies n°2, 3 et 4 appartiennent au
groupe des monnaies dites « à la croix et
assimilées ». Plus précisément, il s‟agit de trois
monnaies d‟argent généralement attribuées aux
Rutènes (6).
8
9
données sur cette technique, d‟autant plus
intéressant de par sa provenance.
Fig. 1 : Exemple d‟ajout d‟argent sur une
drachme du type « à la main ouverte »
(Lopez 2011, Fig. 40)
Reconstitution 1 : Avers de la drachme « au
cavalier à droite »
La monnaie n°2 est une rare drachme d‟argent
du type « au cavalier à droite» (cf.
reconstitution 1), attribuée aux Rutènes
provinciaux.
Cet
exemplaire
est
particulièrement intéressant car il témoigne de
l‟utilisation de la technique de « remplissage
d‟entailles par ajout d‟argent » telle qu‟elle à
été définie dans (Lopez 2011) : « Le plus
souvent, il s‟agit seulement de deux coups de
burin portés sur le flan, en forme de croix. Puis,
au centre de cette croix, un ajout d‟argent est
apporté. Le flan est ensuite refrappé. De cette
façon, le creux au centre de la croix disparaît et
laisse penser que les quatre extrémités de la
croix sont indépendantes. ». L‟exemplaire que
nous publions constitue donc de nouvelles
18
Monnaies antiques
La monnaie n°3 est une drachme dite « au
sanglier ». Bien que la frappe soit décentrée,
elle doit être apparentée à la variante dite « au
sexe spiralé », qui présente un sanglier d‟un
style différent des autres types, au dos incurvé,
avec une spirale à l‟emplacement du sexe de
l‟animal (cf. reconstitution 2) qui se verra
souvent accolée d‟une "cinquième patte". À ce
revers, le même style d‟avers est toujours
associé. Il s‟agit d‟une tête à gauche avec
chevelure représentée par deux traits incurvés
et perlés. La structure du visage rappelle les
oboles du type cubiste.
OMNI N°4 – 02/201
Les origines des monnaies sont voisines et elles
ont dû être prélevées sur la circulation normale
dont les espèces sont identiques à celles des
sites archéologiques de surface voisins (8).
Reconstitution 2 : Type « drachme au
sanglier, sexe spiralé »
(cf. Lopez 2011, Fig. 81)
La monnaie n°4 est un exemplaire appartenant
à une rare variante d‟un divisionnaire d‟argent
présentant un sanglier à droite (seul l‟avant de
l‟animal est visible sur cet exemplaire), avec un
style à rapprocher de la drachme à légende
BIRACOS (cf. reconstitution 3) (7). Avec un
poids de 0.34 g, notre exemplaire s‟inscrit dans
l‟intervalle de poids déjà constaté (entre 0.20 et
0.40 g). À noter que l‟avers connu pour ce type
présente un avers très proche de celui de
l‟obole dite à l‟oiseau et au daim. Ces trois
types proviennent certainement d‟un même
émetteur (Lopez 2011).
Ces
« grottes-sanctuaires »
sont
donc
représentatives des pratiques de la société du
temps et nous serions prêts à voir dans ces
pratiques, au Ier siècle avant et après J.-C., le
renouveau de pratiques antérieures, de l‟époque
purement celtique, avec une sorte de retour aux
sources alors que les nouveaux lieux de culte,
sous influence romaine, ne semblaient plus
devoir rendre les mêmes « services ». Peut-être
aussi qu‟il s‟agissait ainsi de marquer une
différence avec les pratiques cultuelles
généralisées sous influence romaine en
retrouvant ainsi celles qui avaient dû, depuis si
longtemps, « faire leur preuves ».
Les monnaies de la grotte de Coste Guizon,
malgré leur modestie, pourraient ainsi s‟inscrire
dans des pratiques plus générales et révéler
ainsi, à leur niveau, les tendances profondes de
populations dans lesquelles le fonds originel
n‟avait pas disparu (9).
Reconstitution 3 : Type « obole au sanglier »
(cf. Lopez 2011, Fig. 114)
***
Ce petit ensemble de monnaies manifeste une
fréquentation de cette grotte entre le Ier siècle
avant J.-C (ou seulement la seconde moitié de
ce siècle) et le début de l‟époque des Julioclaudiens jusqu‟à Galba et trouve donc de
nombreux parallèles dans les grottes connues
dans le Sud du Massif Central à ces mêmes
époques. On y retrouve les mêmes espèces avec
une forte prédominance de monnaies de petits
formats, très souvent en argent, qui sont
généralement
interprétées
comme
des
offrandes.
Monedas antiguas
19
OMNI N°4 – 02/2012
NOTES ET BIBLIOGRAPHIE
(1) Abbé Cérès (1867), Procés-verbaux de la Société des Lettres de l‟Aveyron, VI, 1866-1868,
p. 109-110 ; Abbé Boissonnade, Lettres sur les grottes de Meyrueis, Bulletin de la Société des
Lettres de la Lozère, p. 260.
(2) BROUILLET P. et SOUTOU A. (1959), Céramiques et monnaies gauloises de Lozère, Ogam,
XI, 1959, p. 400-401 ; Dr. Ch. Morel, Fouilles et recherches inédites, Revue du Gévaudan,
1961, p. 154-155 et fig. 23c ; Dr. Ch. Morel et abbé P. Peyre, Les vases peints gaulois et galloromains de tradition celtique dans le département de la Lozère, Celticum, IX, 1964, p. 124 et
fig. 3, n°6.
(3) FAGES G. et LORBLANCHET M. (1982), Recherches sous les tumulus des environs
d‟Anilhac (Causse Méjean), Revue du Gévaudan, 1964, p. 29, note 4 ; Spéléo-Club des
Causses, Spéléo Causse Méjean, 1, 1982, p. 231-239.
(4) VIDAL M., VERNHET A. et PUJOL J. (2000), Les grottes sanctuaires : à propos des
exemples aveyronnais, première approche d‟une étude comparative étendue au sud de la
France et à la Péninsule Ibérique, Aspects de l‟Age du fer dans le Massif Central, Lattes, 2000,
p. 65-80 ; sur l‟ensemble des Causses on se reportera toujours à la magistrale étude de P.
Marres, Les Grands Causses, étude de géographie physique et humaine, Tours, 1936.
(5) PY M. et FEUGÈRE M. (2011), Dictionnaire des monnaies découvertes en Gaule
méditerranéenne, Editions Monique Mergoil et BNF.
(6) LOPEZ C. (2011), Reconstitutions d‟empreintes - Les monnaies attribuables aux Rutènes.
Editions VIIRIA, Montpellier.
(7) FEUGÈRE M. et ROUANET J.-C. (2003), Nouvelles données sur les monnaies gauloises à
légende VIIRIA / BIRACOS (BN 9579). Cahiers numismatiques, XL, n°156, 2003, p. 27-32.
(8) D‟autres grottes du Sud du Massif Central (M. Vidal et alii, op. cit.) présentent les mêmes
caractéristiques, voir déjà : J.-C.Richard, Les monnaies de Le Cros (Hérault), Bulletin de la
Société Archéologique et Historique des Hauts Cantons de l‟Hérault, 3, 1980, p. 20-24 (une
suite est actuellement sous presse).
(9) Nous remercions M. Dhénin qui a permis l‟identification de la monnaie n°10 et G.Gentric pour
la monnaie n°1. Il convient maintenant pour la circulation des monnaies gauloises en Lozère
d‟utiliser l‟article de J.-L. Mirmand, Monnaies celtiques et monnaies coloniales romaines
trouvées sur le sol lozérien, Grands Causses, préhistoire et archéologie, 3, 2011, p. 57-72, qui
apporte un nouveau matériel considérable à notre étude pionnière : J.-C.Richard et D. Fabrié,
Trésors et découvertes monétaires en Lozère (Languedoc-Roussillon), Cahiers Numismatiques,
XXI, n°79, 1984, p. 3-20.
20
Monnaies antiques
OMNI N°4 – 02/2012
LES DENIERS D’ARGENT AU CHEVAL, S COUCHÉ ET
BUCRANE, VARIÉTÉS ET DIVISIONS
Jean-Louis Mirmand
Cet article à pour but de faire connaître la série en argent des monnaies au “bucrane”
d‟attribution arvernes. Souvent ignorées ou négligées de par leurs mauvaises frappes et leur
rareté. Elles restent un des monnayages gaulois qui comporte le plus de lacunes. Sur les trois types
qui suivent, un seul est présent dans les ouvrages de références.
ors de l‟inventaire d‟une collection
locale1, mon attention fut attirée par une
monnaie d‟argent (poids : 2,38 g ;
module : 14 mm) provenant des environs du
Monastier (Lozère). Le droit assez mal venu à
la frappe, mais néanmoins identifiable,
représente une tête à gauche. Le revers,
légèrement décentré, laisse voir un cheval
galopant à gauche avec un S couché au dessus,
et une tête de taureau de face au dessous
(bucrane). Le centrage n‟est pas parfait, le
bucrane est coupé, mais il reste identifiable
malgré la cristallisation du métal sur la
monnaie.
L
peu5, toutes têtes et cheval à droite.
Notre exemplaire, différent, semble inédit, et se
rapproche de la classe I du monnayage d‟or
décrite comme suit6 :
A/ : Profil à gauche, à la coiffure élaborée,
séparée en deux parties par une couronne ou
diadème. Au-dessus, mèches arrondies et
striées. Dessous, longues mèches tombant sur le
visage.
R/ : cheval bondissant à gauche, Dessous
bucrane. Au-dessus branche ? (hors flan).
Ce type, que je pensais reconnaitre se trouve en
deux exemplaires dans les collections de la
Bibliothèque Nationale de France sous les
numéros 3812 et 38132.
Traditionnellement attribués aux Arvernes3, ils
ont pour description :
A/ : Tête à droite, aux mèches arrondies. Cercle
de grènetis au pourtour.
R/ : Cheval galopant à droite. Au-dessus, S
couché. Au dessous bucrane.
Typologiquement, elles correspondent à la
classe II de la série 1175A du monnayage en
or4 et aux fractions d‟argent, connues depuis
Je remercie pour sa confiance l‟inventeur qui désire
rester anonyme.
2
Monnaies d‟argent de 1,85 g et 2,45 g provenant de la
collection de M. de Saulcy.
3
Un des plus puissants peuples de Gaule au IVe et IIIe
siècle avant J.-C. Ils occupaient l‟actuelle Auvergne, et
dominaient une grande partie du territoire jusqu‟à la
Guerre des Gaules. Les Gabales, Vellaves et les Helvii,
proches et clients des Arvernes sont souvent considérés
comme tels.
4
Voir Nouvel Atlas des monnaies gauloises.
1
Denier au bucrane, tête et cheval à gauche,
inédit.
Malheureusement, la mauvaise frappe de notre
monnaie sur le portrait, laisse peu d‟aperçu sur
la chevelure, et ne permet pas de déterminer
une ressemblance, hormis le sens du portrait.
Pour le revers, le cheval est bien à gauche, le
bucrane bien dessous. Un S couché se trouve
sur le cheval, S qui n‟est pas visible sur les
monnaies d‟or quand le bucrane est présent,
5
Deux fractions décrites (0,48 g et 0,56 g) provenant de
la région de Marvejols (Lozère) dans Grand Causses
Préhistoire et Archéologie n°3, p. 64.
6
Description de la DT 3542 du Nouvel Atlas des
monnaies gauloises III, p 140.
Monedas antiguas
21
OMNI N°4 – 02/2012
d‟où le point d‟interrogation sur la description
du Nouvel Atlas.
Les exemplaires d‟argent, connus
provenances lorsqu‟elle est citée :
avec
Denier, type tête et cheval à droite
Photo 3
1. Muret et Chabouillet, 3812 [1,84 g] origine,
collection M. de Saulcy. DT 3545, photo 312
du Depeyrot, Photo de la ARV-3812 du
Dicomon.
2. Muret et Chabouillet, 3813 [2,45 g] origine,
collection M. de Saulcy. DT 3546
Photo 4
3. Musée de Toulouse, 254 (col. Azéma)
[2,40 g]. Trouvée à Vieille-Toulouse (HauteGaronne).
Denier, type tête et cheval à gauche
4. Vente sur offres, CGB, Monnaies 34, n°1237
[2,51 g] origine inconnue.
1. Collection privée [2,38 g], origine Lozère
(photo 5).
5. www.la-detection.com, message 17245,
frappe incuse [2,35 g] les Alpilles (Bouches-duRhône).
6. www.la-detection.com, message 17245,
poids absent, Gard.
7. The Oxford Celtic Coins index, n°98.0170
[2,24 g] Ile de Wight (Royaume-Uni).
Photo 5
8. Collection privée [2,33 g], origine Lozère
(photo 1).
Fraction (obole), type tête et cheval à
droite
9. Collection privée [2,32 g], origine Lozère
(photo 2).
11. Collection privée [2,31 g], origine Lozère
(photo 4).
1. Vente CGB, bga 218779, fourrée [0,54 g],
origine inconnue.
2. Collection privée [0,48 g], origine Lozère
(photo 6).
3. Collection privée [0,56 g], origine Lozère
(photo 7).
4. Collection privée [0,58 g], origine Lozère.
Photo 1
Photo 6
Photo2
Photo 7
10. Collection privée [2,33 g], origine Lozère
(photo 3).
22
Monnaies antiques
OMNI N°4 – 02/2012
Fraction (obole), type tête et cheval à
gauche
Non retrouvée.
Même si l'épicentre des provenances se situe en
bordure méridionale du Massif-Central, l'aire
de dispersion semble confirmer une attribution
Arverne. L'étude et la publication de nouveaux
exemplaires, tous types confondus, permettront
d'étoffer la carte des répartitions.
BIBLIOGRAPHIE
BRENOT C. et SCHEERS S. (1996), Catalogue des monnaies massaliotes et monnaies celtiques
du Musée des Beaux-Arts de Lyon.
DE LA TOUR H. (1892), Atlas de monnaies gauloises, réimpression 1991, Wetteren.
DELESTREE L.-P. et TACHE M. (2007), Nouvel Atlas des monnaies gauloises III, La Celtique,
du Jura et des Alpes à la façade atlantique, éditions Commios.
DEPEYROT G. (2004), Le numéraire celtique III de l‟Atlantique aux Arvernes, collection Moneta
n°36, Wetteren.
FEUGERE M. et PY M. (2011), Dictionnaire des monnaies découvertes en Gaule
méditérranéenne (Dicomon), éditions Monique Mergoil et Bibliothèque nationale de France.
MIRMAND J.-L. (2011) Monnaies celtiques et monnaies coloniales romaines trouvées sur le sol
lozèrien, dans Grand Causses Préhistoire et Archéologie n°3/2011, Association du Docteur
Prunière, p. 57 à 72.
MURET E. et M. CHABOUILLET A. (1889), Catalogue des monnaies gauloises de la
Bibliothèque Nationale, E. Plon, Nourrit et Cie, imprimeurs-éditeurs, Paris.
Monedas antiguas
23
OMNI N°4 – 02/2012
L’OBOLE À LÉGENDE KT
DES VOLQUES ARÉCOMIQUES
Jean-Albert Chevillon et Cédric Lopez
À partir d‟un spécimen inédit de belle conservation, ce groupe jusqu‟alors connu par un seul
exemplaire a pu être utilement réétudié sous ses divers aspects. Par la qualité de son droit un
nouveau prototype apparaît et des liens précis avec d‟autres séries se confirment. Les spécificités
de son revers permettent également de donner une lecture différente et nettement plus précise de la
légende. La métrologie, la zone d‟émission et la datation sont également affinées grâce aux
nouvelles données. Une approche plus globale des oboles émises dans le Languedoc oriental aux
alentours du milieu du Ier siècle avant J.-C. amène les auteurs à confirmer une filiation stylistique
propre à ces séries d‟argent attribuables aux Volques Arécomiques.
Fig. 1. Obole à légende « EKTE » (OBV-20)
Poids : 0,30 g, 9-11 mm ; Lieu de
provenance : Saint-Hippolyte-du-Fort (Gard),
coll. particulière.
‟est dans le travail de M. Feugère et M.
Py que fut publiée la première obole à
légende « EKTE » (OBV-20) (fig.1). À
l‟avers, une tête à gauche peu lisible, car
particulièrement décentrée vers le haut, avec
quelques mèches apparentes en forme de Y. Au
revers, une roue avec un globule central et
quatre rayons dépassant largement la jante. À
l‟intérieur des cantons, une légende donnée en
lecture normale centrifuge pour un E lunaire,
un K, un T et un E lunaire = EKTE, dont la
signification reste ignorée. Or, un deuxième
spécimen à ce type nous a été récemment
proposé pour étude (fig. 2).
C
Fig. 2. Obole à légende « KT » ;
Poids : 0,41 g, 9,5-10 mm. Lieu de
provenance : Saint-Martin-de-Londres
(Hérault), coll. particulière (Hérault).
24
Monnaies antiques
Bien conservée et mieux centrée sur ses deux
faces, cette monnaie apporte un certain nombre
d‟éléments déterminants pour une meilleure
connaissance de ce nouveau groupe. La tête
présente une chevelure composée d‟un épais
bandeau frontal de mèches traitées en Y
renversés et alignés, reposant sur une série de
lunules bien agencées. Un deuxième bandeau,
constitué de lunules saillantes plus ou moins
bien imbriquées, forme l‟arrière. L‟oreille n‟est
pas représentée mais une large boucle d‟oreille
à trois pendants en forme de M est placée au
bas de la joue. Mâchoire bien marquée, œil
globuleux, sourcil orthogonal à l‟arête nasale,
nez épais et pointé vers le haut, lèvres traitées
par deux traits horizontaux. Style faible, relief
limité.
En tenant compte du premier spécimen, ce
motif est complété par un cou en bon relief et
un grènetis au pourtour (voir REE fig. 3).
Fig. 3. Reconstitution d‟Empreinte Exacte
(REE) d‟une obole à légende KT
OMNI N°4 – 02/2012
La présence de la boucle d‟oreille à trois
pendants semble indiquer, a priori, que le
prototype repris fut la drachme de Massalia à la
tête d‟Artémis. Cependant, le style faible de la
gravure, avec un profil simplifié et peu
gracieux ainsi qu‟un mauvais positionnement
de cette boucle d‟oreille, laisse penser qu‟il
s‟agit d‟un simple ajout personnel du graveur et
que l‟obole de Marseille est bien le modèle
initial de ce groupe. D‟autant plus qu‟un certain
nombre de séries massaliètes du IIème s. av. J.C. (OBM-9 et OBM-10), en particulier celles
avec des lettres en favoris (fig. 4, OBM-9a),
présentent les mêmes mèches en Y
parfaitement traitées et en excellent relief.
Fig. 4. Obole signée Π/A/Ρ dans le favori
Les revers, provenant du même coin monétaire
(voir REE fig. 3), nous autorisent à une
nouvelle interprétation de la légende grâce au
meilleur centrage et à l‟excellente conservation
du motif de notre spécimen. Alors que le
premier exemplaire laissait croire à la présence
de deux E lunaires dans deux cantons contigus,
la nouvelle monnaie nous amène à réfuter cette
thèse. Ces deux motifs sont bien graphiquement
identiques. Le premier est semblable à un
torque avec ses tampons bien représentés aux
deux extrémités. Le second est de même
facture, à ceci près qu‟une forme en relief et de
petite taille apparaît à l‟intérieur du torque. Ce
motif, qui ressemble à un sablier, ne peut en
aucun cas, en tenant compte de son
positionnement et de sa configuration, être
interprété comme la barre interne d‟un E
lunaire. Si son apposition a été volontaire on
peut s‟interroger sur sa signification, mais il se
pourrait que cette excroissance corresponde à
une cassure du coin, comme on peut le
constater sur une obole provenant du Gard (fig.
5).
Fig. 5. Obole de Marseille ; 0.49 g ; 11mm ;
Provenance gardoise. Collection privée.
Concernant les deux autres cantons, la présence
des deux lettres K et T est définitivement
confirmée.
La représentation de torques est commune pour
le monnayage pré-augustéen du sud de la
Gaule. Cet objet, signe de noblesse et d'un
statut social élevé, admet de nombreuses
variantes de traitements. Sur certaines
monnaies sa tige métallique est rendue par un
arc de cercle perlé, dont les extrémités
convergent (cf. Fig. 6 : 1, 2). D‟autres
monnaies offrent des torques semblables à ceux
figurants sur notre exemplaire, plus simples,
avec une ouverture plus large (cf. Fig. 6 : 3, 4,
5, 6). Notons la forte similitude entre le torque
de la monnaie 6 (devant le cheval) (Fig. 6 : 7)
et ceux représentés dans les cantons de notre
obole (Fig. 6 : 8). Ceci nous permet donc
d‟écarter définitivement l‟hypothèse de la
légende EKTE pour la réduire en KT.
L‟interprétation de cette nouvelle légende
abrégée reste en complète discussion puisque
cette graphie KT, ou TK en lecture rétrograde,
ne nous ramène, comme pour la légende EKTE
(ou ETKE) d‟après Feugère, à « aucun
toponyme ou anthroponyme connus »1.
Outre l‟interprétation des lettres et motifs
présents dans les cantons, le revers tire
clairement son inspiration de la roue massaliète,
bien répandue dans le sud-est de la Gaule dès le
Ve s. avant J.-C. Cependant, même si la roue
demeure bouletée au centre selon la coutume,
les lettres habituelles M et A sont ici
remplacées par K et T. Ce n‟est pas une
exception pour ce monnayage imité de l‟obole
de Marseille. L‟obole à la roue et à la légende
VOLC (VLC-2646), l‟obole à la roue et à
légende AMBR (OBV-146), l‟obole COVE
(OCR-291) ou encore l‟obole ANΛ ou ANΓ
(OBV-2645) (fig. 7) en sont de bons exemples.
1
FEUGÈRE 2011, p. 233.
Monedas antiguas
25
OMNI N°4 – 02/2012
1
CGB, N° bga_131603
2
CGB, Monnaie 23, lot 738
4
CGB, Monnaies 29, lot 704
3
Gemini, LLC, Auction III, lot 11
5
CGB, N° bga_132384
7
6
CGB, Monnaies 38, lot 1502
8
Fig. 6. 1-6 : Représentation de torques sur des monnaies ;
7 : Zoom sur le torque de l‟obole KT ;
8 : Zoom sur le torque de la monnaie 6 (obole « au cheval et au torque » des Longostalètes).
particularité du droit, notamment au niveau du
traitement de la chevelure, permet d‟étendre ce
lien aux oboles Volques Arécomiques dites
« avec lettres au droit » (par exemple fig. 8 et
9).
Fig. 7. Obole à légende ANΛ ou ANΓ
(OBV-2645)
Par son revers, notre obole se rapproche donc
de ces monnaies, majoritairement issues du
territoire des Volques Arécomiques. On peut
également constater une spécificité commune à
la roue des oboles KT et ANΛ : l‟important
dépassement des rayons au-delà de la jante. Ce
type de traitement qui tend à s‟éloigner du
prototype fait partie des caractéristiques de
dégradation propres aux imitations.
Pour l‟avers, le graphisme du profil et la
chevelure dotée de mèches en Y renversés
rappellent encore une fois l‟obole ANΛ. Leur
forte similitude peut d‟ailleurs laisser penser
qu‟elles furent contemporaines et un lien
typologique évident, bien vu par Feugère-Py2,
est à établir entre ces deux groupes. La
2
FEUGÈRE 2011, p. 233.
26
Monnaies antiques
Fig. 8. Obole au NA. 0.42 g.
Provenance gardoise. Collection privée.
Fig. 9. Obole au T. 0.42 g.
Provenance gardoise. Collection privée.
Côté métrologie, il est particulièrement
intéressant de noter que notre nouveau
spécimen qui pèse 0,41 g offre un poids
nettement supérieur à celui du premier
OMNI N°4 – 02/2012
exemplaire qui présente des traces d‟usure. On
peut donc désormais en déduire que ce groupe
fut très certainement aligné sur la dernière
réduction pondérale de l‟obole massaliète :
poids théorique aux alentours de 0,45 g. Cette
valeur fut utilisée pour les oboles avec lettres
au droit du Languedoc oriental émises vers le
milieu du Ier siècle avant J.-C.
Découvertes à moins de 20 km de distance dans
le piémont méridional des Cévennes, ces deux
monnaies au style particulièrement proche du
groupe à légende ANΛ, peuvent sans grandes
difficultés être attribuées aux séries locales
d‟argent émises par les Volques Arécomiques.
La carte de répartition des spécimens ANΛ
montrent que toutes ces monnaies furent
trouvées à l‟ouest du Rhône et pour leur
majorité dans le secteur du Languedoc
oriental3. Enfin, on peut considérer que ces
groupes, au volume très réduit (un possible seul
coin de droit et un unique coin de revers pour
celui à légende KT), furent certainement émis
sur une période très courte. Lors de la grande
révolte de 77/76 av. J.-C. et les nombreux
combats menés contre Narbonne, les Volques
Arécomiques furent battus par Pompée et
reprirent cependant le combat contre les intérêts
de Rome et des Marseillais, leurs fidèles alliés.
De retour d‟Espagne, Pompée va faire payer
cher, et les Volques devront accepter
d‟importantes concessions4. C‟est dans cette
ambiance « troublée », du début du 2ème quart
du Ier s. av. J.-C, que nous situons la frappe de
ces monnaies. L‟attribution de cette émission
monétaire à une tribu du nord ouest du territoire
des Volques Arécomiques (limites actuelles du
Gard et de l‟Hérault) nous paraît actuellement
la plus probable.
secteur, ces frappes à légendes correspondent à
la fois au besoin de l‟émetteur de se
singulariser au travers de l‟apposition de lettres
et de signes qui lui sont propres, tout en
continuant à s‟aligner sur la typologie et la
métrologie des frappes de Massalia qui restent,
encore pour un temps, la référence commune à
la grande majorité des ethnies du sud-est de la
Gaule et parfois au-delà.
Outre la complétude du revers, l‟apport du droit
de l‟obole KT, jusqu‟alors méconnue, est un
élément crucial permettant d‟inscrire ce type
monétaire dans une série dite « avec chevelure
en Y », dont il reste à établir plus
rigoureusement les liens typologiques qui
tendent à rapprocher des monnaies attribuées
aux massaliètes avec certaines monnaies
arécomiques.
Cette obole à légende KT vient éclairer d‟un
jour nouveau ce rarissime groupe qui circulait
sur le territoire des Volques Arécomiques au
cours du 2ème quart du Ier siècle avant J.-C. Son
style de droit, identique à l‟obole ANΛ,
préfigure celui des nombreuses séries avec
lettres au droit qui foisonnent dans le
Languedoc oriental aux alentours du 3ème quart
du Ier siècle avant J.-C. Reflet des périodes
difficiles des années 77-76 qui vont marquer ce
3
FEUGÈRE 2011, p.234.
Monedas antiguas
27
OMNI N°4 – 02/2012
NOTES ET BIBLIOGRAPHIE
(1) M. FEUGÈRE et M. PY, Dictionnaire des monnaies découvertes en Gaule méditerranéenne
(530-27 avant notre ère), Editions Monique Mergoil et Bibliothèque nationale de France, 2011.
(Nous reprendrons dans ce travail la classification systématisée de ces auteurs).
(2) Il est difficile, en tenant compte du décentrage du premier spécimen, de pouvoir confirmer
définitivement une relation de coin de droit entre ces deux monnaies. Quelques indices, dont la
forme identique de la mâchoire inférieure, peuvent cependant amener à les rapprocher.
(3) La Reconstitution d‟Empreinte Exacte (REE) présentée ici est réalisée par informatique. Ce
procédé de reconstitution consiste à restituer l‟empreinte complète à partir de plusieurs
exemplaires provenant d‟un même coin monétaire, à voir dans C. LOPEZ, Reconstitutions
d‟empreintes - Les monnaies attribuables aux Rutènes. Editions VIIRIA, Montpellier, 2011.
(4) Compagnie Générale de Bourse, Monnaies 34, lot 1185.
(5) À noter que, contrairement aux torques, chaque branche des lettres est fermée par un trait fin.
(6) Concernant cette légende, nous pensons qu‟elle est bien en gallo-grec. Cependant, la forme de
la 3ème lettre (ou de la 1ère) avec une branche plus courte que l‟autre ne se rapproche pas du
lambda habituel (les petites barres de fermeture des branches le confirment). De plus, ce
lambda devrait « normalement » être pointé vers le moyeu de la roue, alors que l‟une de ses
branches (la plus longue) est parallèle à un des rayons. Graphiquement la forme la plus proche
de cette lettre est un gamma. On aurait alors la légende ANΓ ou ΓNA. Il est cependant vrai que
le positionnement rétrograde de cette lettre ne s‟explique pas plus.
(7) Il faut cependant rester prudent avec l‟obole COVE, dont seulement 3 exemplaires ont été
découverts à Toulouse mais dont nous ne connaissons pas de photographies.
(8) A. DEROC, Quelques émissions mal connues d‟oboles à la roue de Marseille, Cahiers
Numismatiques, n° 140, juin 1999, p. 3-11.
28
Monnaies antiques
OMNI N°4 – 02/2012
UNE OBOLE À LA CROIX INÉDITE
Jordan Latournerie
Cette note fait l‟objet d‟une publication d‟une obole s‟inscrivant dans le monnayage à la croix.
L‟auteur compare cette obole avec des monnaies semblables déjà référencées, afin de proposer un
classement fondé sur la typologie.
D
ans le Languedoc occidental, il existe
une grande variété de monnaies dites à
la croix. Elles ont pour habitude de se
classer selon deux groupes distincts : les
drachmes et les oboles (l‟obole est un
divisionnaire de la drachme). Néanmoins, ces
deux groupes de monnaies présentent de
nombreuses similitudes, permettant d‟ailleurs
d‟associer une drachme et une obole sous un
même type descriptif. La monnaie qui fait
l‟objet de cette publication semble être un type
hybride, unique exemplaire connu à ce jour.
Fig. 1 : Obole inédite ; Prov. Pignan
(Hérault) ; 0,44 g ; 9 mm.
L‟avers de la monnaie est composé d‟une tête à
droite au menton prononcé. Devant le visage,
un rameau souvent interprété comme un
dauphin stylisé sur les oboles cubistes à la tête
romanisée. Ce style de motif n‟est pas sans
rappeler les oboles dites « de Grabels » (cf. Fig.
2), présentant une oreille imposante et un nez
pointu.
habitude, le troisième canton présente une
hache, ici bouletée et évidée.
Les types d‟oboles avec tête à droite sont très
rares (voir par exemple OCR-320, Py et
Feugère 2011). Dans le monnayage du
Languedoc, un type d‟obole de Grabels (OCR266) présente une tête à droite qui pourrait être
semblable à l‟avers de notre exemplaire.
Cependant, ce type est représenté par un dessin
qui reste difficile à interpréter pour l‟avers. Il
est donc risquer de s‟aventurer à une
quelconque comparaison.
Concernant le revers, dans l‟ouvrage de Cédric
Lopez « Reconstitutions d‟empreintes, les
monnaies attribuables aux Rutènes », un
exemplaire présente les mêmes motifs. Il s‟agit
d‟une obole aux lunules (CL-101). Le revers est
constitué d‟une croix, contenant une lunule, un
besant, une hache pleine et une autre lunule.
Ainsi, on retrouve une similitude de revers avec
notre obole inédite.
Mais iconographiquement, cette monnaie
semble avoir plus de liens avec le monnayage
cubiste des Volques Tectosages. Tout d‟abord,
le revers à la croix avec la présence de trois
lunules et d‟une hache bouletée est typique des
oboles cubistes à la tête romanisée comme la
monnaie référencée Savès 415 ou la Depeyrot
2002, type 82. Finalement, la présence des trois
lunules et de cette hache est très fréquente sur
les exemplaires Tectosages.
Fig. 2 : Obole « de Grabels ».
Le revers est constitué d‟une croix bouletée.
Dans le premier, deuxième et quatrième canton,
une lunule est nettement visible. Comme à son
Fig. 3 : Obole à la croix (CGB n° v29_0696).
Monedas antiguas
29
OMNI N°4 – 02/2012
De surcroît, il est tout aussi fréquent de
retrouver à l‟avers des oboles cubistes la
présence de dauphins stylisés devant le visage.
Cette monnaie doit donc s‟inscrire au moins
temporairement dans le monnayage des
Volques Tectosages, bien que la provenance
soit héraultaise, ce qui justifie qu‟une
hypothèse d‟attribution aux Rutènes ou
Volques Arécomiques ne soit pas à écarter. La
découverte d‟un exemplaire similaire pourrait
donc aider à l‟attribution de cette obole.
BIBLIOGRAPHIE
DEPEYROT G. (2002), Le numéraire celtique I, La Gaule des monnaies à la croix. Collection
Moneta, 28, Wetteren.
LOPEZ C. (2011), Reconstitutions d‟empreintes - Les monnaies attribuables aux Rutènes. Editions
VIIRIA, Montpellier.
PY M. et FEUGÈRE M. (2011), Dictionnaire des monnaies découvertes en Gaule méditerranéenne,
Editions Monique Mergoil et BNF.
SAVÈS G. (1976), Les monnaies gauloises "à la croix" et assimilées du Sud-Ouest de la Gaule,
Toulouse.
30
Monnaies antiques
OMNI N°4 – 02/2012
EMERITA AUGUSTA Y SUS IMÁGENES MONETALES I
Miguel Ángel Cebrián Sánchez
El presente trabajo tiene como finalidad reflexionar sobre las imágenes de las monedas romanas
emitidas por la Colonia Emerita Augusta. En esta primera parte analizamos los iconos de su ceca
imperial; los tipos de las dos primeras emisiones realizadas por Publio Carisio constatan la
vinculación a los acontecimientos históricos subyacentes a la fundación de la actual Emérita y sus
legiones.
A
ntes de entrar al análisis de las
imágenes monetales de la Mérida
romana nos preguntamos sobre el
carácter oficial o privado de las imágenes
empleadas durante los principados de Augusto
y Tiberio y en las cecas provinciales y en la
Vrbs. Conocemos la amplia discusión en torno
a cómo el emperador intervenía en el proceso
de representación de su imagen, tanto en Roma
como en otras ciudades, que podrían ser las
promotoras de erigir las esculturas en suelo
público y los condicionantes que rodeaban el
hecho: el material (mármol, oro, bronce...); el
tipo escultórico (ecuestre, togado, sedente...) y
cómo el emperador debía de controlar este tipo
de actividades, aprobándolas o declinando el
ofrecimiento. Otras preguntas de difícil
contestación son quién eligió los tipos, si esta
decisión fue espontánea de las comunidades
locales o de particulares o si la elección
obedeció a criterios emanados del emperador y
su círculo de poder. Del completo trabajo de P.
Zanker sobre la revolución iconográfica del
periodo augústeo o de S. R. F. Price sobre los
rituales y el culto imperial en Asia Menor,
pasamos a la opinión de J. Arce, que se centra
en que Augusto en Hispania trató de potenciar
su imagen cívica frente a la militar, tratando de
revalorizar su carácter pacificador e integrador
de todos los aspectos de la Romanitas (1),
frente a otros momentos -época adrianeadonde preponderó la ideología del imperio.
Según J. Arce, si aceptamos que las estatuas
elegidas en Hispania son el resultado de una
decisión tomada por personajes locales, sin
intervención del emperador, obtendremos que
también ellos satisfacían así sus ideales y
deseos de representación imperial. Un buen
ejemplo lo tenemos en la exedra del pórtico
post scaenam del teatro de Mérida, donde se
representan miembros de la familia imperial y
del propio emperador, tradicionalmente
considerado un sacrarium en el que se rinde
culto imperial. J. Arce introduce la idea de que
pudiera ser un Lararium, por lo que tenemos
que interpretarlo como una muestra de culto por
parte de la familia imperial a los dioses
protectores de la ciudad, con el correspondiente
conocimiento del propio princeps y su familia
por lo que el emperador estaba al tanto. Pero es
la preocupación de los responsables de emitir
las imágenes de la moneda emeritense, centro
de este capítulo, es lo que nos mueve a
preguntarnos si pasaron por el veto del
emperador o él, por lo menos, conocía lo que en
su honor se estaba acuñando en la ciudad. Las
dos primeras series a nombre de P. Carisio
tienen un carácter extraordinario y se realizaron
bajo el control del magistrado a la manera de
las emisiones republicanas romanas. Las series
3-5 son deudoras de las imágenes locales de la
Bética y, por último, las series propiamente
provinciales; la sexta, primera de carácter
provincial y última de las augústeas, contiene
en sus leyendas el permiso de Augusto; por
extensión, las demás debieron de contar con él
tanto por los tipos, como por sus pesos,
adaptados a la legislación augústea, como
también por sus leyendas que incluyen los
títulos imperiales o hacen alusión al culto
imperial, ya en tiempos de Tiberio. Creemos
que en este momento histórico, como en tantos
otros la elección de las imágenes guarda
estrecha correspondencia con los gustos de la
clase dirigente.
La opinión de W. Trillmich, en cuanto a las
monedas emeritenses, se centra en el carácter
eminentemente propagandístico de la propia
fundación de la ciudad, como también muestra
la noticia de Dión Cassio (53, 26, 1) (2). La
ordenación del autor parte de la división
propuesta por K. Kraft revelando con exactitud
el esquema: “guerra, victoria y paz” trazado por
Monedas antiguas
31
OMNI N°4 – 02/2012
Octaviano en su amonedación triunfal en la
ceca de Nikopolis (3). Mientras que en las
monedas orientales se indicaba la conquista de
la paz después de la victoria sobre Oriente, los
denarios de Publio Carisio simbolizan la paz
ganada por Augusto en Occidente. El
paralelismo entre las dos ciudades, como obras
de la paz lograda, se acentúa por la repetición
del tema del sulcus primigenius en varios tipos
coloniales y provinciales emeritenses. A lo
largo de nuestro análisis trataremos de matizar
esta hipótesis.
LAS IMÁGENES EMERITENSES
Creemos que las monedas, como documento
oficial y primario, transmiten imágenes que
representan los hitos más representativos y
propagandísticos de una ciudad en relación con
sus acontecimientos históricos y políticos, su
riqueza económica, sus actos sacros, etc. Ellas
son seleccionadas por una élite social en
connivencia con las circunstancias vividas por
cada ciudad.
Por lo que respecta a la Mérida romana vamos a
ir definiendo el significado de sus iconos
monetales,
teniendo
presente
las
interpretaciones anteriores a este trabajo, que
nos ayudarán a acercarnos a unas conclusiones
que aclaren lo que querían destacar las élites
emeritenses que aprobaron los tipos monetales
en los dos primeros gobiernos de la dinastía
Julio-Claudia (4). También somos conscientes
de que en ocasiones estaremos ante
conclusiones coherentes y satisfactorias, pero
en otras el complejo lenguaje de las imágenes
impide dar interpretaciones fidedignas dentro
de un simbolismo tan complicado como el de
las imágenes numismáticas.
Proponemos una nueva división en las series de
Emerita en la que reconocemos tres momentos
de acuñación que comprenderían un primer
grupo de monedas imperiales acuñadas bajo el
mando de P. Carisio (series 1ª y 2ª), donde se
resalta el papel de la ciudad y su territorio
mediante la utilización de tipos que aluden a las
legiones, a los cultos locales y al origen militar
de los fundadores con el trasfondo histórico de
la importancia de la creación de una provincia,
exonerada de la Ulterior, que va a ser capital en
la política hispana de Augusto. Tras ellas, o
32
Monnaies antiques
coetáneas a ellas, agrupamos las series
coloniales con tipos relativos a la propia ciudad
y características deudoras de época republicana
(series 3ª-5ª); por último, las series provinciales
con tipos comunes a las demás cecas hispanas
de época de Augusto y Tiberio (series 6ª-12ª).
En esta trabajo sólo hablaremos de los tipos del
primer periodo.
La nueva estructuración en tres periodos de
amonedación
responde a tres momentos
históricos de la ciudad: el primero, las series
imperiales de P. Carisio, coincidentes con la
fundación de la ciudad, que reflejan temas
triunfales mezclados con elementos religiosos
del territorio, además de alusiones a los
distintivos de las legiones fundadoras y a la
propia ciudad; el segundo, las emisiones
coloniales, donde prevalecen tipos referentes a
las divinidades del territorio con temas del
hecho fundacional; por último el tercer
momento donde encontramos tipos alusivos a
Augusto, a Tiberio, al culto imperial, a la
familia del princeps, junto a temas anteriores,
donde destacamos el tipo pseudoheráldico de la
puerta.
El momento histórico en el que acuña Emerita
comprende los principados de Augusto y
Tiberio. En este momento las emisiones de
Hispania
constituyen
un
grupo
bien
diferenciado de las emisiones indígenas previas
y uno de los factores de esa diferenciación es la
tipología, que en las emisiones anteriores
reservaba sus anversos generalmente a la
divinidad patrona y los reversos para temas
secundarios o complementarios referentes al
anverso. En las emisiones provinciales
augústeas el cambio iconográfico fue radical,
reservándose los anversos al retrato del
emperador y los reversos a temas locales que
las colonias y municipios querían destacar (5).
En la ciudad de Emerita tenemos que tener
presente la diversa naturaleza legislativa de las
emisiones, diferenciando por ello tres conjuntos
realizados por la ciudad que son los tres
grandes apartados que se plantearán a
continuación:
1.- Series 1 y 2 de carácter imperial
acuñadas por P. Carisio en Emerita como
propretor o legado augustal.
OMNI N°4 – 02/2012
2.- Series 3, 4 y 5 emitidas bajo
mandato colonial con pesos y tipos de tradición
republicana.
3.- Series 6-12 emisiones provinciales,
la sexta augústea (post. 2 a. C por la inclusión
del título de Pater Patriae en la leyenda) y el
resto de época tiberiana.
La iconografia de cada uno de los tres
apartados va a ser diferente. Para el primer
apartado los temas empleados son romanos; en
el segundo, los tipos resaltan temas locales
como las monedas de finales de la república en
la Bética y el tercero, entronca con los temas
empleados por el resto de las capitales
provinciales: la romanidad provincial y la
adhesión a la figura del emperador.
Recordamos que sólo trataremos el primer
periodo en este artículo.
TIPOS DE LAS SERIES IMPERIALES DE P.
CARISIO.
En los dos siguientes apartados vamos a
encontrar tipos que se repetirán, lo que en éste
momento no va a ocurrir por ser la primera
etapa productiva de la ciudad que situamos
cronológicamente en los primeros años de la
fundación (25-23 a. C.), hecho relevante, ya
que nos encontraríamos con la primera ceca
occidental en emitir moneda imperial augústea
y a la que pertenecen las imágenes que más
adelante se citan (6).
Antes de entrar a analizar los diferentes tipos
existentes en este apartado queremos insistir en
que nos encontramos con imágenes que forman
subconjuntos dentro del grupo al que
pertenecen; de esta manera, hemos visto que
unos guardan una relación más fuerte con otros
detectando las siguientes coincidencias:
Los anversos de las monedas emeritenses
tienen reservada, en amplia mayoría, sus
imágenes a la cabeza de la más alta figura del
Estado, aunque las ciudades no estaban
obligadas a ello pues sabemos que hubo cecas
que obviaron en representarla, por ejemplo
Sagunto, Emporiom Cartagonova... En este
caso se trata del princeps Augusto, hecho
habitual en las cecas augústeas de la Gallia
[(Vienna (RPC, 517) Narbo (RPC, 518),
Lugdunum (RPC, 514) y Arausio (RPC, 533)]
y prácticamente en todas las cecas provinciales
hispanas, donde la cara principal de la moneda
se reserva al emperador y a los miembros de la
familia imperial, como norma que aparece en
estos momentos y que va a sustituir a los
dioses, que en época anterior monopolizaban
mayoritariamente los anversos de las monedas
romanas republicanas (8). En la península
ibérica vemos que las emisiones provinciales
romanas tienden a seguir la tradición marcada
por Roma y en sus anversos muestran la cabeza
del príncipe, aunque existieron algunas
ciudades que jamás la utilizaron [son los casos
de Carteia (RPC, 111-122) y Emporiae (RPC,
234-258)] y otras donde no fue siempre el tipo
empleado, sin que ello fuese una falta de
aprecio al emperador y su casa (9).
Este tipo se suele representar de perfil, a
derecha o izquierda. Además puede aparecer
con corona cívica (otorgada en los homenajes
recibidos en al año 27 a. C., por haber salvado a
la ciudadanía), radiado (elemento propio de
asimilación a la deidad, suele aparecer en época
Julio-Claudia, postumamente) o desnudo (10).
1.1.- CABEZA DE AUGUSTO
En el caso de la Mérida
1º Grupo:
Escudo, cuchillo afalcatado y lanza(1.3), casco
romana nos encontramos
Motivos militares.
con espada y hacha (1.5).
con su representación en
Victoria coronando trofeo militar (1.2), trofeo
prácticamente todas las
2º Grupo:
militar (1.4), cautivo arrodillado con trofeo
emisiones
del
periodo
Tipos triunfales.
militar (1.6) (7).
augústeo (series emitidas
3º Grupo:
por P. Carisio, como por las
Tipos
Puerta con perímetro murario (1.7).
propiamente
provinciales
fundacionales.
Monedas antiguas
33
OMNI N°4 – 02/2012
augústeas de la sexta serie que pertenecen a las
monedas del apartado tercero) y parte del
tiberiano con corona radiada, donde aparece su
retrato en temas de deificación. La inclusión de
la corona radiada es uno de los temas
iconográficos que nacen en el periodo
helenístico griego, para pasar al romano como
una metáfora comparativa con las divinidades
que permitirían a todo espectador percibir las
cualidades del personaje representado. Se trata
por tanto de una propaganda premeditada a
todos los niveles de gobierno (central, local y
provincial).
M. Bergmann opina que todas las imágenes
radiadas deben entenderse en el contexto
histórico temporal y territorial, ya que en cada
zona del imperio los habitantes darían una
interpretación diferente de la divinidad. Si bien
en otras zonas, como podría ser las ciudades
helenísticas de Oriente o la propia Roma, se
diera una interpetación política de la corona
radiada, pues los habitantes de la Vrbs conocían
la trayectoria de apropiación de símbolos
divinos por parte de los monarcas helenísticos
(11).
Los retratos del príncipe suelen responder en
sus rasgos físicos a los realizados tras la batalla
de Actium y tratan de representar a un hombre
adulto de proporciones armoniosas, a decir de
P. Zanker, orientadas hacia un canon clasicista
y diferente a las anteriores representaciones de
Octaviano, donde
encontramos
formas
angulosas e irregulares. Sin embargo, A.
Beltrán caracteriza su retrato como “civil”,
próximo a lo helenístico con un tratamiento
parecido al utilizado para los semidioses (12).
En este sentido creemos que el autor toma en
consideración los modelos mayores de la
escultura sin reparar en bocetos y láminas que
reprodujeran el retrato, hoy desaparecidos. En
la ceca de Emerita es el tipo “Actium”, dada su
temprana fecha 25-23 a. C., el utilizado en las
series donde se emplea el retrato de Augusto, es
decir: la primera, segunda y la sexta. Ahora
bien, tenemos que tener presente dos
salvedades: la primera, que hay una gran
diferencia entre las series de plata imperiales
realizadas por P. Carisio (1ª y 2ª series) y las
provinciales (6ª serie) posteriores que en
ocasiones traslucen una estereotipación de las
34
Monnaies antiques
facciones augústeas, hecho que caracteriza las
producciones locales; la segunda es la limpieza
de los cuños que obliga a arañarlos dejando su
huella en los diferentes peinados augústeos y
que los hacen diferentes a los realizados en
escultura, por lo que no podemos hacer
comparaciones absolutas de estilo entre los
retratos escultórico y las representaciones sobre
moneda emeritense.
Creemos que la utilización del retrato en las
monedas provinciales no sólo responde a la
adhesión que las élites locales tomaron con
referencia al poder unipersonal de Augusto tras
la victoría de Actium, imitando el modelo de la
ceca de Roma o de los propios restos
escultóricos encontrados en el solar emeritense
(13) en respuesta de lealtad y sumisión a su
persona, sino que además de facilitar las
transacciones con moneda, puesto que la
utilización del retrato del emperador en la
moneda potencia su aceptación fuera del
territorio que la acuña (14).
En el conjunto de las demás cecas hispanas la
cabeza del emperador es uno de los elementos
más representados en los anversos, sin
diferenciación en ninguna de las tres provincias
peninsulares, hecho que se convierte en norma
tras la batalla de Accio. Este fenómeno se da
casi voluntariamente en todas las ciudades
hispanas, siendo las series emeritenses de P.
Carisio, que aquí tratamos, una de las primeras
monedas que en Hispania llevan este tipo (2523 a. C); seguidamente, otras representaciones
tempranas de la cabeza de Augusto las vemos
en Osca (RPC, 281), Calagurris (RPC, 431) y
Segovia (RPC, 478), que siguen el modelo ideal
de Actium aunque no se puede asegurar su
cronología. En cualquier caso durante el
principado de Augusto la práctica totalidad de
las cecas emplea su retrato en anverso a
excepción de Emporiae (RPC, 234-258),
Carteia (RPC, 111-123) y algunas emisiones de
Gades (RPC, 82-87) y Cartagonova (RPC,
146-159), tal como vimos con anterioridad.
OMNI N°4 – 02/2012
1.2.- VICTORIA CORONANDO TROFEO
MILITAR
Los numerosos quinarios que acuñó la ceca
emeritense en época romana, con un reverso
que presenta a una victoria que corona con
laurel un trofeo militar, son bien conocido
sobre moneda romana y tiene antecedentes
iconográficos en monedas de la ceca de Roma
(RRC 489/4 quinario; 504/1 denario) (15) y en
cuanto a las armas que adornan el maniquí
encontramos paralelos en los ases emitidos por
Turirecina
(DCyP,
1,
383).
Estas
representaciones entroncan directamente con
una concepción romana de la victoria militar
que, en pie, culmina el momento coronando con
laurel (símbolo de eternidad) el trofeo que
representa parte del botín del vencedor. Las
monedas republicanas, antes referidas, tienen
en sus maniquies las armas propias de los
vencidos. El caso emeritense sigue este mismo
esquema: a los pies y a ambos lados
encontramos la misma punta de lanza (diestra)
y la falcalta (siniestra) que, sumado a la caetra
enmangada en el brazo derecho, completarían
la panoplia comentada para los denarios con los
que forman la primera serie , además de ser el
mismo esquema que hemos comentado en el
apartado anterior y que nos hace pensar en un
doble significado temático, al poder hacer
alusión a unos sacra ofrecidos por Augusto a la
divinidad del territorío emeritense (16). Este
hecho iconográfico es otro de los puntos que
nos llevan a pensar que nos encontramos con
una primera emisión, de carácter oficial, que
conmemora la victoria de las guerras cántabras
a la vez que honra a la deidad del territorio en
el que Emerita esta incluida, frente a los tipos
de la segunda emisión que hacen referencia a
la fundación de Augusta Emerita y a sus
legiones allí asentadas.
1.3.- ESCUDO, CUCHILLO AFALCATADO Y
LANZA
En las acuñaciones de denarios realizadas por
P. Carisio observamos la ilustración del
armamento indígena, según criterio romano, de
la península ibérica. En los reversos, donde se
emplea el escudo circular con acusado umbo
central y diferentes adornos en el centro de la
composición, el cuchillo afalcatado a la derecha
y la punta de lanza a la izquierda, vemos
representada una alusión directa a las
circunstancias bélicas que se están produciendo
directamente en el norte de la península ibérica:
las guerras cántabras en concomitancia con los
cultos del territorio de la ciudad. Por lo que
respecta a los paralelos en la ceca de Roma no
hemos encontrado nada asimilable en época
republicana pero sí en el NO. Tenemos que
esperar a época augústea para tener un paralelo
parecido en un denario romano, con la cabeza
de Marte en el anverso y en su reverso vemos
un escudo redondo y en la parte posterior se
cruzan una espada y una lanza (RIC, I 2, 274).
Pensamos que la ejecución del tipo emeritense
responde a la celebración de la victoria en
Hispania de Augusto representado por las
armas prototípicas de los vencidos, analizadas
desde el punto de vista romano.
En el trabajo de W. Trillmich encontramos un
análisis conjunto de todos los denarios
emeritenses conformando lo que sería un
programa iconográfico que abarcaría el
conocido esquema propagandístico augusteo:
“guerra, victoria y paz”, expuesto por P. Zanker
en su estudio sobre las imágenes de época
augústea (17). Sin embargo M. P. GarcíaBellido en torno a los paralelos iconográficos
con las monedas de Turiregina (DCyP, 1, pág.
383) (18), le hace pensar que estas armas eran
de sacra ofrecidas a la divinidad del territorio y
que el propio Augusto representó estos objetos
en sus denarios y quinarios de la primera serie
imperial emeritense como sacra de una
Monedas antiguas
35
OMNI N°4 – 02/2012
divinidad territorial. La autora destaca dos
claras diferencias en los tipos triunfales: uno se
ajusta claramente a la tipología tradicional de
los trofeos y otra debe corresponderse con una
iconografía de victoria. En la segunda opinión,
debemos ver unas armas (cuchillo afalcatado,
escudo y lanza) iguales y en la misma
disposición que en las monedas acuñadas en
Turirecina cien años antes y que por tanto
deben tener el mismo significado de evocatio
(19).
Por lo que respecta a este tipo de armamento
debemos analizarlo desde dos puntos de vista:
las imágenes en sí y su referencia a los demás
tipos de los denarios emeritenses. Si nos
atenemos a las armas que se representan, parece
que se trata de las de los vencidos en la
contienda cántabra; su disposición es siempre la
misma: escudo redondo y decorado, en el
centro; a la derecha, un cuchillo afalcatado y
una lanza a la izquierda (20). Podemos entender
las representaciones del escudo y de la lanza
como parte del armamento utilizado por los
pueblos indígenas, pero con el cuchillo
afalcatado el caso es diferente, ya que nos
encontramos con un elemento no utilizado por
los cántabros como parte de su impedimenta
militar. Estas armas de mano se encuentran
atestiguadas arqueológicamente en el arco
mediterráneo y han sido estudiadas por F.
Quesada, pero no se hallan en el norte de la
península ibérica (21). La pregunta que surge
de esta representación es ¿por qué los romanos
incluyen entre las armas de los vencidos del
norte peninsular el cuchillo afalcatado?; cabría
la posibilidad de que un arma tan representativa
de los pueblos hispánicos fuera asimilada por
los romanos como perteneciente a la totalidad
de la Península, de ahí que pudiera ser un
distintivo reconocible desde el punto de vista
romano. Esta opinión es ofrecida por F.
Quesada en su obra, en la que también nos
informa de las características peculiares de la
representación emeritense, haciéndola coincidir
con los tipos más tardíos de falcatas que
presentan la empuñadura casi cuadrada,
característica propia de muy pocas armas. Nos
inclinamos a pensar que la posibilidad de
encontrarnos con sacra, propuesta de M. P.
García-Bellido reutilizados en acuñaciones
romanas, ya testimoniadas en emisiones
36
Monnaies antiques
anteriores para homenajear cultos arraigados en
un territorio, es factible dentro de la política de
sincretísmo practicada por Roma en la
conquista de la península ibérica; este tema se
repetirá en los reversos de los quinarios de esta
misma serie emeritense.
Este tipo responde, pues, a la nueva
configuración del territorio, donde tras los
acontecimientos históricos se dejan entrever los
cultos tradicionales que continúan perviviendo
en el mundo romano
1.4.- TROFEO MILITAR
Uno de los tópicos más constantes en el espíritu
romano es el relativo a la vida militar y con ella
a la victoria en el combate. Los generales en
campaña tras la victoria solían celebrar su
triunfo de múltiples formas, una de ella era
apropiándose de las armas e impedimenta de
los vencidos como respuesta a haberlos dejado
indefensos. En la relivaria romana y en la
moneda es donde mejor encontramos ejemplos
de los momentos que prosiguen a la victoria
romana (22). Veamos el ejemplo que nos ofrece
Emerita.
En las emisiones de plata de la República
encontramos varios ejemplos del año 43-45 a.
C. de C. Cassio y M. Servilio (RRC, 505/5) y
de Brutus y Casca Longo (RRC, 507/1b), que
sirven como antecedentes a las representaciones
emeritenses. El trofeo, según G. Picard, es un
maniquí que sostiene la coraza y armas del
vencido, siempre va acompañado a sus pies por
elementos accesorios que completan su
significado; por ejemplo, si la victoria se
produce en el mar nos encontramos que en la
base se coloca unos rostra; si por el contrario, la
victoria es terrestre suelen representarse a los
derrotados, bien mediante amontonamiento de
armas, o con los propios vencidos en actitudes
sumisas: arrodillados, desnudos, atados al
OMNI N°4 – 02/2012
maniquí, llevándose las manos a la cabeza en
señal de desesperación y de vergüenza (23). De
la misma manera que los tipos emeritenses son
deudores de anteriores representaciones
romanas, fundamentalmente en este caso,
además van a ser objeto de copia en series
augústeas de la Cartagena romana a nombre de
Hibero y L. Bennio, en cuyos reversos se
representa el mismo tipo del trofeo emeritense.
En Emerita vamos a encontrar tres variedades:
trofeo con amontonamiento de armamento, con
victoria que lo corona (antes comentado) y con
cautivo
desnudo
y
arrodillado
que
comentaremos más adelante, alusiones claras a
las legiones fundadoras de Emerita.
1.5.CAUTIVO
TROFEO MILITAR
ARRODILLADO
umbo central y colgando debajo una espada
(25). En su mano derecha se puede apreciar un
elemento de difícil interpretación: del centro
parten dos líneas rectas divergentes (en aspa)
que cierran por arriba con una línea curva
rematada por dos glóbulos y por debajo una
“T” invertida; el remate superior se asemeja
tanto al que se representa en el adorno del casco
que aparece en la moneda RIC, I2, 8 que
creemos encontrarnos ante una alusión a las
armas distintivas del ejército cántabro vencido
en el norte peninsular, siendo posible que se
trate de su anagrama.
1.6.- CASCO CON MASCARA, ESPADA Y
HACHA
CON
Por lo que respecta a esta representación en el
contexto romano, tenemos que decir que no es
una manifestación ex novo dentro de la moneda
oficial romana, donde encontramos paralelos
muy próximos fechados en la mitad del siglo I
a. C. (RRC 427/1 y 452/5). Del primero de
ellos debemos de decir que es idéntico al
emeritense salvo por la particularidad de que
las armas son solamente dos lanzas en aspa y
que conmemoran la victoria de Gaius
Memmius en el año 56 a. C. en la provincia de
Bitinia y Ponto como comandante del ejército
en exploraciones militares que se consideraron
como un hecho histórico digno de ser
reproducido en moneda (24).
Este anverso emeritense representa, en primer
término, una figura humana en genuflexión con
las manos atadas a la espalda y la cabeza
agachada; en segundo término se muestra un
trofeo con las vestiduras del vencido y sus
armas más emblemáticas, entre ellas
destacamos el casco semicircular sin apéndices
reconocibles que corona el maniquí, a la
derecha se coloca un escudo redondo con gran
De nuevo estas armas no estan representadas
con la iconografía de trofeo. El empleo del
casco con máscara es una singularidad dentro
de la iconografía numismática en las emisiones
del primer grupo, ya que nos encontramos
posiblemente con una referencia a las legiones
vencedoras y no a los vencidos. El tipo
representado se encuentra en el centro,
escoltado por espada a su derecha y doble
hacha ligeramente inclinada a su izquierda. Nos
llama poderosamente la atención el casco que
se corona por lo que parece ser un penacho de
plumas, el cual ha sido considerado, por sus
particularidades, como el distintivo de una de
las legiones fundadoras de Emerita Augusta: la
legio V, cuyo apelativo es el de Alaudae, en
alusión a la alondra simbolizada por sus
plumas. Esta opinión, que compartimos
eminentemente por criterios de parecidos
formales, es mencionada por E. Ritterling y
posteriormente por A. García y Bellido, y poco
conocida entre los numismatas del siglo XX
(26). Otra interpretación es la que aporta J. B.
Giard que interpreta (con interrogante y sin otra
explicación) el coronamiento del casco como
una cornamenta de ciervo (27). Por último
mencionaremos la aparición de cascos alados
en las monedas republicanas romanas, en
Monedas antiguas
37
OMNI N°4 – 02/2012
concreto en las representaciones de Roma,
abarcando una amplia tradición y cronología,
desde la creación del denario en el siglo III a.
C. hasta la segunda mitad del siglo I a. C., cuya
representación y contenido nada tiene que ver
con nuestro tema.
Tenemos que considerar este tipo vinculado a
los anteriores en cuanto a que alude a la causa
de la fundación y al origen militar de los
fundadores.
1.7.- PUERTA Y PERIMETRO MURARIO
Ante el tipo puerta de la ciudad nos
encontramos lo que consideramos un unicum
iconográfico en Hispania, de cuya novedad
hablaremos al final del capítulo en el repertorio
de imágenes monetales hispanas de época
antigua y emblema heráldico, en opinión de A.
Beltrán y más recientemente de F.Chaves, E.
Melchor, M. Oria y R. Gil (28). Por lo que
respecta a las emisiones de la ceca republicana
de Roma encontramos en el año 57 a. C. un
denario bajo el mandato de C. Considi Noniani
(RRC, 424, 1) con el templo de Venus rodeado
por perimetro murario y en el frente puerta con
topónimo ERVC (Eryx) encima de la entrada.
Otro paralelo lo vemos en el 41 a. C. en otro
tipo de reverso con puerta y con valor de aúreo,
acuñado por L. Servius Rufus (RRC, 515, 1).
Su forma es diferente a la emeritense ya que se
trata de una puerta de un solo vano, rodeada por
nueve pequeñas puertas con las mismas
características; sí tiene parecidos formales con
el tipo numismático de Mérida en cuanto a los
remates de los merlones en “T” y de colocar
cartela con topónimo, en este caso: TVSCUL
(Tusculum) lugar de donde es originario el
monetal (29). Este tipo de puerta emeritense se
vuelve a reproducir en las dos etapas siguientes:
las emisiones coloniales y las series
provinciales de Augusto y Tiberio, atestiguando
38
Monnaies antiques
el éxito del mismo y la importancia que le
concedió la ciudad de Emerita.
El elemento poliorcético que se representa en
los reversos de dupondios y ases emeritenses se
describe, en todas las series donde aparece,
como una puerta monumental cuyos lienzos de
muralla se sitúan entre dos torres, con doble
arco de medio punto de acceso y rematado por
merlones en “T” de grandes proporciones (30).
Las torres se caracterizan por ser cilíndricas y
rematadas por almenas, también en algunas
emisiones se aprecian ventanas en ellas. El gran
arco que abarca de lado a lado el tipo tiene
representado sendos merlones distanciados que
pueden ser de “T” en secciñn, o bien
corresponder a grupos de tres en tres merlones
equidistantes; en resumidas cuentas se trata de
pequeños detalles cuya naturaleza radica en la
simplificación de detalles por parte del abridor
de cuños a la hora de realizar el tipo. Con
referencia a los remates de las torres, A. Beltrán
nos informa de que existe una variante con
remate semiesférico coronado por una “piða”
que no hemos podido corroborar por las
referencias que nos ofrece. En cuanto a la
cronología del tipo representado tenemos que
plantear una fecha inmediatamente posterior a
la fundación de la colonia, ya que al aparecer
en estas monedas de P. Carisio acuñadas en el
25-23 a. C., nos atestigua la premura de las
obras que la ciudad emprendió en corto espacio
de tiempo.
Los testimonios arqueológicos de tan
significativo monumento poliorcético deben de
corresponder al tradicionalmente identificado
como la puerta, situada a oriente, que daba al
puente sobre el Guadiana y que se localiza con
el término, al este, del decumano máximo. En
este emplazamiento se ha documentado,
embutido entre restos de época árabe la
posibilidad del hallazgo de los restos del
monumento en cuestión. En opinión de J. M.
Álvarez la planta correspondería a un edificio
de doble entrada muy en concordancia con el
intenso tráfico que debió de tener el puente y
que, por lógica, obedecería al ordenamiento del
tráfico utilizándose una puerta de entrada y otra
de salida (31).
OMNI N°4 – 02/2012
El otro elemento que se añade a la puerta es el
arco murario, que debe tratarse de una
simplificación del perímetro mural de la ciudad
y, por extensión, de una alusión a la propia
fundación. Todo ello lo podemos poner en
conexión con los ritos fundacionales de los que
la ciudad ha dado otras pruebas en iconografía
monetal, como la conocida yunta fundacional
de la que hacemos un análisis en este mismo
capítulo.
Un paralelo de la Puerta emeritense lo
encontramos fuera de la numismática, en una
obra musivaria donde el motivo que rodea el
mosaico es el de una obra poliorcética que tiene
en sus puertas el mismo esquema de detalles
(doble puerta, dos torres a los lados, merlones
en “T”, y saeteras) que el de las monedas
emeritenses (32). No obstante, vemos cómo el
modelo responde a adornos musivarios de los
que encontramos ejemplos en la península
ibérica, aunque del que hacemos referencia se
estudió recientemente por H. Lavagne dentro de
un artículo dedicado a los talleres de mosaico
romano en la actual Provenza y en concreto a
un ejemplar de Orange que muestra como
paralelo de su estudio y que tiene una
cronología posterior a las monedas de Emerita
(33). Ya en el siglo tercero se muestran
ejemplos parecidos en todo el occidente del
imperio con motivos poliorcéticos y modelos
de puertas diferentes, en concreto, en la villa
d´Orbe-Boscéaz en la actual Suiza. En cuanto
al detalle del arco con merlones de Emerita hay
un esquema parecido en la musivaria posterior,
en concreto, en Ostia, donde encontramos en
mosaicos en blanco y negro este motivo común
en representaciones defensivas romanas (34).
Todos estos ejemplos musivarios son
posteriores en el tiempo a las monedas
emeritenses pero reafirman el valor que la
diferenciación de espacios, lo ciudadano y lo
externo o natural, tenía para la ideología
romana, implícita en los tipos poliorcéticos de
la Mérida romana.
También creemos ver otro paralelo en la
plástica romana, fundamentalmente en el
concepto de ciudad antes referido; se trata de la
cabeza tocada con corona mural conservada en
el Museo Arqueológico de Sevilla, procedente
de Itálica y que representa a una Fortuna
ciudadana, expresión alegórica de la propia
Italica (35). Se atribuye una cronología
Adrianea a la pieza, coincidiendo con el gran
proyecto de ampliación urbanística y la
dotación de edificios públicos, sin dejar de lado
la reiterada representación de alegorías
territoriales que aparecen en los reversos de las
monedas de época adrianea nos parece una
representación, posterior a la emeritense, pero
que tiene a la ciudad y su protección como
protagonista (36).
La imagen de la puerta emeritense nos parece el
tipo más representativo de la ceca, empleado,
como ya hemos dicho, en la moneda imperial
(donde nace), en la colonial y en la provincial.
Se trata de un distintivo ciudadano y territorial
que rasalta la preservación de la identidad y del
orgullo cívico de cada ciudad y continua hoy en
día siendo el tipo heráldico de la actual ciudad
(37).
1.8.- TIPO EPIGRÁFICO
Dentro de las emisiones de P. Carisio nos
encontramos en los ases (RIC, I2, 15,16) una
leyenda que hace las veces de tipo principal: P
CARISIVS LEG AVGVSTI. Pensamos que el
destacar de esta manera su nombre y cargo es
una manera de propaganda personal que ya
encontrabamos en monedas de época triunviral
(RRC, 533/3a; 534/1,2 y 3; 542/1 y 2). Así, en
la península ibérica se utilizó en series
provinciales en el lugar de un tipo figurativo,
sobre todo, en pequeñas denominaciones de las
cecas de la Tarraconense ya que esta práctica
requiere una menor pericia por parte de los
abridores de cuños; cabe como excepción su
utilización en Caesaraugusta sobre reversos de
dupondios y sestercios (38). Además, mientras
en Emerita el tipo hace referencia al magistrado
imperial responsable, en las cecas de la Citerior
suelen ser topónimos y en menor medida
magistrados, por lo que creemos que este tipo
fue utilizado por las clases políticas locales con
Monedas antiguas
39
OMNI N°4 – 02/2012
los mismos fines propagandísticos que en
Roma. En el estudio de las leyendas hacemos
constar que el valor de este tipo recae más en
ser un epígrafe que en tipo del reverso
comentado.
lectores de la revista OMNI a la segunda
entrega en el siguiente número de las emisiones
de las Series 3, 4 y 5 emitidas bajo mandato
colonial con pesos y tipos de tradición
republicana.
Tras este somero análisis de los tipos de las
emisiones imperiales, nos resta convocar a los
NOTAS YBIBLIOGRAFIA
(1)
MACMULLEN, R. (2000) Romanization in the Time of Augustus, London. ZANKER, P.
(1992) Augusto y el poder de las imágenes, Madrid. GALINSKY, K. (1996) Augustan
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Asia Minor, Cambridge. ARCE, J. (2002) “Estatuas y retratos imperiales en Hispania
Romana”, AEspA 75, pp. 235-250. Las series referidas en este artíclo siempre son al Roman
Provincial Coinage.
(2)
TRILLMICH, W. (1990) “Colonia Augusta Emerita, die Hauptstadt von Lusitanien”,
Stadtbild und Ideologie, München, pp. 300 y ss.
(3)
KRAFT, K. (1968) Zur Münzprägung des Augustus, Frankfurt.
(4)
KISS, Z. (1946) L´iconographie des princes Iulio Claudiens au temps d´Auguste et de Tibère,
Varsovie. Para el retrato de Octavio-Augusto: Toynbee, J. M. C. (1978) Roman Historical
Portraits, London, pp. 51-56; Walker, S., Burnett, A. (1981) The Image of Augustus, London.
(5)
RIPOLLÈS, P. P. (1997) “Las acuðaciones cívicas de la península ibérica”, Historia
monetaria de la Hispania Antigua, Madrid, pp. 375-380.
(6)
RIC, I2, pág. 25.
(7)
Esta agrupación nos recuerda al esquema que propone W. TRILLMICH: Guerra, victoria y
paz expuesto en: (1990) “Colonia Augusta Emerita, Die Haupstadt von Lusitanien”, Stadtbild
und Ideologie, München, pp. 300-302.
(8)
ZANKER, P. (1992) nota 3, Madrid, pp. 76-80;124-127.
(9)
Gades mantiene el retrato de Heracles y en el caso de Cartago Nova su aparición es utilizada
tras sucesivas emisiones sin él: véase: LLORENS, M. M. (1994) La ciudad de Cartago Nova:
Las emisiones romanas, Murcia. BELTRÁN, F. (2002) “Identidad cívica y adhesiñn al
príncipe en las monedas coloniales hispanas”, Religión y propaganda política en el mundo
romano, pp. 166-168.
(10) Este tipo de elementos se conocen desde hace tiempo y fueron tratados en el siglo XX entre
otros por: Grant, M. (1946) From Imperium to Auctoritas, Cambridge; BLÁZQUEZ, J. M.
(1974) “Propaganda dinástica y culto imperial en las acuðaciones de Hispania”, I CNN,
Zaragoza, pp. 311-329; más recientemente: GOMIS, M. (1997) “Augusto: El nacimiento de
un nuevo lenguaje iconográfico”, La moneda en temps d´August, Barcelona, pp. 40-42.
(11) BERGMANN, M. (1998) Die Strahlen der Herrscher: theomorphes Herrscherbild und
politische symbolik im Hellenismus und in der römischen Kaiserzeit, Mainz.
(12) BELTRÁN, A. (1984) Repertorio iconográfico de los Emperadores romanos a través de las
monedas 27 a. C., Barcelona.
(13) GARRIGUET J. A. (2001) La imagen del poder imperial en Hispania, tipos estatuarios,
Murcia, pp. 2-12.
40
Monnaies antiques
OMNI N°4 – 02/2012
(14) WALLACE-HALDRILL, A. (1986) “Image and Authority in the Coinage of Augustus”, JRS
LXXVI, pág. 80; RIPOLLÉS, P. P.; ABASCAL, J. M. (1996) Las monedas de la ciudad
romana de Segobriga (Saelices, Cuenca), Barcelona, pp. 27-29.
(15) PICARD, G. Ch. (1957) Les trophées Romains la Religion et l´art triumfal de Rome, Paris;
Hölscher T. (1967) Victoria Romana, Mainz; MCCORMICK, M. (1986) Aeternal Victory,
London.
(16) En opinión de M. P. GARCÍA-BELLIDO: (1991) “Las religiones orientales en la península
ibérica: documentos numismáticos”, AEspA 64, pág 61.
(17) TRILLMICH, W. (1990) “Colonia Augusta Emerita, Die Hauptstadt von Lusitanien”,
Stadtbild und Ideologie, München, pp. 300-302; ZANKER, P. (1992) Augusto y el poder de
las imágenes, Madrid, pp. 76-80.
(18) GARCÍA-BELLIDO, M. P. (1991) “Las religiones orientales en la península ibérica:
documentos numismáticos I”, AEspA 64, pág. 61.
(19) DCyP, tomo II, pág 382; GARCÍA-BELLIDO, M. P. (1997) “La imagen de Hispania y su
prehistoria”, OLMOS, R. y J. BLÁNQUEZ (eds.) Iconografía ibérica, iconográfia itálica:
propuestas de interpretación y lectura, Madrid, pp. 331-351.
(20) SANDARS, H. (1913) The Weapons of the Iberians, Oxford.
(21) QUESADA, F. (1992) Arma y símbolo: la falcata ibérica, Alicante, fig. 29, pág. 130 y 114 y
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(22) BRUHL, A. (1929) “Les influences hellénistiques dans le triomphe romain”, MEFRA, 46, pp.
77 y ss; KÜNZL, E.(1988) Der römische Triumph, Bonn; PAYNE, R. (1962) The Roman
Triumph, London.
(23) PICARD, G. Ch. (1957) Les trophées Romains la Religion et l´art triumfal de Rome, Paris.
Otros ejemplos no monetales de la conmemoración del triunfo de Augusto los podemos ver
analizados por G. C. PICARD: Los relieves de la coraza en la escultura de Prima-Porta, el
monumento de St-Bertrand de Conmines, la esculturra del niño portador de trofeo de
Narbona, el trofeo del museo de los Conservadores, los trofeos del teatro de Jerusalén, el Arco
de Carpentras y la placa cerámica de Ginebra, nos ofrecen una idea del triunfo diplomático,
militar y político en época de Augusto de la que las ciudades hispanas no pudieron ser ajenas.
(24) HARLAN, M. (1995) Roman Republican moneyers and their coins (63 BC-49 BC), London,
pp. 78 y ss.
(25) NEGUERUELA, I. (1990) Los monumentos escultóricos ibéricos del Cerrillo de Porcuna
(Jaén), Madrid, pp. 111-90, encontraremos una amplia documentación de fuentes antiguas
que tratan la panoplia militar íbera.
(26) GARCÍA y BELLIDO, A. (1959) “Las colonias romanas de Hispania”, Anuario de Historia
del Derecho Español 29, Madrid, pp. 147 y ss.
(27) GIARD, J. B. (1976) Catalogue des monnaies de l´Empire Romain, I Auguste, Paris, pág 162.
(28) BELTRÁN, A. (1953) “Los monumentos en las monedas romanas”, AEspA XXIV, pp. 5356; Chaves, F. MELCHOR, E.; ORIA, M.; GIL, R. (2000) “Los monumentos en la moneda
hispanoromana”, Quaderni ticinesi di numismatica e antichità classiche”, Vol. XXIX,
Lugano, pp. 301; FUCHS, G. (1969) Architekturdarstellungen auf römischen Münzen der
Republik und der frühen Kaiserzeit, Berlin.
(29) RRC, tomo I, pág. 523, otro comentario de estos paralelos con respecto a la puerta emeritense
lo encontramos en: Volk, T. (1997) “Hispania and the gold and silver coinage of Augustus”,
La moneda en temps d´August, Barcelona, pp. 69-70; reflexionando el autor sobre estas
Monedas antiguas
41
OMNI N°4 – 02/2012
imagenes los topónimos y su relación con el lugar de acuñación ya que en estos paralelos no
coincide el lugar de acuñación (Roma) con el topónimo que muestran (Eryx y Tusculum).
(30) PICARD, G. Ch. (1962) Les murailles: les portes scupltées á images divines, Paris.
(31) ALVAREZ, J. M. (1981) El puente y el urbanismo de Augusta Emerita, Madrid.
(32) AA. VV. (1997) La villa gallo-romaine d´Orbe-Boscéaz et ses mosaïques”, Lousanne, pág.
44.
(33) LAVAGNE, H. (2001) “Quelques ateliers de mosaïque romano-provençale”, Actes du VIII
Colloque International pour L´Étude de la Mosaïque Antique et Médiévale, Lausanne, pp. 1326 (fig. 6).
(34) BECATTI, G. (1965) “Quelques caractéristiques de la mosaique noire et blanque en Italie”,
Actes du I colloque La Mosaique Grecoromaine, Paris, pp.15-28, fíg. 7.
(35) AA. VV. (1996) La ciudad hispanorromana,Catálogo de la Exposición, Madrid, nº 1, pág
263; LEÓN, P.; RODRÍGUEZ, P. (1996) “La ciudad hispanorromana en Andalucía”, La
ciudad Hispanorromana, pp. 12-53; LEÓN, P. (1995) Esculturas de Itálica, Sevilla.
(36) RIC, II, nº: 265, 266, 267, 268, 273, 274 y 276.
(37) BELTRÁN, F. (2002) “Identidad cívica y adhesiñn al príncipe en las monedas coloniales
hispanas”, Religión y propaganda política en el mundo romano, Barcelona, pág. 160.
(38) RPC, 150, 156, 160; 217a; 274-277; 286, 288, 290, 303; 329, 348, 359, 370, 373 y 393; 409,
412 y 420; 469.
42
Monnaies antiques
OMNI N°4 – 02/2012
ITINERAIRE D'UN EMPEREUR ROMAIN AUX
IIème ET IIIème SIÈCLE
René Pierini
remplacée à l'avenir par la nouvelle élite issue
des légions.
Collection R. PIERINI
Septime Sévère - 193-211
N
é le 11 avril 146 à Leptis Magna
(Libye), reconnu empereur en juin 193.
Homme habile, fort de corps et d'esprit,
mais aussi violent, (d'après le dicton) :
« homme de son nom » (Severus).
La crise qui agitait Rome en 192 ne le laissait
pas indifférent, notamment la guerre que se
faisait Pertinax, Didius Julianus et Pescennius
Niger, pour revêtir la pourpre impériale. A la
mort de Pertinax (assassiné par ses prétoriens),
Didius Julianus, riche patricien, prit le pouvoir
grâce à l'argent distribué à la soldatesque. Dès
lors, Septime Sévère voulut venger la mort de
Pertinax, il promit à un nouveau venu dans la
bataille du pouvoir (Clodius Albinus), le titre
de César s'il s'alliait à lui pour éliminer
Pescinnius Niger et Didius Julianus.
Abandonné par le Sénat et les prétoriens,
Didius Julianus voulut abdiquer en faveur de
Septime Sévère, son rival, s'il lui laissait la vie
sauve. Les soldats ne lui laissèrent pas le temps
de négocier et lui firent payer de son sang les
70 jours de règne qu'il avait acheté avec ses
millions de sesterces. Septime sévère punit les
assassins. Traités de lâches et de perfides, ils
furent dépouillés de leurs insignes militaires et
condamnés au bannissement à cent milles de
Rome. Depuis longtemps, une haine subsistait
entre les prétoriens et les légionnaires. Sévère
déclara que la milice prétorienne détruite serait
En 194, il attaqua alors Pescinnius Niger, qui
fut battu et tué à Issos (Mésopotamie) après une
bataille qui fit 20 000 morts. Le vainqueur
poursuivit ses succès et soumit tous les
royaumes et toutes les provinces qui avaient
pris parti pour le vaincu. Cependant, Clodius
Albinus, endormi par les promesses de Sévère,
reconnut trop tard qu'il était devenu son jouet
dans cette tragédie, il résolut de se venger et
engagea la Gaule et l'Espagne dans une
nouvelle confrontation. Ce fut près de Lyon que
se déroula une terrible bataille qui vit la victoire
de Sévère. Clodius Albinus se réfugia dans une
maison près du Rhône. Découvert, il se perça le
cœur avec son épée. La cruauté du vainqueur
fut terrible, il foula aux pieds de son cheval le
corps de son rival, jeta ses membres aux chiens
et envoya sa tête à Rome, au sénat, avec ces
mots : « voyez tous comment je traite qui
m'offense », surnommé le Sylla punique
(allusion à sa cruauté), il entra dans Rome à
cheval, en habit militaire, à la tête de ses
troupes.
Collection particulière
Clodius Albinus
Dès lors, seul empereur, il combattit en Orient
les Parthes, puis s'empara de Babylone. Après
de nombreuses conquêtes, il pratiqua une
politique d'apaisement et se révéla un
administrateur habile. Il protégea les arts et fit
entreprendre d'immenses travaux dans son
Monedas antiguas
43
OMNI N°4 – 02/2012
empire. Julia Domna, son épouse, avait fait
venir à la cour tous les hommes de talent qui
brillaient en Occident et en Orient.
A/ Septime sévère.
R/ Septime Sévère face à Caracalla, de face au
centre la Concorde.
Monnayage de Septime Sévère
Collection R. PIERINI
A l'avènement de cet empereur, en 193,
plusieurs séries monétaires furent frappées,
deniers, as, sesterces etc… Une série attire
particulièrement notre attention :
- 12 légions de l'armée furent célébrées sur ses
deniers, mais seule la 14 ème légion est
présente sur ses sesterces (rares).
L'empereur au fil des années se conduisit en
despote vis-à-vis du Sénat ; parfois par la force,
il le dépouilla de toutes ses prérogatives. Il
acheta les troupes, les soudoya et fit ainsi de
l'armée une puissance politique dirigée contre
le Sénat. Dès lors l'empire fut gouverné par un
despotisme absolu.
En 211, avec ses deux fils, Géta et Caracalla, il
alla combattre les Calédoniens qui avaient
envahi la Bretagne (la Grande Bretagne), il
poursuivit les barbares jusque dans leurs
retraites. Les dernières années de sa vie furent
empoisonnées par la rivalité de ses fils. Avant
de mourir, ses dernières paroles furent : « j'ai
reçu l'empire en troubles, je le laisse pacifié
jusque dans la Bretagne, vieux et sans
mouvement, je laisse à mes Antonins (ses deux
fils) un empire stable s'ils sont biens ; faible
s'ils sont mauvais ; travaillons ! », ce fut son
dernier mot. (D'après Sallustre).
Collection particulière
A/ IMP CAES L SEPT SEV PERT AVG.
R/ LEG XIIII GEM M V TR P COS S C.
(LEGIO XIIII GERMINA MARTIA VICTRIX
TRIBVNICIA POTESTAS CONSUL) : « La
quatorzième légion Germina Martia Victrix,
détentrice de la puissance tribunitienne,
consul ».
Collection particulière
BIBLIOGRAPHIE
DRIOUX (Abbé), Précis d'histoire romaine, 1848.
PRIEUR, M. et SCHMITT, L., Monnaies romaines, Les chevau-légers ;
44
Monnaies antiques
OMNI N°4 – 02/2012
DEUX PIÈCES ROMAINES EXCEPTIONNELLES POUR
L'ATELIER MONÉTAIRE D'ARLES
Philippe Ferrando
Au début du IVème siècle de notre ère, l'atelier d'Ostie est transféré à Arles. L'auteur présente tout
d'abord l'influence d'un tel évènement sur la ville qui n'avait jusqu'alors jamais fabriqué de
numéraire, ainsi que l'organisation d'un tel atelier. Enfin, deux très rares types monétaires frappés
dans cet atelier sont étudiés.
Fig. 1 : Le départ de la Monnaie de la ville d‟Ostie… et l‟arrivée dans la cité d‟Arelate.
L'atelier monétaire, l’ouverture :
I
l faut attendre les premières années du IVe
siècle de notre ère pour voir frapper du
numéraire dans la cité arlésienne. Cela peut
paraître étonnant car d'autres villes voisines
comme Marseille, Nîmes ou Avignon,
émettaient des monnaies depuis bien
longtemps. C‟est en 313, précisément, que
Constantin le Grand, après avoir éliminé
Maxence (fin 312), décida de transférer l'atelier
monétaire d'Ostie vers Arles, où l'empereur
choisit d‟établir également une de ses
résidences1.
Cette décision est importante car l‟installation
de cet atelier va apporter à la cité d‟Arelate une
richesse économique considérable. L‟atelier
monétaire d‟Arles est vraisemblablement l‟une
des premières entreprises importantes de la
ville, puisqu‟il faut alors dénombrer la présence
de plusieurs dizaines de salariés pour la
fabrication, annuellement, de millions de
pièces.
Constantin disperse les ateliers monétaires
occidentaux et met ainsi en avant la position
1
L.A. Constant, Arles, 1928, p. 32.
avantageuse d'Arles, ville située près d‟un
fleuve important utilisé pour le commerce et
d‟un carrefour de voies routières très
fréquentées (Voie Agrippa, Voie Aurélienne,
Voie Domitienne). L‟atelier monétaire d‟Ostie
est trop près de celui de Rome qui fabrique déjà
du numéraire dans quatre officines. Pour
Constantin, ce transfert permet d‟augmenter la
production des ateliers de Lyon et de Trèves et
de créer, aussi, une quantité suffisante de
monnaies pour alimenter le sud de la Gaule,
notamment l‟Espagne. En plus, en pleine
période de conflits, l‟atelier d‟Arelate, avec ses
quatre officines, va fournir le numéraire
nécessaire pour financer les campagnes
militaires.
Le déplacement du personnel et de l'outillage
d'Ostie ont sans doute demandé un certain
temps. L'hypothèse la plus plausible situe la
date d'ouverture de l'atelier au printemps 313
(en avril ou mai) juste avant la réduction de la
monnaie de billon (taille de 1/72e de livre pour
un poids moyen de 4,55 g. à 1/96e de livre pour
un poids moyen de 3,36 g.). Ceci est indiqué
par l'absence, dans le monnayage d'Arles, de
monnaies à l'effigie de Maximin Daza décédé
au printemps 313, et que l‟on trouve, avant sa
Monedas antiguas
45
OMNI N°4 – 02/2012
mort, sur le monnayage d‟Ostie. Un autre
indice est la présence, pour l‟atelier arlésien, de
monnaies en bronze avec Constantin habillé de
la robe consulaire (troisième consulat), donc
avant la fin de l‟année 3132.
La très grande ressemblance du style des
premières monnaies d'Arles avec les dernières
d'Ostie apporte la preuve du transfert des
graveurs entre les deux ateliers.
Il est ainsi fort possible que pour des raisons
d‟efficacité, des coins aient été apportés
d‟Ostie, puis retravaillés sur Arles ou encore
qu‟un certain nombre de coins aient été gravés
à Ostie avec la marque du nouvel atelier.
D‟ailleurs, le nombre d'officines (quatre) ainsi
que la grande variété des types monétaires (14
coins de revers pour l‟or et 19 coins de revers
pour le bronze d‟avant la réforme) sont autant
d'éléments qui démontrent que l'atelier a su
s'organiser très rapidement.
Deux monnaies exceptionnelles
l'atelier monétaire d'Arles :
pour
Parmi les premières monnaies en bronze
frappées après cette première réforme (entre
313 et 315), nous trouvons toute une série de
pièces courantes à la légende SOLI INVICTO
COMITI (Au Soleil invincible) et un peu plus
rares à la légende MARTI CONSERVATORI
(A Mars sauveur). Mais nous trouvons aussi
deux types de pièces remarquables, d'un point
de vue numismatique et surtout historique, que
nous pouvons considérer comme des séries
commémoratives : elles portent la légende
VTILITAS PVBLICA ("L'intérêt public") et
PROVIDENTIAE AVGG ("A la providence
des Augustes").
illustrent d'une manière significative le départ
de la Monnaie d'Ostie (le navire quittant Ostie,
représentée ici par Rome personnifiée avec à
son bord la Monnaie tenant une corne
d'abondance), puis son arrivée à Arles (le
navire débarquant dans la nouvelle ville,
également personnifiée, avec la Monnaie qui
remet la corne d'abondance). Ceci est
symbolique car la corne d'abondance apporte
une nouvelle richesse à la Cité. Il semble aussi
que la pièce VTILITAS PVBLICA entende
affirmer l'utilité (ou l'intérêt) public de ce
changement3. La balance tenue par la Monnaie
pourrait aussi symboliser le rééquilibrage des
ateliers monétaires voulu par Constantin, car
elle n‟apparaît plus sur la monnaie à la
« Providence ».
À l‟avers de ces pièces, Licinius est toujours
figuré d‟une manière simple, à savoir avec un
buste lauré, portant la cuirasse et le
paludamentum. En revanche, le portrait de
Constantin présente de nombreuses et rares
variantes. Il révèle ainsi une image d‟homme
politique, notamment lorsqu‟il porte la trabea
(robe consulaire) et les insignes du pouvoir
(sceptre aétophore et globe nicéphore) mais
aussi une image de soldat, défenseur de
l‟Empire, avec les attributs du guerrier
(cuirasse, lance sur l‟épaule, bouclier). Cette
différence, dans la représentation de l‟image
impériale des deux adversaires, pourrait
évoquer la supériorité que Constantin tente
d‟établir face à son beau-frère, grâce à ses
ateliers monétaires. D‟ailleurs, cette différence
se généralise pour d‟autres types monétaires.
Pour en terminer avec ces deux pièces
importantes pour l‟atelier monétaire d‟Arles,
elles viennent confirmer que le transfert du
matériel et des hommes s‟est fait par la mer,
parcours alors plus sûr que la voie terrestre.
Ces deux dernières pièces sont très
intéressantes car propres à l'atelier d'Arles.
Elles sont également assez rares car seulement
28 exemplaires sont répertoriés (14 de chaque)
avec différentes variantes (3 variantes de buste
pour la légende VTILITAS PVBLICA et 4
pour PROVIDENTIAE AVGG). Elles
2
J. Maurice, Numismatique Constantinienne, VIII, 19081912, p. 139.
46
Monnaies antiques
3
MAURICE (J.) - Numismatique Constantinienne, Vol
II, p. 139-195, Paris, 1911.
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Fig. 2 : Les différents bustes de Constantin I (cinq types différents) et de Licinius I (un type).
BIBLIOGRAPHIE
BRUUN (P.) - The Roman Imperial Coinage, Volume VII, Constantine and Licinius, A.D. 313-337,
Londres, 1966.
FERRANDO (Ph.) - Les monnaies d'Arles, de Constantin le Grand à Romulus Augustule, 313-476,
Arles, 1997.
FERRANDO (Ph.) - L'atelier monétaire d'Arles, de Constantin le Grand à Romulus Augustule,
313-476, Arles, 2010.
LAFFRANCHI (L.) - La translation de la monnaie d'Ostie à Arles dans la typologie numismatique
Constantinienne.
MAURICE (J.) - Numismatique Constantinienne, Vol II, p. 139-195, Paris, 1911.
Monedas antiguas
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OMNI N°4 – 02/2012
48
Monnaies antiques
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SEMIS INÉDITO DE UNA CECA INCIERTA
TURDETANA
A. Guardeño
En éste articulo se presenta un semis ibérico anepígrafo de la ceca incierta de la Turdetania
“jabali-clava”, conocida sólo por sus hallazgos monetarios. La moneda puede servir para
confirmar opiniones de expertos en cuanto a su iconografía y cercar su posible localización.
Introducción a la Ceca.
Descripción de la moneda.
L
as monedas de ésta ceca se conocen
desde Delgado, quien en 1871, cita dos
ejemplares procedentes de la colección
de Mateos Gago, Vives las ignora, Álvarez
Burgos asigna tres variantes a la zona de
influencia de Cástulo, Jenkins las considera
divisores de la ceca de Celte (Peñaflor),
Villaronga
reconoce
cuatro
variantes,
recientemente Sáez y Blanco Villero son los
que han descrito nueve variantes, siendo
actualmente su estudio, el más completo.
La ubicación del asentamiento de la ceca está
todavía por descubrir, sin embargo atendiendo a
la zona dónde se producen los hallazgos, entre
el sureste de la provincia de Sevilla (Los
Molares, El Coronil, Montellano, Torre del
Aguila) y el Norte de la provincia de Cádiz
(Prado del Rey, Villamartín, Bornos, Arcos de
la Frontera), parecen
delimitar la zona
montañosa
formada
por
las
últimas
estribaciones de la sub-bética.
Razonablemente se podría interpretar que
estamos ante una ceca conservadora (1) en sus
costumbres y ritos, dedicada fundamentalmente
a la ganadería, rodeada por cecas de costumbres
más modernas “romanizadas” dedicadas a la
agricultura.
Dado los pocos hallazgos no se han podido
datar fehacientemente las acuñaciones, algunos
autores proponen finales del siglo II a. C. y
durante el siglo I a. C.
Medidas: 20/21 mm. - 7,86 grs.
A/ Cabeza de Hércules-Melqart con leonté
mirando a la dcha.
R/ Jabalí mirando a
¿serpiente?, encima clava.
izqda.
alrededor
El anverso con la cabeza de Hércules no figura
en ninguna de las monedas catalogadas y como
acertadamente aseveraban Sáez y Blanco
Villero, la clava del reverso nos llevaba
inevitablemente a suponer que estábamos ante
una representación de él.
En el reverso de la moneda también tenemos
una diferencia significativa con respecto a la
tipología del resto de monedas conocidas de la
ceca, la aparición de un trazo a modo de
“serpiente” que rodea el jabalí desde la cola a la
cabeza.
La comparación de la tipología con las
monedas de su entorno, nos lleva a unas
conclusiones interesantes para lograr localizar
la ceca.
El tipo del anverso tiene un enorme parecido
con algunos anversos de la ceca IPTVCI (Prado
del Rey).
Monedas antiguas
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OMNI N°4 – 02/2012
Quizás estas similitudes con los tipos de estas
dos cecas, cercana Iptvci y más al interior
Lascuta, ambas adentrándose en la zona
boscosa y montañosa de la sub-bética, nos
permitan algún día localizar el lugar de
asentamiento de la ceca y descifrar su
verdadero nombre.
Y lo que es más interesante, el tipo del reverso,
jabalí rodeado por una serpiente, sólo tiene una
representación en la iconografía de las monedas
ibéricas turdetanas, y es en un as de Lascuta
(Alcalá de los Gazules).
(1) Joaquín Costa (1895). Estudios Ibéricos.
”…veremos a la clase servil de los iberos,
compuesta casi exclusivamente de pastores,
huir á los campamentos de los cartagineses y/o
de los romanos para ofrecerles ayuda contra sus
señores á cambio de tierras que ellos pudieran
cultivar como hombres libres y súbditos de
Roma ó de Cartago; en aquella coyuntura, la
ganadería representaba el elemento conservador
y patriótico, mientras la agricultura servía de
instrumento y de bandera á un verdadero
movimiento social.”
Todas las monedas incluidas en éste articulo
pertenecen a la colección numit.
BIBLIOGRAFÍA
ÁLVAREZ BURGOS, F. (1992). La Moneda Hispánica, desde sus orígenes hasta el siglo V.
Madrid.
COSTA, J. (1895). Estudios Ibéricos. Madrid.
DELGADO, A. (1871). Nuevo método de clasificación de las monedas autónomas de España.
Sevilla.
SAEZ BOLAÑO, J. A. y BLANCO VILLERO, J. M. (2001). Las Monedas de la Bética Romana.
Vol. II Conventus Hispalensis. San Fernando.
VIVES Y ESCUDERO, A. (1924). La Moneda Hispánica. Madrid.
VILLARONGA, L. (1994). CORPVS, Nummum Hispaniae Ante Avgvsti Aeatem. Madrid.
50
Monnaies antiques
OMNI N°4 – 02/2012
L’ORBIS TERRARUM NELLA MONETAZIONE
ROMANA
Alberto Trivero R. Antvwala (1)
In questo articolo si discute la figura del globo terracqueo nella moneta romana, la cui
rappresentazione si mantenne dal tempo repubblicano sino alla fine dell'impero e se analizza la
interpretazione propia della società romana, per la quale esso rappresentava l'impero stesso.
Questo veniva sentito come coincidente con il pianeta intero, in quanto si riteneva che oltre ai
confini dei domini di Roma non ci fosse alcunché di importante. Il concetto della sfericità della
Terra nello spazio era ben acquisito dalla cultura romana, e restò indiscusso sino a quando
l'impero divenne cristiano e, per ragioni teologiche venne imposta l'idea che la terra fosse piatta.
La rappresentazione
moneta romana
del
globo
nella
I
l simbolo del globo è piuttosto frequente
nella monetazione romana, e si presenta in
forme
molto
diverse.
Esso
può
rappresentare due concetti fondamentali: la
sfera armillare (2), cioè la volta del cielo,
oppure l‟orbis terrarum, e dunque il mondo
nella sua totalità. Un mondo che potrebbe
essere visto nella sua qualità di globo nello
spazio, oppure ancora con una immagine piatta,
ovvero di un cerchio con i tre continenti
(Europa, Africa e Asia) circondati dall‟oceano
(3).
Questo simbolo appare per la prima volta su un
denario repubblicano di Cn. Lentulus (76-74
aC) che al dritto reca la testa allegorica del
Genius Populi Romani, ed al verso un globo tra
uno scettro di ghirlande ed un timone, simbolo
di buon governo.
fascia, che forse rappresenta lo zodiaco, oppure
una ghirlanda.
Il globo appare sempre accompagnato da altri
simboli, i quali in alcuni casi sono più coerenti
se interpretiamo il globo stesso quale sfera
celeste, mentre molti altri, invece, rendono più
plausibile pensare che esso rappresenti l‟orbis
terrarum. Questa duplicità di interpretazioni
suggerisce che entrambe siano corrette e che il
globo, come la genericità della sua forma ben
consente, di volta in volta rappresenti l‟uno o
l‟altro concetto. Due interpretazioni che non
sono necessariamente contrapposte. Infatti
Plinio il Vecchio scrive: “Il mondo e tutta
questa realtà che, con un altro nome, piace
anche chiamare cielo, nella cui curvatura si
raccoglie ogni vita, è giusto reputarlo una
divinità, eterna, sconfinata, senza origine né
morte” (dal libro secondo della Historia
Naturalis) e quindi non esclude il cielo
dall‟orbis terrarum.
Cn. Lentulus (76-74 aC), denario.
Il globo spesso viene raffigurato con una serie
di linee che si intersecano: talvolta nei campi
che generano quando si incrociano, vi sono dei
pallini o delle stelle; altre volte il globo è liscio,
ma contenendo una legenda, generalmente
SPQR; in rari esempi, appare circondato da una
La grande varietà di forma nei globi
rappresentati sulla monetazione romana: 1)
liscio; 2) con circonferenze che non si
Monedas antiguas
51
OMNI N°4 – 02/2012
intersecano; 3) con una ghirlanda sovrapposta;
4) con la fascia zodiacale sovrapposta; 5) con
coppie di circonferenze che si incrociano; 6)
con due circonferenze che si incrociano
(possono esserci o meno i puntini nei quattro
campi ); 7) con tre o più circonferenze che si
incrociano ed un puntino in ogni campo
generato; 8) con due circonferenze che si
incrociano ed una stella in ogni campo
generato.
Una
rappresentazione
che,
ovviamente, non è esaustiva.
Per interpretare correttamente il senso della
simbologia presenta nella monetazione romana,
assai differente da quella greca, anche quando a
prima vista non lo appaia, dobbiamo tener
presente il ruolo peculiare che Roma, e
soprattutto l‟imperatore, assegnano alla
raffigurazione della moneta. Essa è uno
straordinario strumento per propagandare le
immagini del potere e gli eventi gloriosi, veri o
presunti che siano, che contrassegnano un
governo. Un vero e proprio indottrinamento che
si estende a tutto l‟impero e che, pertanto,
adotta immagini semplici e di lettura
immediata. A noi possono apparire trascendenti
in quanto i simboli di quel linguaggio ci sono
estranei; ma per coloro ai quali tale messaggio
veniva veicolato con la moneta, insieme al
volto dell‟imperatore, si trattava di simboli ben
noti, addirittura quotidiani. Anche le immagini
allegoriche delle divinità o delle virtù venivano
trasformate per rappresentare l‟eroismo
dell‟imperatore, la sua liberalità, la sua
identificazione con lo stesso popolo romano,
ma anche con gli dei, e quindi la sua
divinizzazione.
Quando l‟impero diventa cristiano, il
vastissimo universo di simboli e quindi di
immagini monetarie si contrare, sino a ridursi
ad un limitato numero di concetti ormai non più
simbolici, ma espliciti: la concordia militum o
augustorum, la victoria e la gloria augustorum,
la fel temp reparatio e la restitutor reipublicae,
la salus reipublicae, la virtus exerciti. Tutti
concetti finalizzati a diffondere un messaggio
di una rinnovata grandezza, quando ormai la
decadenza avvicinava l‟impero alla sua fine. E
le immagini che accompagnano questi simboli
sono affatto esplicite: l‟imperatore che trascina
il prigioniero per i capelli o che lo trafigge con
52
Monnaies antiques
la lancia, la vittoria che incorona
l‟imperatore… Ciò dimostra da un lato che un
ricco simbolismo a partire dal III secolo
progressivamente cessa di essere patrimonio del
popolo e quindi viene a meno il suo impiego
nella moneta, ma dall‟altro che quello stesso
simbolismo venne invece utilizzato fintantoché
la sua lettura era patrimonio collettivo e proprio
in quanto era patrimonio collettivo.
Sopravvive il simbolismo spirituale in quanto
adottato dal cristianesimo e quindi ancora
comprensibile ed universale. La fenice, simbolo
di eternità e di risurrezione, il globo tanto nella
sua accezione di orbis terrarum, quanto in
quella di sfera celeste e quindi armillare.
Infine, per quanto si riferisce alla duplicità del
concetto di orbis terrarum, mi pare che non
debba considerarsi troppo rigidamente questa
suddivisione dell‟accezione tra “terrestre” o
“celestiale”. Ciò è dimostrato da un denario di
Antonino Pio, ove il globo su cui siede l‟Italia a
volte ha dei piccoli cerchi al suo interno, e a
volte essi mancano, eppure in entrambi i casi il
significato del verso è identico: l‟Italia domina
sulla Terra, ma certamente non sul cielo,
dimora egli Dei. Dunque la presenza di linee e
globetti non sempre corrisponde ad una
esigenza propria del simbolo, ma talvolta
rispecchia un gusto artistico dell‟ornato.
Antonino Pio, denario
L’orbis terrarum ed il buon governo
L‟accostamento tra timone e orbis terrarum
suggerisce immediatamente l‟idea di buon
governo. Essa appare nella più antica
rappresentazione di un globo, che in questo
caso non può che corrispondere all‟orbis
terrarum, e la ritroviamo nel citato denario
OMNI N°4 – 02/2012
repubblicano di Cn. Lentulus. Questo simbolo
appare soprattutto nell‟alto e medio impero. In
età repubblicana, lo ritroviamo su un altro
denario di L. Mussidius Longus: al dritto è
raffigurato il ritratto di Cesare ed al verso il
globo terraqueo abbinato ad altri simboli, tra i
quali il timone e la cornucopia, l‟abbondanza
derivata dal buon governo. In questo caso la
corrispondenza tra globo e orbis terrarum è
evidente e le circonferenze che si intersecano
non possono che essere i meridiani ed i
paralleli.
Vespasiano (69-71), dupondio
Settimio Severo (193-211), aureo
L. Mussidius Longus (44 aC), denario
La più belle immagine del buon governo la
ritroviamo in un asse di Tiberio, dove all‟orbis
terrarum si sovrappone il timone e la fascia
zodiacale. Un‟immagine che ritroviamo quasi
identica anche in un sesterzio di Nerva.
Faustina Seniora, aureo
Adriano (117-138), denario
L’orbis terrarum e l’imperium
Tiberio (14-37), Asse
Il buon governo è quasi sempre associato ad
altri simboli (4). In modo particolare lo
incontriamo partecipando nell‟immagine della
Fortuna (la fortuna accompagna il buon
governo, come in un dupondio di Vespasiano
ed in un aureo di Settimio Severo e),
dell‟Abbondanza (il buon governo assicura
l‟abbondanza, come in un aureo di Didio
Giuliano), dell‟Eternità (augurio di incontrare
la giusta rotta nell‟oltretomba, come in un
aureo di Faustina Seniora) o dello stesso
simulacro dell‟imperatore nella sua veste di
massimo timoniere dello Stato (come in un
denario di Adriano).
Il globo è spesso associato al concetto di
imperium, ovvero di esercizio del potere, ma
anche di diritto ad esercitarlo, e dunque di
legittimità. In questo contesto, l‟orbis terrarum
può solamente assumere l‟accezione di globo
terrestre: Roma e l‟imperatore esercitavano
l‟imperium unicamente sulla Terra, che nel
cielo tale esercizio era patrimonio esclusivo
degli Dei.
In questo caso, il globo non viene unito ad altri
simboli, quasi a sottolineare la sua identità con
l‟intera superficie terrestre in senso geografico
ed umano (urbis et orbis), ma è associato
all‟imperatore stesso o a colui che, avendo le
attribuzioni, consegna nelle sue mani l‟orbis
terrarum e con esso l‟imperium planetare. La
monetazione imperiale, al dritto reca quasi
unicamente il volto dell‟imperatore senza alcun
simbolo che l‟accompagni, essendo il volto
stesso assunto a simbolo. Tra le rare eccezioni
Monedas antiguas
53
OMNI N°4 – 02/2012
incontriamo l‟accostamento del volto imperiale
al globo posto nelle mani dell‟imperatore:
un‟immagine che ritroviamo in un medaglione
aureo di Costantino Magno, ove l‟imperium è
formalmente condiviso con il Senato, o in una
maiorina di Costanzo II, nella quale viene
esaltata la restaurazione dell‟antica grandezza.
Vi è un aureo di Costantino Magno molto
particolare, in quanto la legenda non lascia
dubbi di interpretazione – Rector Totius Orbis –
ma essa è associata ad una fascia zodiacale,
anziché al globo: forse ciò è da interpretarsi che
questa talvolta poteva anche essere sinonimo di
orbis terrarum? Se così fosse, allora anche in
quei casi in cui il globo è attraversato dallo
zodiaco potrebbe talvolta rappresentare il globo
terrestre anziché l‟empireo.
Costantino Magno, medaglione, Senatvs
Costantino Magno, aureo, Rector Totius
Orbis.
Costanzo II, maiorina, Fel Temp Reparatio
L‟imperatore è egli stesso la fonte del diritto, e
quindi viene rappresentato senza altri simboli
che l‟orbitas terrarum, come nell‟aureo di
Antonino Pio, ove l‟imperatore in piedi vestito
con la toga regge il globo con la mano destra,
oppure nel sesterzio di Filippo, ove
l‟imperatore è seduto sulla sella curule, simbolo
anch‟essa del potere giudiziario: e la legenda
del verso allude alla magistratura esercitata
dall‟imperatore. Il fatto che il globo non fosse
accompagnato da altri simboli, dimostra che il
concetto da esso espresso di orbitas terrarum
era ben conosciuto anche dal volgo.
E‟ molto interessante osservare che quando
Traiano adotta Adriano, adozione dinastica,
essa viene rappresentata sulla moneta proprio
come trasmissione del globo, che anche in
questo caso, ovviamente, rappresenta l‟orbitas
terrarum. Questa rappresentazione appare in un
sesterzio ed in un denario: in quest‟ultimo caso
la locuzione Adoptio nell‟esergo toglie ogni
possibile dubbio circa l‟interpretazione della
scena.
Adriano, Sesterzio, Dac Parthico P M TR P
Cos P
Antonino Pio, aureo, COS IIII.
Adriano, denaro, Parthic Divi Traian AvgG F P
M TR P Cos PP
Filippo I, sesterzio, P M TR P II COS P P.
54
Monnaies antiques
La vittoria assicura il potere, e così appare in un
aureo di Massenzio, ove la Vittoria porge il
globo all‟imperatore in trono. In quest‟aureo il
volto frontale del dritto anticipa quello che sarà
OMNI N°4 – 02/2012
il senso artistico-simbolico proprio del mondo
bizantino.
propria dell‟incisore per esprimere l‟immagine
e, quindi, costituiscono un elemento di
abbellimento estetico senza esprimere un
particolare simbolismo.
Massenzio, aureo, Victoria Aeterna Avg N
Vi è un esempio nel quale è la stessa orbis
terrarum che si affida all‟imperatore. Il globo è
posto sulle ginocchia di una figura muliebre
turrita, che rappresenta la Terra, la quale tende
la mano all‟imperatore in piedi. Che l‟orbis
terrarum rappresenti l‟insieme delle terre
dell‟impero, è fuori discussione, anche perché
questa moneta fa parte di una serie ove vi sono
di volta in volta le diverse provincie che
tendono la mano all‟imperatore, identificate
dalla legenda stessa: l‟Acaia, l‟Africa,
l‟Hispania, la Gallia, ecc. In quella ove la
legenda è orbis terrarum, appare il globo, che
invece è assente in tute le alte monete della
stessa serie.
Adriano, sesterzio: l‟orbis terrarum (a sin.) e
l‟Africa (a destra) tendono la mano
all‟imperatore.
Infine, non solamente l‟imperatore domina sul
mondo, ma a sua volta l‟Italia domina sulle
altre provincie assicurando loro benessere (la
cornucopia): qui l‟Italia, in un denario di
Antonino Pio, è seduta è sull‟orbis terrarum. E‟
interessante osservare che il globo a volte
riporta tracciate solamente le circonferenze che
si intersecano, alte volte vi sono dei globetti nei
campi che le stesse formano intersecandosi: ciò
dimostra che i globetti stesi non rappresentano
il cielo stellato, ma fanno parte della libertà
Antonino Pio, denario, TRPOT COS III. L‟Italia
dominatrice del mondo. A sin. l‟orbis
terarrum ha i campi lisci, a destra vi è un
punto in ogni campo.
L’orbis terrarum e il Capricorno
Il capricorno è un animale mitologico: la sua
testa è simile a quella di un caprone e la sua
coda a quella di un gambero. In quanto segno
zodiacale, venne associato alla dea Felicitas,
talvolta rappresentata tenendo un capricorno
con la sua mano destra, come in un sesterzio di
Antonino Pio (la Felicitas Aug). Nel mondo
greco, la costellazione del capricorno era
associata al potere ed all‟abbondanza. “Scrive
Iulio Firmico nell‟ottavo libro che chiunque
averà l‟oroscopo nella prima parte del
Capricorno sarà re, ovvero imperatore, a così
ancora chi averà l‟oroscopo nella terza parte
del medesimo segno sarà grande possente et
harrà gran potestà nell‟arme, onde Augusto
fece gran stima di questo oroscopo, che lo volle
nelle sue monete per memoria eterna (5)”.
L‟imperatore Augusto, assai superstizioso,
sostenne sempre di essere nato sotto quel segno
(6) e fece coniare numerose monete ove al
verso appare il capricorno stringendo l‟orbis
terrarum tra le zampe anteriori, oppure
sovrapponendosi: in ambedue i casi questa
iconografia sta a rappresentare che la nascita
dell‟imperatore sotto quel segno zodiacale
dimostra la volontà degli Dei affinché a lui
fosse associato il potere che assicurasse a tutte
le provincie dell‟impero felicità, abbondanza e
buon governo (la conucopia ed il timone) come
Monedas antiguas
55
OMNI N°4 – 02/2012
lo vediamo in un aureo di Augusto (7). Un
tema, questo che venne ripreso anche nella
coniazione coloniale, soprattutto con Livia e
Commodo, e, successivamente, anche in alcune
rare emissioni di Vespasiano.
In questo caso è evidente che l‟orbis terrarum
rappresenta
l‟insieme
delle
provincie
dell‟impero e dei popoli che in esse vivono.
di Marco Salvio Otone (regnò nell‟anno 69
durante solamente tre mesi, dal 15 gennaio al
16 aprile) ove sul verso la Pax stringe con la
mano destra un rametto di ulivo: la legenda,
Pax Orbis Terrarvm, è determinante per
dimostrare che l‟orbis terrarum coincideva con
l‟insieme delle provincie che costituivano
l‟impero e con le popolazioni che in esso
vivevano serenamente grazie alla pace garantita
dall‟imperatore; nel contempo, veniva veicolato
il messaggio che quei popoli che vivevano al di
fuori dei confini della romanità non godevano
di una pace solida. La Pax è raffigurata con il
globo niceforo, ad affermare che la pace può
solo essere ottenuta con la vittoria.
Augusto, aureo: il capricorno, associato alla
cornucopia ed al timone.
Otone, denario, Pax Orbis Terrarvm.
Livia, Asse coloniale della Cilicia.
Vespasiano, denari: a sin., TR Pot Cos VIIII;
a destra, Cos IIII, insieme alla cornucopia ed
al timone.
L’orbis terrarum e la pace
La pace rappresentò sempre una delle
aspirazioni fondamentali dei popoli che
vivevano nelle provincie dell‟impero. Per molti
aspetti, la pace interna rappresentava forse il
principale fattore di accettazione del dominio
imperiale; dalla capacità di garantire la pace,
più ancora che dalle costanti conquiste e
bottini, derivava l‟apprezzamento generale
dell‟imperatore di turno, il quale non esitava ad
autocelebrarsi nelle monete quale pacificatore
dell‟orbe, come, ad esempio, in un raro denario
56
Monnaies antiques
La Tranquillitas è sinonimo di pace e nel tardo
impero si converte in un attributo imperiale. Lo
ritroviamo nel verso di alcuni denari abbinata al
timone, simbolo del buon governo, come in
Adriano, Antonino Pio, oppure al capricorno,
come in Filippo I. In una iscrizione presente a
Sexaginta Prista (presso la foce del Danubio), si
legge “post debellatas hostivm gentes
confirmata orbi svo tranqvillitate”, nella quale
vediamo il vocabolo tranqvillitate usato come
sinonimo di pace, ma osserviamo anche che
orbis [terrarum] indica molto chiaramente il
territorio all‟interno del limes imperiale.
Costantino Magno distrusse il sistema
tetrarchico creato da Diocleziano nel 293 per
porre fine alle guerre di successione,
combattendo prima contro Massenzio e poi
contro Licinio (gli altri tetrarchi) sino a
sconfiggerli e così riunire nelle sue mani tutto il
potere imperiale nel 324. Per celebrare la fine
della lunga guerra intestina e l‟avvicinarsi dei
vicennalia (vent‟anni di governo), tra il 321 ed
il 324 fece coniare nelle zecche di Treviri,
Lione e Londra una serie di centennionali a
nome suo, di Crispo, Costantino II e Licinio II
(questi ultimi furono coniati solamente nel 321
nella zecca di Treviri). I vicennalia si sarebbero
poi celebrati nel 326 a Roma alla sua presenza
OMNI N°4 – 02/2012
(8). In questa serie di centennionali,
particolarmente interessanti, al dritto il busto
imperiale è spesso rappresentato armato, con il
globo niceforo o con l‟orbis terrarum; talvolta
appare la testa di un cavallo. Sul verso vi è un
altare sormontato dall‟orbis terrarum nel quale
vi è una legenda VOT XX. La forma dell‟orbis
terrarum è molto diversa da moneta a moneta,
dimostrazione che gli elementi al suo interno
non hanno un particolare significato simbolico,
ma sono puramente decorativi e lasciati alla
libertà dell‟incisore, come abbiamo già
segnalato precedentemente. La legenda Beata
Tranqvillitas implica che l‟orbis terrarum sia
ancora una volta coincidente con il mondo
romano.
Alla morte di un imperatore, ma talvolta anche
di altri personaggi di rilievo, veniva svolta la
cerimonia delle consecratio, detta anche
apoteosi o divinizzazione, la quale veniva
stabilita dal Senato: l‟imperatore divinizzato,
che acquisiva il titolo di divus, poteva in una
certa misura continuare la sua opera volta a fare
prospero l‟impero ed accrescere la fortuna della
patria anche dall‟oltretomba. Il rito della
divinizzazione consisteva nella cremazione
pubblica e si credeva che dalle fiamme si
alzasse un‟aquila in volo, la quale impersonava
l‟anima stessa dell‟imperatore, e raggiungesse
la dimora degli dei. Le monete che ricordano
tale rito sono dette di consacrazione e al verso
riportano una pira oppure un‟aquila mentre
distende le ali per alzarsi in volo, spesso
appoggiata su un globo o un'altare.
Quasi sempre le monete che al verso riportano
l‟aquila sul globo sono di consacrazione, come
nell‟asse di Augusto o nel sesterzio di
Antonino. Tuttavia esistono anche monete ove
sul verso l‟aquila è presente, ma come simbolo
del potere imperiale, come nell‟asse di
Vespasiano. In questo ultimo caso il globo
corrisponde certamente all‟orbis terrarum, e
quindi rappresenta il potere dell‟imperatore sul
mondo.
La Beata Tranquillitas. Da sin. A destra:
Costantino Magno, Costantino II con il globo
niceforo, Crispo con la testa del cavallo.
Augusto, asse di consacrazione coniato da
Tito.
Il globo e l’aquila
Il globo è un simbolo universale che si ritrova
presso quasi tutti i popoli dei cinque continenti,
sia pure attribuendogli di volta in volta
significati diversi. Altrettanto universale, in
quanto simbolo, è l‟aquila: ma in questo caso
esso richiama sempre la forza e la nobiltà, tra i
romani come tra gli indios mapuche, tra i greci
come tra i popoli siberiani. Presso la romanità,
l‟aquila era sacra a Giove. Il generale Gaio
Mario adottò l‟aquila quale insegna legionaria
(107 aC) e successivamente divenne prima
simbolo della forza militare, e quindi della
figura stessa dell‟imperatore.
Antonino Pio, sesterzio di consacrazione
coniato da Marco Aurelio
Vespasiano, asse, SC
Monedas antiguas
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OMNI N°4 – 02/2012
La consecratio viene raffigurata con soluzioni
alternative: l‟aquila che s‟invola dal globo o
dall‟altare, la pira funeraria; nelle Auguste
troviamo il pavone - simbolo della fedeltà e
sacro a Giunone, così come l‟aquila lo era a
Giove - la cui coda ci riporta nuovamente
all‟idea del globo. Un globo che è il punto di
partenza dell‟anima e che quindi corrisponde
all‟orbis terrarum, mentre quello di arrivo è la
sfera celeste.
stesso dell‟immortalità, ovvero dell‟eternità.
Spesso la fenice è raffigurata con la testa
circondata da un‟aureola radiata a rappresentare
le fiamme da cui costantemente risorge.
Generalmente la fenice appare apposta ad un
globo. Così la vediamo in quella che
probabilmente è la prima moneta con questo
disegno: un sesterzio di Faustina, divinizzata
dal Senato. Qui l‟imperatrice appare reggendo
il globo con la mano destra; in un sesterzio
molto simile, vi è una fenice sovrapposta. Il
globo in questo caso, sembra rappresentare il
cosmo o l‟empireo, piuttosto che l‟orbis
terrarum, anche perché esso stesso appare
essere simbolo della perpetuità, anche in
assenza della fenice.
Antonino Pio, Consecratio: a sin.: denario
con aquila e globo; al centro: denario con
aquila ed altare; a destra: aureo con pira
funeraria.
Faustina Pia, sesterzio, Aeternitas: il globo è
nudo (in alto a sin.) e con la fenice
sovrapposta negli altri due esempi.
Paulina, denario, consecratio: a sin.: la ruota
del pavone richiamando la forma del globo; a
destra: il pavone si eleva in volo con l‟anima
di Paulina.
Il globo e la fenice: dall’Aeternitas alla
Fel Temp Reparatio
La fenice è il mitico uccello che di volta in
volta rinasce dalle proprie ceneri, essendo
immortale: perciò si converte nel simbolo
58
Monnaies antiques
Il globo con sovrapposta la fenice viene ad
essere un attributo proprio della divinizzazione
imperiale, in una sorta di “teologia politica”: in
quanto dio, l‟imperatore muore, ma risorge
immediatamente dalle sue stesse ceneri per
prendere dimora nell‟empireo, dove partecipa
in eterno al convivio degli dei. Con questa
lettura la ritroviamo in un sesterzio di Emiliano.
OMNI N°4 – 02/2012
Emiliano, sesterzio, Aeternitas Avg.
Ma è soprattutto Roma che è destinata ad essere
immortale, come lo celebra un antoniniano di
Emiliano dedicato a Roma eterna.
La Fel Temp Reparatio in un bronzetto di
Costante (a sin), Costanzo II (al centro e a
destra).
Emiliano, antoniniano, Romae Aetern.
Questo simbolo è un soggetto che si mantiene
durante tutta la storia dell‟impero, anche se la
sua lettura viene a modificarsi profondamente
con l‟imporsi del cristianesimo quale religione
di stato. La fenice sovrapposta al globo, infatti,
non è solo simbolo dell‟eternità, ma anche di
rinascita e di speranza in un tempo migliore. Ed
è in questo senso che la ritroviamo su molte
monete della metà del IV secolo, ove gli
imperatori celebrano la rinascita della
grandezza romana (Fel Temp Reparatio) e con
essa la restaurazione di quel tempo passato più
sereno. E‟ interessante notare la diversità nel
disegno del globo da un centennionale
all‟altro, pur essendo immutato il significato
dello stesso. Un globo che forse rappresenta il
cosmo, coerentemente alla raffigurazione
mitologica dell‟eternità, o forse rappresenta
l‟orbis terrarum, oggetto della rinascita; ma più
probabilmente veniva interpretato come una
componente del disegno stesso della fenice, in
alternativa ad una piccola pira funeraria, e
quindi la presenza di circonferenze che si
intersecano, o di puntini o di stelle nei campi
generati, risponde unicamente ad una visione
dell‟artista incisore, senza che ciò corrisponda
ad alcuna particolare interpretazione.
Con Valentiniano II viene restituito al globo
con la fenice il suo primitivo significato: la
perpetuitas. La quale, ovviamente, ora
corrisponde
all‟eternità
assicurata
dal
messaggio cristiano di cui l‟imperatore se ne fa
interprete ed esecutore.
Valentiniano II, siliqua, Perpetvitas.
L’orbis terrarum e la vittoria: il globo
niceforo
La dea Victoria è alata e poggia i suoi piedi
sull‟orbis terrarum: la vittoria è definitiva
quando è totale e, quindi, si estende a tutte le
provincie romane ed alle frontiere dell‟impero.
E‟ così che appare in un aureo di Augusto,
prototipo di una sintesi tra orbis terrarum e dea
Vittoria: il globo niceforo.
Augusto, aureo, Imp Caesar.
Vespasiano, aureo, Vict Avg.
Monedas antiguas
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OMNI N°4 – 02/2012
La vittoria è dell‟imperatore, Vict Avg, come
nell‟aureo di Carino e nel radiato di Caro, ma è
anche a nome del popolo romano, Victoria P R,
come viene affermato nella legenda del denario
di Galba, o della città di Roma, in una siliqua di
Valentiniano I.
celeste: tuttavia resta più probabile che
mantenga quello di orbis terrarum. Due solidi ci
inclinano verso questa ultima ipotesi, entrambi
di Teodosio. Nel primo sul verso vi è la
personificazione di Roma che regge il globo
crucigero: quindi è ancora il tema di Roma
dominatrice dell‟orbis terrarum (non può
trattarsi della sfera celeste!) divenuto cristiano,
ma anche dominatrice in quanto garante della
cristianità dell‟orbe. Nel secondo la legenda è
molto esplicita: Glor Orvis Terrar.
Carino, aureo, Victoria Avg
Teodosio, solido, Vot XXX MvltXXXX
Caro, radiato, Victoria Avgg
Teodosio, solido, Glor Orvis Terrar
Galba, denario, Victoria PR
Valentiniano I, siliqua, Vrbs Roma
Con il trionfo del cristianesimo, il globo
niceforo si converte in globo crucigero,
simbolo, dunque, della vittoria di Cristo sul
male e del suo trionfo su tutte le terre del
mondo. Quindi vi è una evidente continuità tra
la moneta romana ove il globo è sormontato
dalla vittoria, e quella tardo-romana e bizantina,
ove è sormontato da una croce. Muta lo
strumento del potere, ma il significato rimane
identico. Il primo imperatore ad adottare il
globo crucigero fu Arcadio, probabilmente
nelle emissioni auree avvenute tra il 395 ed il
400.
E‟ possibile che il globo, ora che è sormontato
dalla croce, assuma il significato di sfera
60
Monnaies antiques
Il concetto di
nell’antica Roma
sfericità
della
Terra
Se l‟orbis terrarum rappresenta veramente la
forma sferica del globo terrestre, allora sorge
inevitabile la domanda se la sfericità della Terra
fosse un concetto acquisito nel mondo grecoromano. Rispondere a questo quesito è
indispensabile al fine di dare una corretta
interpretazione
alla
simbologia
della
monetazione non solo romana, ma anche
bizantina.
Nel mondo antico, astrologia ed astronomia
sono una stessa scienza e la lettura
dell‟universo è fondamentalmente magica.
Inizialmente è così anche nel mondo greco: per
Talete, la Terra è una immensa zattera rotonda
che galleggia nell‟universo acquoso, sotto la
volta del cielo, così come nel pensiero degli
egizi e dei popoli mesopotamici. Tuttavia, nel
VI secolo aC l‟osservazione pragmatica
comincia a contrapporsi all‟interpretazione
magica e così sorge l‟idea che il pianeta Terra
potesse avere la forma di un globo.
OMNI N°4 – 02/2012
Il primo a mettere in discussione l‟immagine
preclassica, fu il filosofo Anassimandro, nato
forse nel 611 aC (9). Aezio sostiene nella
“Placita Philosophorum”, pervenuta sino a noi
in
modo
molto
frammentario,
che
Anassimandro affermava che gli astri avessero
forma di ruota, che il Sole fosse grande ventotto
volte la Terra e la Luna diciannove, e che la
Terra avesse la forma di una moneta e che fosse
sospesa nell‟aria e non più galleggiante
sull‟oceano. Ad Anassimandro dobbiamo l‟idea
allora rivoluzionaria che al di sotto del suolo su
cui viviamo, ci fosse nuovamente il cielo.
Un secolo più tardi Parmenide, discepolo di
Pitagora, per primo che sostenne la rotondità
della Terra (10): ciò in quanto il globo
rappresentava, a suo avviso, la forma
geometrica ideale per mantenersi in equilibrio
nell‟universo. Idea che, secondo alcuni studiosi,
va attribuita allo stesso Pitagora (575-490 aC).
Questo stesso concetto fu poi ribadito in forma
molto autorevole da Platone (427-348 aC).
Tuttavia fu Aristotele (384-322) che formulò la
prima inferenza scientifica circa la sfericità
della Terra, osservando che l‟ombra del nostro
pianeta sulla luna ha forma circolare. I
pitagorici ripresero il ragionamento di
Aristotele per andare ben oltre, sostenendo che
le stelle del mattino e della sera fossero
identiche e che tutti i pianeti, tra i quali
includevano la Terra, si muovessero non
intorno al Sole, ma ad un “fuoco centrale”
dell‟universo.
Aristarco di Samo (310-230 aC) aveva
ipotizzato che la Terra girasse intorno al Sole
descrivendo
un‟orbita
circolare,
come
testimonia Archimede in una lettera inviata a
Gelone, tiranno di Siracusa. L‟idea di un
universo eliocentrico fu riaffermata da Seleuco
(verso il 150 aC), già non più come una ipotesi,
ma come una certezza (11). Nel 230 aC, infine,
Eratostene di Cirene misurò le dimensioni della
Terra, concludendo che il suo diametro era di
12.629 km , una misura inferiore a quella esatta
di appena lo 0,9%!
et undique ipsa in sese nutibus suis conglobata,
vestita floribus, herbis, arboribus, frugibus,
quorum
omnium
incredibilis
multitudo
insatiabili varietate distinguitur. (12)” Pochi
anni più tardi, Plinio il Vecchio (23-79 dC)
scriveva che la forma sferica era accettata dagli
intellettuali del mondo occidentale ed il grande
astronomo Claudio Tolomeo (100-175 dC)
disegnò le sue carte considerando la sfericità
della Terra e sviluppando i concetti di
longitudine e latitudine.
Tuttavia esiste una profonda diversità tra
l‟approccio del pensiero greco e di quello
romano. Il primo è orientato alla speculazione
filosofica ed al raggiungimento di una
maggiore conoscenza dell‟universo. Il secondo,
essenzialmente pratico, alla conoscenza della
cartografia finalizzata alla costruzione viaria ed
alla precisa collocazione dei territori nel più
vasto Orbis Terrarum. Per cui, poco interessati
alla complessa elaborazione dei geografi greci
con il loro sistema di longitudini e latitudini,
preferirono, agli effetti pratici, ricorrere alla
vecchia immagine di una terra circolare ma
piatta, senza tuttavia negare la rotondità della
sfera celeste, come si può osservare bene nel
planisfero attribuito a Marco Vipsanio Agrippa
(63-12 a.C.), politico e generale romano, amico
di Ottaviano, il futuro imperatore Augusto, che
ci è pervenuto trasmesso da copie tardomedioevali.
Sul tema, rimandiamo volentieri all‟eccellente
studio dell‟amico Francesco Lamanna, Il
mondo dei Romani era tondo, pubblicato nel
Quaderno di Studi dell‟Associazione Culturale
Italia Numismatica (IV, 2009, pagg. 59-88).
L‟idea che la Terra abbia forma rotonda è un
concetto acquisito nel mondo romano. Cicerone
scrive: “Ac principio terra universa cernatur
locata in media sede mundi, solida et globosa
Monedas antiguas
61
OMNI N°4 – 02/2012
Il planisfero attribuito a Marco Vipsanio
Agrippa.
discussione. Neppure sant‟Agostino (354-430)
negava la sfericità della Terra, dubitando,
tuttavia, che gli “antipodi” fossero popolati:
“anche se si ritiene per teoria o si dimostra
scientificamente che il pianeta è un globo e ha
la forma sferica […] non ne consegue
necessariamente, di punto in bianco, che è
abitata dagli uomini” (De Civitate Dei, Libro
XVI, Capitolo 9) (13). E‟ solo nei secoli
successivi che a poco a poco si viene a perdere
la conoscenza del pensiero classico e si impone,
invece, una visione dell‟universo sempre più
integralista e correlata ad una lettura
assolutamente letterale della Bibbia, che
considera la Terra piana in modo conforme al
pensiero mesopotamico ove ha origine il
popolo ebreo, provocando una involuzione del
pensiero del mondo occidentale.
Con l‟imporsi del pensiero cristiano, il concetto
della sfericità della Terra non venne messo in
NOTE E BIBLIOGRAFIA
(1)
Questo lavoro è sorto ed è stato portato avanti parallelamente nella sezione italiana del
ForvmAncientCoins, http://www.forumancientcoins.com/board/index.php?board=30.0 e nel
forum lamoneta, www.lamoneta.it. Esso, dunque, non è frutto del mio lavoro, bensì di tutti gli
amici di entrambi i forum: io mi sono limitato ad avviare il tema con un intervento iniziale sul
FAC, in amichevole polemica con quello di un socio della sezione nordamericana che
sostiene che il globo rappresenta la sfera armillare, e a dare omogeneità ai vari interventi ,
sintetizzandoli in un testo unitario. I veri Autori, pertanto, sono tutti i foristi che hanno
partecipato alla discussione.
(2)
La sfera armillare prende il nome dal latino armilla che significa anello: essa infatti è
composta da cerchi (anelli) che rappresentano i principali cerchi massimi (equatore celeste,
eclittica, coluro dei solstizi, coluro degli equinozi) della sfera celeste. La sfera armillare venne
inventata da Eratostene verso il 255 aC e, pertanto, era ben conosciuta nel mondo romano. Il
tema è stato sinteticamente trattato da Michael R. Molnar in The Celator (giugno 1998) con
una interpretazione per certi versi opposta alla presente, che non condivido. Il testo di questo
breve articolo è riportato in appendice.
(3)
Che la parola orbis stia ad indicare il mondo intero, è fuori discussione. Sono tantissime le
locuzioni latine che lo dimostrano: urbi et orbi, Crete qui meus est orbis (Ovidio),
locupletatori orbis terrarum (che appare su un raro stesterzio di Adriano, per limitarci a tre
soli esempi. Sicuramente la sua accezione più frequente è quella di “circolo”: ex planis autem
circulus aut orbis (Cicerone). Tuttavia è anche sinonimo di giro, equitare in orbem (Ovidio) e
soprattutto di globo, lucidus orbis (Virgilio).
(4)
In questo caso l‟orbis terrarum si converte in una piccola sferetta posta al di sotto del timone.
(5)
Dal Libro primo delle medaglie de‟ Greci raccolte da Pyrrho Ligorio napolitano,
all‟illustrissimo e reverendissimo signor donno Hyppolito secondo cardinal d‟Este suo
protettore, Ms XIII B1, Napoli, Biblioteca Nazionale.
62
Monnaies antiques
OMNI N°4 – 02/2012
(6)
Tuttavia ciò non corrisponde alla verità. Infatti Augusto era nato sotto il segno della Bilancia,
ma scelse come suo segno "ufficiale" il Capricorno proprio in quanto associato al successo,
alla stabilità ed alla fermezza.
(7)
Tra il 10 Marzo e il 7 Aprile del 5 aC, una cometa assai brillante e dalla lunga coda venne
avvistata e rimase visibile nella costellazione del Capricorno, dove vi rimase per 70 giorni
prima di scomparire alla vista. Un momento che corrisponde alla concentrazione di numerose
cariche istituzionali nelle mani di Augusto e che l‟imperatore considerò di ottimo auspicio.
(8)
Secondo Zosimo, Costantino giunse a Roma nel 326 dopo aver fatto uccidere il figlio Crispo e
la moglie Fausta. In quell‟occasione, si recò dai sacerdoti per chiedere di espiare con sacrifici
le sue colpe, ma costoro gli risposero che in alcun modo ciò sarebbe stato possibile.
Indispettito dalla risposta, Costantino negò valore alla divinazione ed alle antiche divinità,
rifiutandosi di compiere i riti tradizionali, e cominciò ad avvicinarsi alla religione cristiana.
(9)
Diogene Laerzio scrisse che al tempo della 58a Olimpiade, nel 547 aC, Anassimandro aveva
64 anni e quindi sarebbe nato nel 611 aC.
(10) Così scrive Diogene Laerzio nella Raccolta delle vite e delle dottrine dei filosofi, ix.21), che a
sua volta riprende la notizia da Teofrasto.
(11) Le affermazioni di Seleuco le conosciamo grazie agli scritti di Sesto Empirico, filosofo greco
del II secolo dC, esponente dello scetticismo.
(12) De Natura Deorum: Si consideri innanzitutto la terra nel suo complesso, situata al centro
dell'universo, solida e rotonda, ricoperta di fiori, di erba, di alberi, di raccolti: l'incredibile
moltitudine di tutti questi si distingue per l'infinita varietà di colori.
(13) Nel pensiero di Sant‟Agostino era presente anche l‟idea dell‟evoluzione della vita: “[Dio]
creò gli animali terrestri, i più recenti tra gli ultimi elementi del mono; tuttavia li creò in
modo potenziale, affinché con il trascorrere del tempo il loro numero crescesse” (Commento
alla Genesi, libro V, Cap. 15, vers. 14).
Monedas antiguas
63
OMNI N°4 – 02/2012
64
Monnaies antiques
OMNI N°4 – 02/2012
Monnaies wizigothiques
Monedas visigodas
Aportación a la moneda visigoda p. 66
Ruth Pliego Vázquez y Iago
Urgorri
Monedas visigodas
65
OMNI N°4 – 02/2012
APORTACIÓN A LA MONEDA VISIGODA.
Ruth Pliego Vázquez y Iago Urgorri
Presentación de tres numismas inéditos.
D
esde la publicación, hace ya dos años,
de la obra La Moneda Visigoda
(Sevilla, 2009), en cuyo corpus se
recoge la práctica totalidad de las monedas
visigodas
conocidas,
han
venido
produciéndose algunas novedades que deben
ser
incorporadas
a
este
repertorio
numismático. El conocimiento de estos
ejemplares
novedosos
ha
venido,
principalmente, de la mano de los catálogos
de subastas de las más prestigiosas firmas
numismáticas. No obstante, existe una fuente
innovadora en sí misma que debe tenerse en
cuenta y que por su carácter en gran parte
efímero, requiere de una atención constante.
Nos referimos a los foros numismáticos en los
que se exhiben piezas con el objetivo de que
sus miembros aporten su experiencia y
conocimientos y así obtener una atribución lo
más certera posible de ellas. Entre los foros
destaca por su mayor implicación científica,
el Foro OMNI (1) que cuenta con revista
propia, y que es además del que proceden las
tres piezas que se presentan en este artículo.
La moneda más interesante de este grupo es,
en nuestra opinión, un ejemplar de
Hermenegildo (579-584) (nº 1), que como se
advierte en la imagen que se incluye muestra
un buen estado de conservación y una fábrica
impecable. Responde a una descripción
conocida (Pliego 62 b), de la única pieza
registrada bajo esa entrada, perteneciente a la
antigua colección de Vidal Quadras –hoy en
paradero desconocido– de la que sólo se
66
Monnaies wizigothiques
conserva un grabado en la obra de Heiss
(1872, pl. II, 2; Pliego 2009, t. II, p. 576).
La segunda moneda es también muy
interesante de entre las que conforman este
grupo de novedades. Pertenece al reinado de
Chintila (636-639), en concreto al taller de
Castilona (nº 2). De esta ceca únicamente se
conocen ejemplares a nombre de este monarca
y de su antecesor, Sisenando (631-636). No
obstante mientras que de este último hay
registradas hasta 24 monedas, a nombre de
Chintila sólo se contaba con cinco piezas
hasta el momento. Por otro lado esta moneda
no responde a la tipología más común de este
taller bajo el reinado de Chintila (tipo 3.d.1,
tanto en anverso como en reverso), de la que
se conocen cuatro ejemplares, sino que
muestra el tipo 3 e.1 (Pliego 478),
representado gracias a una pieza que aunque
fragmentada, parece responder a la misma
descripción que la que aquí se incluye.
Por último a nombre de Egica (687-695) se
cuenta con una moneda de la ceca de Toleto
cuya leyenda de anverso presenta una ligera
variación con respecto a un ejemplar muy
similar registrado (Pliego 682 c) (nº 3).
Presenta en anverso el busto de perfil tocado
y con cetro rematado en forma globular,
mientras que en reverso la tradicional cruz
sobre gradas descansa sobre el símbolo ( ).
A continuación se expone la descripción de
cada una de las monedas comentadas,
detallando las leyendas de sus anversos y
reversos.
OMNI N°4 – 02/2012
1 : HERMENEGILDO
2 : CHINTILA
3 : EGICA
Pliego 62 (b)
[Foro OMNI (2) - Marzo 2011; Numisma
Leilões, Lisboa (12 y 13-12-2011, 9*)]
Peso: 1,26 g - Diámetro: 20 mm
Pliego 478.
[Foro OMNI (3) - Octubre 2010]
Peso: 1,077 g - Diámetro: 19 mm
Pliego 682 (c) var.
[Foro OMNI (4) - Diciembre 2007]
Peso: 1,7 g - Diámetro: 20 mm (aprox.)
Monedas visigodas
67
OMNI N°4 – 02/2012
NOTAS Y BIBLIOGRAFÍA
(1) http://www.identificacion-numismatica.com.
(2) http://www.identificacion-numismatica.com/t40591- & WM n° 6038 (Wikimoneda, Abril 2011)
www.wikimoneda.com/fiche.php?id=6038.
(3) http://www.identificacion-numismatica.com/t36063- & WM n° 2099 (Wikimoneda, Noviembre
2010) http://www.wikimoneda.com/fiche.php?id=2099.
(4) http://www.identificacion-numismatica.com/t7069- & WM n° 4 (Wikimoneda, Diciembre 2009)
http://www.wikimoneda.com/fiche.php?id=4
HEISS, A. (1872) Descripción general de las monedas de los reyes visigodos de España, Madrid.
MILES, G. C. (1952) The coinage of the Visigoths of Spain. Leovigild to Achila II, New York.
PLIEGO, R. (2009) La moneda visigoda, Universidad de Sevilla, Sevilla.
WEBOGRAFÍA
http://www.identificacion-numismatica.com
http://www.wikimoneda.com
68
Monnaies wizigothiques
OMNI N°4 – 02/2012
Monnaies médiévales et modernes
Monedas medievales y modernas
Nota breve descriptiva de un cruzado de ceca
p. 70
inédita
Les princes de Sedan : 66 ans de frappe p. 72
Un écu d’or au soleil inconnu au nom de François Ier p. 74
L’histoire de l’aigle bicéphale des armoiries de Russie
p. 76
à travers le monnayage
Iago Urgorri y Antonio Roma
Quentin Hohmann
Antonio Roma Valdés
Bruno Visentini
La serie de un maravedí de cobre de Felipe III :
p. 81
revisión crítica y nuevas aportaciones
Iago Urgorri y Pablo Rueda
Rodríguez-Vila
Un ejemplo de fuente documental respecto al
p. 85
resello de 1641
Carlos Alajarín Cascales
El resello de Maura, una España dividida p. 88
Alex Lascano
Monedas medievales y modernas
69
OMNI N°4 – 02/2012
NOTA BREVE DESCRIPTIVA DE UN CRUZADO DE
CECA INÉDITA
Iago Urgorri y Antonio Roma
Nota descriptiva como un avance de un próximo estudio a fondo.
Recientemente ha aparecido en el foro OMNI1
un cruzado de Enrique II que por sus peculiares
características ha llamado la atención de
numerosos medievalistas en éste y otros foros
numismáticos. En esta breve nota queremos
presentar dicha pieza, describiéndola y
planteando algunas posibles respuestas en
relación con la marca de ceca que presenta.
Descripción de la pieza:
Cruzado de Enrique II (1369-1379),
perteneciente a las emisiones posbélicas del año
1369.
Es una pieza inédita cuya singularidad se en las
letras que porta encima de la corona del
monarca en el anverso.
Es del tipo 252 del catálogo de Roma2 y del
Grupo I del Álvarez Burgos3.
Peso: 2,16 g
Diámetro: 23 mm
Leyenda Anverso: + ENRICVS : REX :
LEGIONIS : L
Portando E A encima de la corona del rey,
formando una perfecta composición.
Leyenda Reverso: + ENRICVS : RE (cruz
latina) X : CASTELL
Portando E // N // R // I , en cada uno de los
cuarteles de la cruz latina.
Posibles interpretaciones:
-Marca de ceca inédita. Se correspondería con
algún taller que se desconoce hasta ahora y del
que no se ha tenido noticia4. No debe olvidarse
que en esta emisión de posguerra se acuña en
numerosas ciudades, entre ellas las cabezas de
obispados que no acuñaban, conociéndose
documentalmente la existencia de talleres en
Santiago y Córdoba. Pero sí nos permitimos
subrayar que las marcas de taller mencionan la
inicial de la ciudad.
-Que se trate de un posible error de acuñación,
donde dice E A debería decir Ç A, por lo que
entonces estaríamos ante una pieza de ceca
Zamora. Por nuestra parte, opinamos que la E
es perfectamente clara, por lo que encontramos
poco razonable esta posibilidad.
1
www.identificacion-numismatica.com
(Roma 2010), pp. 80 – 82.
3
(Álvarez Burgos 1998), pp. 107 – 109.
2
70
4
Algunos miembros del foro especulaban con nombres
tales como Emerita Augusta, Extremadura, etc.
Monnaies médiévales et modernes
OMNI N°4 – 02/2012
-Cabe la posibilidad y no es descabellada de
que las letras pudieran ser un final del leyenda
del reverso que continuó en e campo del
anverso. No e descabellado pues se conocen
numismas en otros reinados en que esto ha
pasado, por poner un ejemplo, en los Blancos
del Agnus Dei de Juan I.
La forma latina CASTELLEA permanece hoy
en día en forma de apellido que derivo en
Castillejo.
Siguiendo por esta línea, pudiera ser que la “E”
fuese el final de leyenda del reverso
“CASTELL” + “E”, y en cuanto a la “A”
sobrante fuese la marca de ceca colocada en un
lugar no conocido hasta este momento.
Sin duda alguna, la propuesta que más peso
tiene es la de que sea una marca de ceca que
requiere una atribución aún por determinar. Por
nuestra parte, no nos inclinamos a realizar una
atribución dada la concurrencia de dudas que
sólo pueden permitir la opinión, la propuesta o
la sugerencia.
Quede aquí esta breve nota descriptiva como un
avance de un próximo estudio a fondo sobre
esta pieza ya que se está delante de una clara
representación de la numismática medieval.
Todavía quedan muchas preguntas sin
respuesta, piezas dudosamente catalogadas,
documentación de la época que confirme
numerosas teorías, en conclusión, un mundo
por descubrir. Se espera que en futuros estudios
se pueda aportar más información sobre esta
pieza, sin duda un gran descubrimiento a
principios de 2012.
BIBLIOGRAFÍA
ÁLVAREZ BURGOS, F. (1998) Catálogo de la moneda medieval castellano-leonesa. Siglos XI al
XV, Vico & Segarra editores, Madrid.
ROMA VALDÉS, A. (2010) Emisiones monetarias leonesas y castellanas de la Edad Media.
Organización, economía, tipos y fuentes, Morabetino.es, Santiago de Compostela.
WEBOGRAFÍA
http://www.identificacion-numismatica.com
Monedas medievales y modernas
71
OMNI N°4 – 02/2012
LES PRINCES DE SEDAN : 66 ANS DE FRAPPE
Quentin Hohmann
Cet article retrace l‟histoire de la principauté de Sedan. D‟un point de vue numismatique, cette
principauté est relatée selon trois périodes principales, depuis Guillaume-Robert de la Mark
jusqu‟à l‟abandon de la souveraineté de Sedan, par Frédéric-Maurice de la Tour.
P
endant la Renaissance, le territoire de
Sedan
était
une
principauté
indépendante. Les princes souverains de
Sedan battirent monnaie pendant soixante-six
ans (1577-1643). Ces frappes peuvent se
présenter en trois grandes périodes du
monnayage des princes souverains de Sedan.
Guillaume-Robert de la Mark
Tout d‟abord, Guillaume-Robert de la Mark
qui, en 1576, se dit souverain de la seigneurie
de Sedan et de Raucourt qui deviennent ainsi
principauté2.
Les
essais
de
frappes
commencèrent en 1577 avec quelques doubles
tournois connus à très peu d‟exemplaires, mais
aussi avec des douzains, cette affirmation
s‟appuyant pour l‟instant au recensement d‟un
unique exemplaire (musée de l‟Ardennes à
Charleville- Mézières) [1]. La frappe à
proprement parlée commence en 1587 avec la
frappe de 36 000 doubles tournois. Dix ans
plus tard le souverain de Sedan commence à
frapper des monnaies en or mais aussi des
doubles tournois en quantité plus importante.
Guillaume-robert décède suite à une maladie à
l‟âge de 25 ans, le 11 janvier 1588. C‟est sa
sœur, Charlotte, qui hérite de la principauté.
Elle se marie avec Henry de la Tour
d‟Auvergne en 1591.
(1) Monnaie de la principauté de Sedan,
Henry de La Tour d‟Auvergne. Frappée à
Raucourt (présence de RAV).
1
Description
A/ HENR.DE.LA.TOVR.D.BVLLIONII//1614
Buste de Henry de la Tour à droite
R/ SVP.PRINCEPS.SEDANI.ET.RAV
Ecu couronné. Source : Wikimoneda n°2683
1
Fils de Henri-Robert de La Marck et de Françoise de
Bourbon-Vendôme.
2
Il se fait appeler duc de Bouillon, il est seigneur de
Jametz et de Raucourt, marquis de Cotron, comte de la
Marck, de Braine et d'Albon, baron de Sérignan, Privas,
Arlempdes, Mauny, châtelain de Nogent-le-Roi et de
Chaumont-sur-Loire, capitaine de 100 hommes d'armes
des ordonnances du roi et des Suisses de la garde royale.
72
Henry de la Tour d’Auvergne
La seconde période du monnayage des princes
souverains de Sedan commence en 1612, avec
les frappes mécaniques du renommé Didier
Briot3, à qui Henri de la Tour avait confié la
gestion de sa Monnaie. La fabrication
commença en 1612, d‟une manière très
modeste, puis en 1613, plus abondamment.
Mais en 1614, Henry de la Tour estime une
faiblesse quant à la quantité de ses frappes, en
comparaison avec les frappes de souverainetés
voisines, telle Arches (Charleville-Mézières
actuellement), dirigée par Charles de
Gonzague. C‟est ainsi qu‟Henri de la Tour fait
construire un nouvel atelier monétaire à
Raucourt, où il fait frapper des monnaies entre
1614 et 1615. Ces monnaies, frappées à
Raucourt se distinguent de celles de Sedan par
la mention RAVCOVRT qui était écrit en Latin
et souvent avec la forme abrégé RAV en fin de
légende. À la mort de Henry de la Tour, son
fils Frédéric-Maurice prend possession de la
principauté. Ainsi commence la troisième
période du monnayage des princes souverain
de Sedan.
3
Didier Briot avait auparavant officié à Charleville de
1607 à 1612. Il était, depuis 1606, le tailleur général des
monnaies des rois de France et le restera jusqu'à sa fuite
en Angleterre en 1625.
Monnaies médiévales et modernes
OMNI N°4 – 02/2012
Frédéric-Maurice de la Tour
En 1625, les anciennes monnaies devaient êtres
remplacées par les nouvelles espèces qui
étaient exécutées sur le modèle de celles de la
France. À partir de 1635, la fabrication de
monnaies devient peu à peu massive, et atteint
plusieurs
millions
d‟exemplaires.
Ces
monnaies sont frappées sans beaucoup de soin.
Les poids et les diamètres sont très variables.
Les coins sont utilisés jusqu‟à une usure
extrême. C‟est alors que Frédéric-Maurice de la
Tour fait arrêter des responsables de la frappe,
les monnaies frappées n‟étant pas conformes
aux règlementations.
Frédéric-Maurice est un comploteur et déteste
le principal ministre du roi Louis XIII,
Richelieu. Frédéric-Maurice essaie de l‟abattre
en 1641, mais échoue. En 1642 il participe au
complot du Cinq Mars où il est arrêté. Il est
contraint de sauver sa tête avec l‟intervention
de son frère Henri, le maréchal de Turenne. En
échange de sa vie, Frédéric-Maurice de la Tour
doit abandonner la souveraineté de Sedan4.
C‟est ainsi que la frappe de la monnaie de la
souveraineté de Sedan cesse, en 1643.
(2) Double tournois. Sedan. 1633.
Description
A/ F. MAVRICE. DE. LA. TOVR. P. S. D. S.
Buste à droite de Frédéric-Maurice de La Tour
d'Auvergne, avec un large col en dentelles.
R/ + DOVBLE. TOVRNOIS. (1633). Grande
tour surmontée d'un lis, dans un champ semé
de lis.
Ce double tournois à été frappé selon une
imitation des doubles tournois français.
Source http://inumis.com.
BIBLIOGRAPHIE
[1] Les Trésors de la Principauté de Sedan. Société d'Histoire et d'Archéologie du Sedanais "Amis
du Vieux Sedan", 1996.
http://www.chateau-fort-sedan.fr/historique-historium.html
http://wikimoneda.com
4
L'armée française occupe alors le château durant 320
ans jusqu'en 1962, où la ville de Sedan le racheta pour le
franc symbolique et vota lors d'un Conseil Municipal, à
une voix près, de ne pas le détruire...
Monedas medievales y modernas
73
OMNI N°4 – 02/2012
UN ÉCU D’OR AU SOLEIL INCONNU
AU NOM DE FRANÇOIS IER
Antonio Roma Valdés
La numismatique royale ne cesse d‟évoluer, même si les modifications ou apports majeurs
demeurent rare. Dans cet article, nous présentons une monnaie inédite, un écu d‟or au soleil de
François Ier. Il s‟agit d‟une donnée cruciale pour la compréhension de l‟évolution de ce
monnayage, ainsi que pour la complétude des futurs catalogues de référence.
‟objet de cet article est la publication
d‟une monnaie appartenant à une
collection privée espagnole. Il s‟agit
d‟une fraction d‟un écu d‟or de François Ier de
France (cf. Fig. 1), dit le Père et Restaurateur
des Lettres, qui a un poids de 1,29 g. Cette
monnaie a été divisée en deux, certainement
avec l'intention de lui attribuer précisément la
moitié de sa valeur, utilisant l‟axe vertical de la
branche de la croix présente à l‟avers comme
repère de découpe. Notons la présence d‟une
légère fissure dont la cause reste à expliquer
(peut-être est-elle apparue au moment de la
découpe).
L
11
22
Fig. 1 : Demi écu d‟or de François Ier.
33
Description
A/ FRANCISCVS DEI GR (…)
Champ écartelé de France-Dauphiné, sous un
soleil.
R/ XPS VINCIT XPS R (…).
Croix fleurdelisée avec quadrilobe en cœur,
cantonnée aux 1 et 4 d'une F couronnée et aux 2
et 3 par une fleur de lys.
Fig. 2 :
(1) : Écu d'or au soleil du Dauphiné 2e type ;
(2) : Écu d'or au soleil de Bretagne 2e type ;
(3) : Écu d'or au soleil du Dauphiné 1er type.
L'intérêt de cette pièce est qu‟elle combine
deux types distincts. D'une part, sur l‟avers,
nous trouvons le type d‟un écu d‟or au soleil du
Dauphiné (décrit par Ciani sous les numéros
iNumis Mail Bid Sale 8, lot 521
iNumis Mail Bid Sale 8, lot 523
3 iNumis Mail Bid Sale 8, lot 520
1
2
74
Monnaies médiévales et modernes
OMNI N°4 – 02/2012
1081 et 1082), c'est à dire, un champ écartelé
de France-Dauphiné, sous un soleil (cf. Fig. 1).
Les revers associés à l‟avers décrit ci-avant ont
pour habitude de présenter une croix
fleurdelisée dont deux cantons présentent une F
couronnée (cf. Fig. 2, n°1) ou simplement une
croix fleurdelisée sans meubles dans ses
cantons (cf. Fig. 2, n°3). Il existe aussi les écus
d‟or au soleil de Bretagne, dont les cantons sont
ornés d‟une F couronnée et d‟une moucheture
d‟hermine couronnée (cf. Fig. 2, n°2).
Toutefois, la monnaie faisant l‟objet de cet
article présente une lettre F couronnée dans le
canton 4 (et 1 ?), opposée à une fleur de lys
dans les cantons 3 (et 2 ?), présenté par Ciani
sous les références 1075 à 1078 en tant qu‟écu
couronné (1).
Il n'existe encore aucune description d‟écu d‟or
au soleil du Dauphiné présentant une
combinaison de F couronnées et de fleur de lys.
Dans ces conditions, deux interrogations sont
possibles. Doit-on créer un troisième type pour
cet écu ? N‟est-ce pas plutôt un écu hybride
combinant les coins correspondant à un écu du
Dauphiné pour une face et à un écu couronné
pour l‟autre face.
Écosse, il a été noté l'utilisation d‟un même
coin par différents ateliers monétaires à divers
moments tout au long du Moyen Age (2).
D'autre part, nous connaissons l'existence de
blancas de Jean II de Castille (1404-1454) avec
un revers de monnaies appartenant aux
monnaies de son prédécesseur, Henri III (3). Il
serait donc possible que l‟on ait entre nos mains
une monnaie indiquant que les émissions d'or
de 1350 à 1351 ont été frappées avec des coins
monétaires fabriqués dans le même atelier (4).
Finalement, les auteurs de futurs ouvrages à
propos de la numismatique royale devront
choisir entre deux possibilités : soit un
considère qu‟il s‟agit d‟un nouveau type,
auquel cas la création d‟un type s‟impose, soit
on considère qu‟il s‟agit d‟un type hybride qui
fourni des éléments cruciaux pour établir les
différentes
utilisations,
successives
ou
simultanées, des coins monétaires.
Ce phénomène de combinaison de coins n'est
pas courant, bien qu‟il ait déjà été observé. En
BIBLIOGRAPHIE
(1) CIANI, L., Les monnaies royales françaises de Hugues Capet a Louis XVI, Paris, 1926.
(2) STEWART, I., “Scotish Mints”, R. A. G. CARSON, Mints Dies and Currency. Essays in
Memory of Albert Baldwin, Londres, 1971, 165-290, 1971, pp. 256-270.
(3) ROMA VALDÉS, A., Emisiones monetarias leonesas y castellanas de la Edad Media.
Organización, economía, tipos y fuentes, morabetino, 2010; Antonio Roma Valdés, José Luís
Braña Pastor, El vellón castellano del siglo XV, morabetino, 2010. V. www.morabetino.es
(4) BOMPAIRE, M., DUMAS, F., Numismatique medievale, Turnhout, 2000, p. 503.
Monedas medievales y modernas
75
OMNI N°4 – 02/2012
L’HISTOIRE DE L’AIGLE BICÉPHALE DES ARMOIRIES
DE RUSSIE À TRAVERS LE MONNAYAGE
Bruno Visentini
C‟est en 1472 que l‟aigle bicéphale arriva en Russie, en provenance de Rome, suite à un drame
amoureux et un calcul politique, dont l'auteur n'était autre que le pape Paul II.
L’origine papale
cette époque, l'ensemble du monde
chrétien
traversait
une
période
tourmentée. Les armées musulmanes
gagnaient du terrain en Europe orientale.
L'Empire byzantin et Constantinople (1453)
venaient de chuter, Constantinople devint la
capitale de l'Empire ottoman et fut rebaptisée
Istanbul. L'impitoyable sultan Mehmet II (7e
sultan de l'Empire ottoman), le plus grand des
souverains turcs, venait de soumettre la Grèce
et les Balkans et menaçait les suprématies
vénitiennes et génoises.
À
Afin de se protéger, le Pape trouva refuge chez
le frère du dernier Empereur byzantin
«Constantin XI», Thomas Paléologue. Celui-ci
avait une fille, la princesse Sophie (1448-1503).
Afin de consolider la position de Rome, le Pape
songea sérieusement à lui trouver un époux, ce
qui aurait pu permettre de conclure une alliance
lors de cette période périlleuse.
Finalement, le choix du pape s'est arrêté sur la
Moscovie chrétienne et sur le Grand prince
Ivan III (1440-1505) qui venait justement de
perdre son épouse. A son époque, et jusqu„à
Pierre I°, il fut considéré comme le souverain
Russe ayant le génie le plus éclatant.
C‟était le seul à avoir été capable de rivaliser
d'intelligence et de force face au sultan
ottoman. C'est sous son règne que la Russie fut
définitivement débarrassée du joug mongol. Il à
aussi été le premier à se doter du premier corps
de lois et de services de poste. C'est lui, en
outre, qui a instauré la police. Sous son règne,
Moscou a réprimé l'insurrection de Novgorod,
maté le royaume (khanat) de Kazan, battu
Casimir, Grand-duc de Lituanie et Roi de
Pologne. Il a définitivement prouvé que
76
Moscou avait le droit d‟être nommée capitale
du jeune État.
A cette époque, le Grand prince était encore
très jeune, il n'avait que 20 ans, mais avait déjà
un fils de feue sa première épouse.
Après son mariage avec la princesse
malheureuse, le Pape espérait que ce jeune
Prince rendrait Constantinople à son épouse et
rentrerait en guerre contre les Turcs. Plusieurs
émissaires furent envoyés à Moscou pour
présenter le portrait de la jeune princesse à Ivan
III.
Celle-ci était fort belle. Même si cela n'avait
pas été le cas, le souverain russe aurait tout de
même accepté la proposition du pontife romain.
Le monarque ambitieux apprécia tout de suite
les avantages politiques d'un mariage avec
l'héritière légitime du trône byzantin. Cette
alliance faisait de lui, le souverain (nominal)
d'un immense territoire (quoique envahi par les
Turcs), l'héritier du grand empire d'où provenait
la lumière du christianisme. De plus, Sophie
était orthodoxe tout comme l'était le peuple de
Russie.
Ivan III donna son assentiment à la proposition
du pape et envoya à Rome une ambassade
chargée d‟offrir de généreux cadeaux pour sa
fiancée et le souverain pontife.
Le mariage et la cérémonie religieuse eurent
lieu en l'absence du fiancé, en la cathédrale
Saint-Pierre, en présence du pape. Un
ambassadeur russe tint le rôle du mari.
Il fallut 6 mois à la princesse Sophie pour
rallier Rome à Moscou. Partie le 1er juin 1472
en plein été, elle n‟arriva que le 12 novembre.
Son mari, qu'elle voyait pour la première fois,
Monnaies médiévales et modernes
OMNI N°4 – 02/2012
l'attendait dans la chambre de sa mère. Les
véritables noces furent célébrées le soir même.
Sophie donna à Ivan trois filles et six fils, dont
l'aîné hérita du trône. Elle apporta à Moscou
l'esprit de la culture italienne. C'est elle qui
suggéra au Grand prince de faire reconstruire le
Kremlin sous forme de château dans le style
florentin, lui donnant l'aspect que tout le monde
connaît aujourd'hui : une cité de palais et de
cathédrales entourés d'une enceinte de
murailles rouges. A l „époque, l‟enceinte étais
composée de gros pieux de bois appelés
« Kreml » par les tatars, d‟où le nom de
Kremlin plus tard. Elle fit aménager, sur un toit
plat, le premier jardin suspendu ainsi que le
premier bassin aux poissons d'or.
image; ce n'est que le tsar Ivan IV le Terrible
qui décida de faire dessiner sur la poitrine de
l'oiseau un écu frappé des armoiries de
Moscovie : un cavalier (Saint Georges)
terrassant le dragon de sa lance.
¼ Tchervonets : Mickail Fedorovitch (16131645). (kuenker)
L’arrivée du symbole en Russie
Mais sa dot principale était constituée de
l‟emblème de Byzance : l'aigle bicéphale doré
figurant sur le sceau du dernier empereur, reçu
par Ivan III des mains de son épouse.
L‟aigle à deux têtes devenait symbole
d‟indépendance. Les deux têtes couronnées
pouvaient prétendre être celui du pouvoir sur
les parties orientale et occidentale de l'Empire.
2/3 Tchervonets : Mickail Fedorovitch (16131645). (Kuenker)
Cet ajout a rendu les armoiries russes
effrayantes. Aux deux têtes de l'aigle trois
autres s‟en sont ajoutées: celles du cavalier, du
cheval et du dragon. De surcroît, il y avait la
lance.
La dynastie de Romanov, ne trouvant pas ces
armoiries assez terrifiantes apporta plusieurs
changements durant les quatre siècles suivants.
Ce fut d‟abord les ailes qui, étant repliées furent
dépliées, ce qui donnait l‟impression que l‟aigle
était prêt à s‟envoler.
Poulo de Moscou : Ivan III (1462-1505)
première monnaie représentant l‟aigle
bicéphale. (Priviet)
Cet animal a impressionné les Russes par sa
force mystérieuse. Ivan III fit frapper la
première monnaie (Poulo de Moscou en cuivre)
avec l‟aigle bicéphale en 1497.
Cette même année, l‟aigle apparaissait aussi sur
le cachet d‟une charte du Grand-duc Ivan III
Vassiliévitch. Personne n‟osait toucher à cette
Rouble 1654 : Alexeï Michailovitch (16451676) Michel 1er fondateur de la dynastie
des Romanofs. (Kuenker)
Plus tard, les becs furent ouverts et langués. (En
symbolique, la langue peut-être considérée
comme une flamme, elle détruit ou elle purifie,
Monedas medievales y modernas
77
OMNI N°4 – 02/2012
en tant qu‟instrument de parole, elle crée ou
anéantit).
Ainsi, l‟aigle incarna l‟image du soldat fidèle et
du chef militaire glorieux. L‟empereur fit aussi
changer la couleur de l‟aigle, remplaçant le
doré par la couleur de l‟audace, le noir.
L'aigle de Pierre le Grand personnifiait la
nouvelle politique de la Russie, à savoir celle
de l'élargissement du territoire.
Double Tchervonets : Féodor Aleixievitch
(1676-1682) Féodor III. (Kuenker)
Les pattes furent dotées de puissantes griffes
serrant un sceptre et un globe, symboles de la
puissance. Même les couronnes, modifiées,
donnaient alors l'impression de survoler les
têtes du rapace.
Rouble 1707 Moscou : Pierre 1er (16821725). (Kuenker)
Ce fut Pierre1° qui décida d‟ajouter sur la
poitrine de l‟oiseau une chaîne en or de l'Ordre
de Saint-André, la plus haute distinction de
Russie, et les trois couronnes furent réunies par
un ruban de moire.
Au début du XIXe siècle, le Tsar Alexandre 1er,
jugeant que son empire (qui occupait un tiers de
l‟hémisphère nord de la planète), avait atteint
ses limites ordonna de rétablir la couleur dorée
qui représentait la protection du nid familial, et
apporta d‟autres modifications. Il retira le
sceptre et le globe des pattes de l‟oiseau, et les
remplaça par des foudres, une torche et une
couronne de lauriers.
Rouble 1830 St Petersburg: Nicolas 1er:
(1825-1855). (Kuenker)
Les nouvelles armoiries de la Russie
promettaient désormais à ses sujets, une
domination vertueuse (Lauriers), instruction
(torche), et pour les ennemis du pays, le
châtiment (foudres) en cas d‟attaque contre
l‟Empire. Nous retrouverons ces nouvelles
armoiries sur le monnayage de Nicolas 1er
(1825-1855). Les foudres n‟apparurent que sur
les monnaies en cuivre.
Rouble 1730 Moscou : Anne (1730-1740).
(Kuenker)
Ce changement n‟apparaitra sur les monnaies
qu‟à partir de 1730 sous le règne de la Tsarine
Anne (1730-1740), mais sans le ruban de
moire.
78
5 Kopeck 1831 Yekaterinburg: Nicolas 1er:
(1825-1855). (Kuenker)
L‟empire russe poursuit, sous son règne et celui
de ses successeurs, son expansion dans le
Caucase et vers les bouches du Danube, au
Monnaies médiévales et modernes
OMNI N°4 – 02/2012
détriment des empires perse et ottoman. La
Géorgie rejoint volontairement l‟empire en
1801. La partie orientale de la Principauté de
Moldavie (vassale de l'Empire ottoman) est
annexée en 1812 et forme la goubernia de
Bessarabie et finalement libéra la Grèce.
L‟Arménie, le Daghestan et une partie de
l‟Azerbaïdjan sont annexés en 1813 au terme
d‟un conflit de quatre ans avec l‟empire perse.
Ensuite, suivi la prise de la Lituanie et le
partage de la Pologne, la libération de la
Bulgarie, puis la guerre de vingt ans contre les
États musulmans dans les déserts qui s'étendent
au-delà de la mer Caspienne, et le rattachement
de l'Asie centrale. La Finlande fut son trophée
final.
Le dernier empereur russe Nicolas II, jugeant
nécessaire de déclarer à nouveau que la Russie
avait atteint ses limites, modifia à nouveau les
armoiries en les ornant du symbole de
l‟apaisement, en garnissant les ailes de l‟aigle
des armoiries des six territoires rattachés à la
Russie. Dorénavant, on pu y voir les armoiries
des royaumes de Kazan, d'Astrakhan, de
Sibérie, de Pologne et de Finlande, ainsi que de
la Chersonèse taurique, symboles que l‟on
retrouvaient déjà sur le monnayage de Nicolas
1er.
de l'expansion prolétarienne et paysanne : une
faucille et un marteau joints sous un pentacle.
Ces nouvelles armoiries, concernant ce pays
communiste, symbolisaient déjà l‟aspiration du
pouvoir sur l‟ensemble de la planète.
Rouble 1921 Leningrad : Union Soviétique
R.S.F.S.R (1918-1922) (République socialiste
fédérative soviétique de Russie). (Kuenker)
5 Kopeck 1953 : Union Soviétique C.C.C.P
(1922-1991) ('Union des républiques
socialistes soviétiques). (Kuenker)
Un symbole hors du temps
On pouvait penser que cet oiseau doré et pesant
ne devait plus s'envoler dans le ciel de la
guerre.
C‟est en 1991, après l‟écroulement de l‟empire
Soviétique que l‟aigle bicéphale réapparut.
Dans un premier temps, on reprit les anciennes
armoiries et on fit quelques modifications. On
enleva simplement les couronnes, ainsi que le
sceptre et le globe, représentant les symboles
du pouvoir. Pour finir, son bec se retrouva
fermé. Suites aux vives critiques concernant cet
aigle démuni singulièrement appelé «poule
fripée» (cf. photo « 25 Roubles 1993 »), on
remit pratiquement tous ces attributs, et c‟est
l‟artiste Evgueni Oukhnalev qui fut chargé de
recréer les nouvelles armoiries de ce pays en
plein changement.
Mais l‟histoire de la Russie et de ces armoiries
ne s‟arrêtait pas là, car après la Révolution
d‟octobre 1917, elles furent modifiées : les
attributs tsaristes ayant disparu, furent
remplacées par de nouvelles armoiries de l‟ère
« URSS », sur lesquelles figurait à présent la
partie haute d‟un globe terrestre, au dessus
duquel se levait le soleil brillant des nouvelles
victoires. Le tout était dominé par le symbole
25 Roubles 1993 : après l‟écroulement de
l‟empire Soviétique. (Kuenker)
6 Roubles 1829 St Petersburg: Nicolas 1er:
(1825-1855). (Kuenker)
Monedas medievales y modernas
79
OMNI N°4 – 02/2012
Elles furent entérinées en décembre 2000.
Aujourd'hui, cet emblème d'une république
fédérative se présente, paradoxalement, comme
un emblème monarchique sur lequel sont
présents tous les attributs du pouvoir tsariste.
Mais sa symbolique est interprétée autrement
car la readoption de l‟aigle a répondu à un
besoin du pays de reconstruire son identité par
la réappropriation de l‟héritage russe.
L‟aigle bicéphale doré est dessiné sur un écu
héraldique rouge en accolade (écu français). Il
est couronné de deux petites couronnes et d'une
plus grande, réunies par un ruban de moire.
Dans sa patte droite, l'aigle tient un sceptre et
dans sa gauche un globe. Sur la poitrine de
l'oiseau est dessiné un autre écu frappé des
armoiries de Moscou, représentant un cavalier
d'argent en cape bleue, sur une monture
d'argent, terrassant de sa lance d'argent un
dragon noir tombé à la renverse et piétiné par le
cheval.
Voici l'une des clés de lecture de cette image :
la Russie se trouve toujours sous la protection
de la Sainte-Trinité, elle croit en Dieu, au tsar
(au pouvoir) et à la patrie. Elle déploie ses
80
forces en vue de préserver son territoire et rien
de plus. Elle est fidèle à la loi et à un ordre
mondial équitable, ce que symbolise le ruban
de décoration, signe de la hiérarchie. La Russie
ne menace personne, ses intentions sont pures
comme l'argent, ses forces obéissent à la
couleur bleue, celle du service. Sa lance est
pointée vers le bas, dirigée contre le mal
commun de l'humanité. Et ce mal est représenté
uniquement par les péchés et les malheurs
communs, et non pas par des gens et des États.
On pourrait donc conclure que les armoiries de
la Russie symbolisent à la fois le serment et la
prière.
Nouvelles armoiries (décembre 2000).
Monnaies médiévales et modernes
OMNI N°4 – 02/2012
LA SERIE DE UN MARAVEDÍ DE COBRE DE FELIPE III:
REVISIÓN CRÍTICA Y NUEVAS APORTACIONES
Iago Urgorri y Pablo Rueda Rodríguez-Vila
La presentación de ejemplares inéditos siempre supone un avance en la investigación numismática.
En el siguiente artículo se va más allá y se profundiza en el estudio de la serie de un maravedí de
cobre de Felipe III, exponiendo numismas desconocidos hasta ahora y aclarando errores de
catalogación que se vienen arrastrando en las obras generales sobre moneda española.
R
ecientemente ha aparecido en el foro
OMNI1 una moneda de un maravedí de
Felipe III de ceca Toledo con fecha
1602. No se tenía constancia, hasta ahora, de
ningún otro ejemplar acuñado en esta ceca con
similares características2. Este casual hallazgo
hace que se profundice en el estudio de esta
serie. En el transcurso de la investigación se
han encontrado otros ejemplares inéditos que
también se presentan en este artículo.
En el reverso aparece un castillo de tres torres,
con el valor "I" (de 1 maravedí) en posición
horizontal a la derecha del castillo y con la letra
“T” con círculo encima (como marca de ceca) a
la izquierda del mismo. Rodeado a su vez por
una gráfila de puntos.
Su peso aproximado es de 0,85 g y cuyo
diámetro ronda los 12 mm de media.
Esta serie se acuñó por orden de la Pragmática
Real del 13 de Junio de 16023, por la cual se
Además, analizando documentación de la
época, se ha observado una serie de errores en
la clasificación de esta serie que aquí se quieren
aclarar.
Los numismas que se van a describir presentan
-en términos generales- las siguientes
características:
Figura 1. Maravedí de Felipe III (Toledo,
1602).
En el anverso el nombre del rey mediante un
anagrama coronado y bajo éste la fecha de
acuñación, rodeado todo por una gráfila de
puntos.
1
2
www.identificacion-numismatica.com
(Cayón 2005), (Calicò 2008) & (López 2011)
Pragmática del 13 de Junio de 1602: “Por quanto
aviendo entendido el mucho embaraco y costa que tiene
el acarrear de unas paites a otras la moneda de vellón
que ay labrada 3- que esto procede de ser tan grande el
pesso y tamaño que tiene y la necesidad que ay desta
moneda en la república para igualar y ajustar las
quentas del trato y comercio y deseando facilitar el uso
della y reduzirla a forma más ligera y portátil y
considerando que la liga de la plata que se le ha
acostumbrado de hechar no es de efecto alguno, antes se
pierde, y mis súbditos y vasallos dexan de aprovecharse
della y que assí es en beneficio de todos que se labre sin
la dicha liga, para que en estos Reynos ayamos copia de
plata [—] y por otras justas causas, con acuerdo y
parecer de algunos del mi Consejo y otras personas
graves de sciencia y conciencia que tienen mucha plática
y experiencia de lo que en esto conviene preveer y
aviéndoseme por ellos consultado, ñie acordado que
toda la moneda de vellón que de aquí adelante se labrare
en estos dichos Reynos sea sin liga ni mezcla de plata y
de la mitad de peso que agora tiene, haziéndose del de
una blanca los maravedís y del de un maravedí las
pieipas de dos maravedís y del de dos maravedís las de
quatro y del de los quartos que huvieren de ser de ocho
maravedís. Y assí mando a los tesoreros y officiales de
las casas de moneda destos mis Reynos que desde el día
de la publicación desta mi cédula en adelante toda la
moneda de vellón que en ellos se hiziere labrar y
labrare, assí por quenta de mi Real Hazienda, como de
los particulares que tengan licencia mía para ello, sea
sin ninguna liga de plata y del peso y forma que queda
referido, de manera que como hasta aquí se labravan de
cada marco de cobre 150 maravedís, de aquí adelante se
3
Monedas medievales y modernas
81
OMNI N°4 – 02/2012
establecía que a partir de entonces las monedas
de cobre no llevarían ningún porcentaje de liga
de plata. La acuñación de estas monedas se
suspendió en 1608, con la promesa del rey ante
las Cortes en la que prohibía la fabricación de
numerario de cobre en todas las cecas, incluida
Segovia, en los siguientes veinte años.
No obstante, dicha promesa fue incumplida en
1617 por Felipe III y posteriormente por Felipe
IV.
En esta Pragmática también se ordenó reducir a
la mitad el peso de las nuevas monedas, por lo
tanto las piezas de un maravedí que aquí
analizamos tienen el mismo peso que las
blancas de Felipe II.
En la fotografía aportada para la fecha de 1600
en el libro de reciente aparición de (LÓPEZ,
2011)6 se aprecia que la pieza no está en buen
estado y se encuentra afectada por una
corrosión limpiada que afectó a los dígitos de la
fecha. Mediante una comparación de cuños
(Figura 2) entre la fotografía que aparece en el
citado catálogo7 con la aportada para 1606 en la
misma obra, se puede concluir que ambas son
esta última fecha. Fijándose en la posición de
los dígitos en 1606, se observa como ambos
seises están a la misma altura frente al cero que
se encuentra parcialmente por debajo. Además
la curvatura del cero es diferente a la de los
seises, siendo ésta un poco más gruesa en uno
de sus extremos.
Es por ello que se ha de comentar el hecho de
que en Calicò4 aparezcan para la ceca de
Segovia acuñaciones de este tipo para los años
1600 y 1601. Es lógico pensar que se trate de
un error, pudiéndose tratar de una confusión
con la fecha 1606 y 16075.
labren 2S0 maravedís, y que se acuñe y estampe con el
sello y armas que por cédula mía está ordenado y que en
esta forma y con este valor corra la dicha moneda de
vellón por todos estos mis Reynos. Y qualesquier
personas naturales destos mis Reynos y Señoríos y fuera
dellos, de qualquiera calidad y condición que sehan, que
en ellos residieren y moraren reciban en pago de
qualesquier mercaderías que en ellos vendieren y deudas
que se les devan la dicha moneda de vellón sin liga de
plata y del pesso y tamaño y precios que de suso se
contiene. Y otrosí mando al presidente y los del mi
Consejo y a los presidentes y oidores de las mi
Audiencias y Chancillerías y a los asistentes,
corregidores, alcaldes mayores y sus tenientes y otros
qualesquier juezes y justicias destos mis Reynos y
Señoríos y personas a quien lo susodicho toca que hagan
guardar, cumplir y executar y cumplan y executen todo
lo susodicho, sin ir ni venir contra ello, ni contra cosa
alguna, ni parte dello, no embargante qualesquier leyes
y pragmáticas destos Reynos y ordenanzas de las casas
de monedas dellos y otra qualquier cosa que en
contrario aya, que para en quanto a esto tócalas derogo
y doy por ningunas, dexándolas en su fuenpa y vigor
para en lo demás. Fecha en San Lorenzo el Real, a treze
de junio de mil y seiscientos y dos aðos.”
4
En (Calicò 2008) Catalogo general de la…, p. 287.
Referencias: Tipo 233 (acuñación a martillo) nº 855 y
856; Tipo 234 nº 857 – 864.
5
En ninguno de los catálogos que citan como posible la
fecha de 1601 aportan fotografía para este año. Por lo
tanto no se puede demostrar mediante una comparación
de cuños que se trate de la fecha de 1607. No obstante, y
partiendo de la base de que la Pragmática es de 1602,
82
Figura 2. Comparación de anversos.
Izquierda: D-28 vs. Derecha: D-34
La bibliografía numismática hasta la fecha sólo
señala que Felipe III hubiese acuñado monedas
de un maravedí en las cecas de Cuenca y
Segovia (Casa Vieja e Ingenio). Este aspecto
también debe ser sometido a crítica.
Además del ejemplar de Toledo (Figura 1) que
aquí se presenta, se puede aseverar la acuñación
de estos numismas en la ceca de Granada
también, tanto para el año 1602 como para
1603.
parece lógico pensar –a priori- que debió tratarse de un
error de lectura de una pieza mal conservada.
6
(Lñpez 2011) Catálogo de los maravedís…, p. 149, nº
D-28. Copiando los datos iniciales procedentes del calicò
y por ende, arrastró sus errores.
7
D-28 para 1600 y D-34 para 1606; Y que se
corresponden en Calicò, op. cit. con nº 857 para 1600 y
nº 861 para 1606;
Monnaies médiévales et modernes
OMNI N°4 – 02/2012
Se puede observar (Figura 5) como el tipo de
castillo de Cuenca es mucho más fino y
estilizado frente al de Granada que es más basto
y grueso, si bien es cierto que tienen un alto
parecido estructural las diferencias son
notables.
Figura 3. Maravedí de Felipe III (Granada,
1602)
Figura 6. Comparación marcas de ceca.
Figura 4. Maravedí de Felipe III (Granada,
1603)
Estos dos ejemplares presentados (Figuras 3 y
4) aparecen clasificados –de manera erróneacomo de ceca Cuenca8 en (LÓPEZ 2011).
Mediante las comparaciones entre ejemplares
de ceca Cuenca y estos de ceca Granada
quedará demostrada de manera fehaciente las
diferencias tipológicas entre unos y otros.
En cuanto a las marcas de ceca, se aprecia
(Figura 6) como las de Granada portan el rabito
central propio de la “G”, y que sus extremos
son más cerrados que los de la “C” de Cuenca
que tienen una amplia distancia entre ambos.
La de la izquierda pertenece a una Blanca de
Felipe II de Granada. La del centro es la marca
de ceca de Granada de uno de los maravedís
presentados. Y la de la derecha es la marca de
ceca Cuenca de otro maravedí. Los parecidos y
las diferencias están claros.
Se ha de salientar que en (CALICÒ 2008) tan
sólo se cita el año 1602 para la ceca de
Cuenca9, por lo cual se aportan dos ejemplares
de años inéditos, esto es, (Figura 7 y 8) 1603 y
1604.
Figura 7. Maravedí de Felipe III (Cuenca,
1603)
Granada
Cuenca
Figura 5. Comparación tipo de castillo según
ceca.
8
(Lñpez 2011) Catálogo…, p. 148, tipos D-26 y D-27.
Si bien es cierto que en el catálogo de (López 2011)
aparecen para la ceca de Cuenca los años 1602 y
1603, se considera este último inédito debido a que
las piezas mostradas estaban erroneamente
clasificadas y por lo tanto se desconoce si en verdad
era conocido por el autor dicho año para dicha ceca.
9
Monedas medievales y modernas
83
OMNI N°4 – 02/2012
Es por ello que no debe descartarse que a partir
de estas notas presentadas hoy aquí, empiecen a
aparecer nuevos ejemplares11.
Figura 8. Maravedí de Felipe III (Cuenca,
1604)
Debido al gran parecido existente entre estas
monedas y las Blancas de Felipe II10 -incluso
sus medidas y peso son similares- no es raro
pensar que si hasta ahora no han aparecido más
ejemplares de otras cecas del tipo presentado en
este artículo puede deberse a que haya pasado
inadvertido por parte de vendedores y
coleccionistas confundiéndose unas con las
otras.
BIBLIOGRAFÍA
CALICÒ, X. (2008) Numismática Española (1474 a 2001), Barcelona.
CAYÓN, A., C., J. (2005) Las Monedas Españolas. Del Tremis al Euro. Del 411 a nuestros días,
Madrid.
FONTECHA Y SÁNCHEZ, R. DE (1968) La moneda de vellón y cobre de la monarquía española
(años 1516-1931), Madrid.
LÓPEZ DE LA FUENTE, J. L. (2011) Los Maravedís de los Austrias (1516-1700). Tipos y
Variantes, Torredonjimeno.
SANTIAGO FERNÁNDEZ, J. de (2008) La moneda castellana del siglo XVII: Corpus legislativo,
Madrid.
WEBOGRAFÍA
http://www.identificacion-numismatica.com (OMNI)
http://www.maravedis.org
http://www.wikimoneda.com (Wikimoneda)
11
10
Perteneciente a la Pragmática del 14 de diciembre de
1566, portando en el anverso el anagrama coronado del
monarca portando marcas de ceca y marcas de
ensayadores a ambos lados. Y en el reverso un castillo de
tres torres con marcas de ceca y marcas de ensayador
dependiendo de cada ceca.
84
Se conoce un ejemplar de ceca Valladolid del que no
se dispone de fotografía ni otros datos como el año de
acuñación, tan sólo que perteneció a la Col·leció Toni
Sendra. Y como primicia se puede aventurar que en el nº
5 de la Revista OMNI, se presentará, de la mano de
Xavier Sanahuja, otra pieza de esta misma serie de otra
ceca inédita.
Monnaies médiévales et modernes
OMNI N°4 – 02/2012
UN EJEMPLO DE FUENTE DOCUMENTAL RESPECTO
AL RESELLO DE 1641
Carlos Alajarín Cascales
Con el presente artículo pretendemos realzar la importancia del estudio de documentos antiguos
como fuente fundamental de la ciencia numismática y la importancia que tienen los archivos
históricos de nuestro país, incluidos los más pequeños y desconocidos, a tal fin. Queremos
presentar, como ejemplo de nuestra afirmación, un documento fechado el catorce de mayo de 1641
que nos permite comprender como se cumplió con la orden de la Real Pragmática de once de
Febrero de 1641 de resellar las piezas de cobre en un ámbito rural lejano de cualquier ceca.
L
as fuentes de la numismática entendida
como ciencia son dos: La moneda, en si
misma (y esto implica el estudio de los
motivos y leyendas de la moneda, su patrón
ponderal; su composición metálica –
metalografía-, su adscripción arqueológica, etc)
y la documental.
Esta última es una de las fuentes más
importantes y al tiempo menos valorada y
conocida por los profesionales de la
investigación numismática; si bien dicha
tendencia empieza a cambiar merced al cuidado
estudio documental llevado a cabo por diversos
estudiosos actuales1.
En el presente artículo queremos dar a conocer
un documento relacionado con nuestra historia
monetaria; entendiendo su importancia
documental en el sentido que nos permite
asomarnos a la realidad histórica y monetaria
de nuestro país; y como ejemplo del fruto que
este tipo de investigación puede dar de si, ahora
y en el futuro no solo en grandes archivos
históricos sino también en pequeños archivos
locales, los cuales también contienen
información relevante para esta ciencia.
(Murcia), sito en el palacio renacentista “El
Molinico” de dicha localidad y fechado el 14 de
Mayo de 1641.
Hagamos un poco de historia. El siglo XVII,
conocido como el “Siglo de Oro Espaðol” fue
realmente duro en cuanto a lo que a la
economía nacional se refiere: Guerras, quiebras
económicas etc, que se vieron plasmados en
unos los más famosos y conocidos (que no
suficientemente
apreciados)
aspectos
numismáticos de nuestra historia: el Resello.
Figura 1. 8 Maravedíes de Felipe III (Burgos,
1603). No porta resellos
Catálogos: Calicó 614; Cayón 4338
Se trata de un documento recientemente
descubierto por el investigador D. Luís Ludeña
López2 en el Archivo Municipal de Calasparra
1
Véanse, como ejemplo, la obras de Antonio Roma
“Emisiones monetarias leonesas y castellanas de la Edad
Media. Organizaciñn, economía, tipos y fuentes”;
“Moneda y sistemas monetarios en Castilla y Leñn
durante la Edad Media (1087-1366)” entre otros títulos.
2
A quien agradecemos, sinceramente, su amabilidad y
generosidad al ofrecernos esta información.
Figura 2. 8 Maravedíes de Felipe III ó IV
(1602-1626) con resello VIII de 1641, ceca
de Cuenca
Colección particular de Daniel Plaza Blázquez
Monedas medievales y modernas
85
OMNI N°4 – 02/2012
Fueron varios los momentos en los que la
Corona recurrió a esta curiosa forma de
recaudación3 siendo uno de ellos -precisamente
el más prolífico- el referido al año 1641 y cuyo
motivo fue el de financiar las guerras en
Portugal y Cataluña.
La Real Pragmática de 11 once de febrero de
ese año ordenaba resellar las piezas devaluadas
en 1628 a fin de devolverlas a sus valores
originales. Así las viejas piezas de ocho
maravedíes devaluadas en el citado 1628 a su
mitad, volvían merced a esta Real Pragmática a
su valor original de ocho maravedíes. Además
se ordenaba que los poseedores de las monedas
acudiesen a la ceca más cercana4 y en un plazo
máximo de dos meses a contar desde esa fecha
a fin de proceder al resellado de las mismas. Y
aquí entra en juego nuestro documento, el cual
muestra como se cumplió por parte del concejo
local con la orden del rey. El documento reza
así:
vecinos desta Villa y por el otorgamiento pude
dar fe e conozco lo firmo con un testigo por que
dixo no saber.- enmendado: qº-Vale.- Leandro
Gonzalez.- Ante mi: Pedro de Ortega.DERECHOS:
UN
REAL.Ortega.Rubricado.”
De la lectura de dicho documento podemos
extraer una muy interesante información. Para
empezar estamos ante una carta de pago en al
que el arriero de Cehegín Pedro Guillén declara
haber recibido una cantidad (697 reales) por
dos viajes a Cuenca para llevar la moneda de
cobre a resellar, dando así cumplimento a la
Real pragmática que daba Felipe IV el once de
febrero del mismo año.
En este sentido, la fecha del documento nos
permite suponer que ambos viajes se llevaron a
cabo dentro de los plazos que indicaba la Real
Pragmatica, esto es, dos meses a contar desde la
publicación de la misma.
“…En la villa de Calasparra en catorce días
del mes de Mayo de mil seiscientos y cuarenta y
un año. Ante mí el escribano público pareció
presente Pedro Guillén, vecino de la villa de
Çeexin (Cehegín) estante al presente en ésta,
arriero y confesó aber reçibido y cobrado
realmente y con efecto del Conçejo justicia y
regimiento de esta dcha. Villa seiscientos
noventa y siete reales por el trabaxo de dos
biaxes que a fecho a la cuidad de Quenca
(Cuenca) a llebar la moneda que su Magd.
mandó para resellar y por los dichos viaxes
recibo dicha cantidad en la manera siguiente:
Quinientos y sesenta y tres reales que recibo
desta villa y dosçientos y treinta y cuatro reales
por orden de Su Majestad recibió de que se dio
por contento a su voluntad y porque la paga de
presente no parece, renunció alas Leyes de
Entrega, prueba y paga enumerata pecunia
como en ella se contiene y se obligó ser cierta
su entrega y paga y otorgó carta de pago en
forma siendo testigos Juan Fernandez Orozco,
Mateo Perez Marín y Leandro Gonzalez,
Es el concejo de Calasparra (a la sazón, villa
bajo jurisdicción de la Orden Hospitalaria de
San Juan de Jerusalén) quien paga parte de
dicha cantidad, y la otra pagadera en Cuenca.
Las monedas objetos de este documento, ¿son
monedas perteneciente al Concejo, o un envió
comunal de toda la localidad?
Al respecto nos remitimos a nuestro articulo “los
resellos” que puede ser consultado en la secciñn de
www.identificacionartículos
de
la
Web
numismatica.com (FORO OMNI).
4
Las Cecas encargadas de llevar a cabo este nuevo
resellado fueron Madrid, Sevilla, Trujillo, Granada,
Burgos, Coruña, Toledo, Valladolid, Segovia y Cuenca.
Sería interesante leer el documento de poder
otorgado por el Concejo a favor de su
representante ante la ceca para tramitar dicho
resellado. Esta persona no fue el arriero, quien
no sabe firmar. Por lo tanto tenemos a nuestro
arriero acompañado por un apoderado del
concejo, seguramente perteneciente al mismo.
3
86
Figura 3. Fachada principal del Archivo
Municipal de Calasparra “El Molinico”
Monnaies médiévales et modernes
OMNI N°4 – 02/2012
Y tratándose de una carga tan especial como
son las monedas, es de suponer que además
existiría una escolta militar que asegure el buen
término de ambos viajes, en los que fueron una
cantidad de monedas, y volvieron la mitad.
siglos vista, hace las delicias de
investigadores y aficionados modernos.
los
Llama la atención que la ceca elegida para el
resellado fuera la de Cuenca. La ciudad de
Granada, también ceca con capacidad para
efectuar el resello, quedaba más cerca. Pero una
vez más nos topamos con la realidad evidente
que pese a no aparecer escrita en un documento
era bien conocida por todos: El trayecto desde
Calasparra hasta Granada era dificultoso desde
el punto de vista geográfico (no así en el caso
de Cuenca) y por lo demás poco seguro a causa
de los bandoleros. La elección de Cuenca debió
resultar natural y lógica en aquellos días.
Pero por encima de toda la información que
podemos extraer de dicho documento, lo
realmente llamativo es saber que incluso en
archivo local podemos encontrar información
directa que atañe a esta nuestra ciencia, la
numismática; y que en cualquier lugar puede
encontrarse la información que desvele tal o
cual enigma histñrico…o nos permita saber de
primera mano como se ejecutó una orden que
tanto afecto a aquella gente; y que a casi cuatro
Figura 4. Reproducción del documento
original de fecha 14 de mayo de 1641
Dedicado a Luís Ludeña, paciente investigador, sin quien nada de esto hubiera sido posible.
Gracias por todo, colega.
BIBLIOGRAFIA
AMC (Archivo Municipal de Calasparra) - Protocolos Notariales del escribano Pedro de Ortega.
Caja 20; Libro 1-A; folio 45.
CALICÓ X. (2008). Numismática Española: Catalogo de todas las monedas emitidas desde los
Reyes Católicos hasta Juan Carlos I, 1474-2001. Aureo & Calicó. Barcelona.
CAYÓN A., C., J. (2005). Las monedas españolas: del Tremis al Euro. Del 411 a nuestros días.
Madrid.
CENTENO YÁÑEZ J. (2006). Las monedas reselladas de Felipe III y Felipe IV (1603-1659)
estudio y catalogación. Córdoba.
GIL FARRÉS O. (1976). Historia de la moneda española. Madrid.
WEBOGRAFIA
www.identificacion-numismatica.com
http://www.identificacion-numismatica.com/resellos-h22.htm
Monedas medievales y modernas
87
OMNI N°4 – 02/2012
EL RESELLO DE MAURA, UNA ESPAÑA DIVIDIDA
Alex Lascano
Con este artículo voy a hacer un escueto análisis sobre las causas sociales y políticas que
propiciaron una división ideológica en la España de principios del siglo XX, que acabó
escindiendo la opinión pública en dos facciones: partidarios y detractores de Antonio Maura. Cada
parte usaba sus medios propagandísticos para publicitar sus ideales, sus detractores encontraron
en las monedas una manera inmejorable de difundir su mensaje.
E
l resellado de monedas en contra de la
política de Maura se empieza a hacer
efectivo a mediados de 1909 hasta su
cese. Esto sucede durante su segunda etapa
como Presidente del Gobierno de España (la
primera fue entre 1903 y 1904). Antonio Maura
lideraba el ala conservadora del Gobierno y en
su contra tenía al Partido Liberal, muy crítico
éste sobre todo con la política colonialista que
se estaba desarrollando en el Rif norteafricano.
La pérdida de Cuba, Puerto Rico y Filipinas a
penas se había superado y las pretensiones de
expansión en Marruecos eran una prioridad
para el gabinete de Maura y una excelente
causa para la oposición. Durante el trascurso
del verano de 1909 unos obreros que trabajaban
en la construcción de un puente del ferrocarril
que transportará el mineral extraído de las
montañas rifeñas a Melilla, es atacado por las
cabilas locales, provocando varios muertos
entre los trabajadores. Para asegurar la
continuidad de los trabajos sin incidentes, se
movilizan tropas reservistas de las quintas de
1903 y 1904 de regimientos de Madrid y
Barcelona, asunto que causa agitación en las
masas, aumentadas por la existencia de la
“redención”1, lo que hacía que el descontento
de las clases más desfavorecidas fuera
creciendo.
Resello „MAURA NO‟ sobre moneda de 10
Céntimos del Gobierno Provisional
1
Se podía comprar la excepción de hacer el servicio
militar pagando 6.000 reales, algo que solo los más
pudientes podían hacer.
88
A finales del mes de Julio empiezan a llegar a
la península las noticias de las grandes pérdidas
de vidas ocasionadas por la emboscada
acaecida en el Barranco del Lobo, situado en la
ladera del Gurugú, monte cercano a Melilla.
153 muertos y casi 600 heridos, esas pérdidas
acaban corriendo como la pólvora y se
empiezan a producir disturbios. Lo que
comienza siendo una Huelga General en
Cataluña, se convierte por el descontento de las
clases obreras en una sucesión de disturbios y
quema de iglesias que dura tres días. Para
sofocar los altercados, se emplea al ejército,
que al principio se mantiene al margen y
después se tiene que emplear a fondo.
Resello „MAURA NO‟ sobre moneda de 10
Céntimos de Alfonso XII
Maura ordena detenciones masivas como
medidas de represión, que se traducen en
destierros, cadenas perpetúas y 5 condenas a
muerte bastante arbitrarias. La mecha estaba
encendida, el descontento de una parte de la
población era latente y se transcribió en el lema
<<¡Maura, no!>>, esgrimido por los detractores
y del <<¡Maura, si!>> por sus partidarios,
quedando dividida la opinión pública en dos
facciones. La maquinaria propagandística, tanto
a favor como en contra, se puso en marcha con
carteles pegados por la paredes, periódicos,
insignias, octavillas y (lo que más nos interesa)
grabado en las monedas.
Monnaies médiévales et modernes
OMNI N°4 – 02/2012
Los
elementos
propagandísticos
que
encontramos plasmados en las monedas están
referidos en su totalidad por los contrarios a
Maura, no he podido ver ninguno a favor
todavía. Las monedas en las que se encuentran
los resellos son principalmente monedas de
cinco y diez céntimos acuñadas a nombre del
Gobierno Provisional (1870) y de Alfonso XII
(1977, 1878 y 1879), aunque también se
encuentran en las últimas monedas de cobre de
Isabel II, pero éstas son muy escasas.
Los resellos que encontramos se pueden
clasificar principalmente en dos grupos -más
adelante veremos algunas excepciones-, el
resello „MAURA NO‟ con un punzñn
preparado a tal efecto y el „MAURA NO‟
hecho con punzones independientes. El punzón
preparado consiste en un punzón matriz con la
inscripciñn „MAURA NO‟, ya sea en con el
motivo en una línea o partido en dos, con el
MAURA arriba y el NO situado debajo.
letras que forman la expresiñn „MAURA NO‟,
los cuales se estampaban uno por uno hasta
completar la consigna.
Resello „MAURA NO‟, una sola línea sobre
moneda de 10 Céntimos de Alfonso XII
Los punzones son de tamaño mediano y
alineados a mano alzada, pero de manera
armónica, no como ocurre en otros resellos
políticos posteriores y usan una tipología más
recargada que los resellos del punzón
preparado. Los tipos de punzones que se usan
para esta contramarca son parecidos pero no
iguales, lo que hace difícil encontrar dos
monedas manufacturadas por los mismos tipos
de punzones. Se encuentran sobre monedas de
diez y cinco céntimos de cobre.
Resello „MAURA NO‟ sobre moneda de 5
Céntimos del Gobierno Provisional
El punzón preparado se aplicaba dando un solo
golpe y quedaba estampado en la moneda de
una vez. El punzón preparado en dos líneas
mide 14x10 milímetros y en casi todas las
monedas estudiadas el punzón proviene del
mismo troquel, solo he podido encontrar un
punzón de tamaño 18x14 milímetros y está muy
desgastado por el uso, encontrándose el resello
en ambas caras, cosa que no ocurre con ningún
otro tipo de los resellos estudiados. El resello
de una sola línea es más escaso que el anterior,
siendo las letras un poco más alargadas y
midiendo 21x7 milímetros. En los casos
anteriormente citados las letras que forman el
punzón son finas y estilizadas, coincidiendo
con la tipología típica de la época.
Resello „MAURA NO‟, con punzones
independientes sobre moneda de 5 Céntimos
del Gobierno Provisional
Aunque infrecuente, pero es posible encontrar
otros motivos contrarios al Presidente del
Gobierno escritos en las monedas, como es el
caso del siguiente „grafiti‟, que reza el lema
„MAURA JAMÁS‟ escrito a buril a mano
alzada, debiendo hacerlo alguien letrado por el
acento de la segunda A de jamás, algo curioso
en la España de principios del siglo XX con una
tasa de analfabetismo del 50%.
El
resello
formado
por
punzones
independientes, consta de punzones con las
Monedas medievales y modernas
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OMNI N°4 – 02/2012
Resello „MAURA NO‟, sobre moneda de 2 ½
Céntimos de Isabel II, acuñada en 1868
Resello „MAURA NO‟, con punzones
independientes sobre moneda de 10
Céntimos de Alfonso XII
Esta es una pequeña muestra de la propaganda
contraria a Maura trasmitida a través de las
monedas, que de mano en mano iba divulgando
su mensaje entre la población, pero el estudio
sigue abierto, porque no es de extrañar que con
el tiempo sigan saliendo resellos y variantes
nuevas que se irán recopilando para futuros
trabajos.
Grafiti „MAURA JAMÁS‟, escrito a mano alzada
en moneda de 10 Céntimos de Alfonso XII
BIBLIOGRAFÍA
MONTANER AMORÓS J. (1999). Los resellos. Las monedas españolas reselladas en el mundo.
Expo Galería. Valencia.
ROBLES MUÑOZ C. (1995). Maura, un político liberal. CSIC. Madrid.
ROMERO MAURA J., PEREA YÉBENES S., MAURA M. (2007). Así cayó Alfonso XIII. De una
dictadura a otra. Marcial Pons Historia. Madrid.
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Monnaies médiévales et modernes
OMNI N°4 – 02/2012
Le coin littéraire
Rincón literario
Miscelánea p. 92
Óliver A. Riera
Rincón literario
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OMNI N°4 – 02/2012
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coleccionamos un tiempo monedas y billetes del mundo viajamos decíamos que algún
[día ese hobby nos haría ricos reíamos
desnudos con la estrella polar sobre nuestros ojos como animales prehistóricos bajo
[la luz halógena
de las glaciaciones
me gusta cuando te aceleras casi hasta el orgasmo imaginando la economía es un arco[iris razonado
la estrella de belén actualizada pero toda luz da a una ruina un tiempo luego
[evoluciona
el oro era amarillo pero el dinero es un lagarto tropical el color del dinero fue una
[trompeta después de Hiroshima
creo haber oído que manhattan se compró por 24 dólares a los indios y eso los honra de
[algún modo
porque la especulación era un rito tan extraño a los suyos como el tótem de sus danzas
[para ellos
llueve allá abajo en el planeta desde la nave en órbita unas borrascas simulan la noche
[estrellada de van gogh
o el grito de munch te escucho decir telepáticamente a través de los siglos hoy he
[llorado
el colonialismo enfrenta estados de conciencia órdenes del mundo alternativos que
son fosilizados en la historia para construir historias migraciones
[el pueblo inuit
[al fondo
nombra las evoluciones de la luz en la nieve
92
Le coin poétique
OMNI N°4 – 02/2012
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viejo real de a ocho hijodeputa te has montado en el dólar bromea el historiador frente
[a un gin-tónic
desde los ojos de paris hilton buda habla esperanto con los fieles de occidente hay
[restos de cocaína
en dos de las tres partes de los billetes del mundo el resto se blanquea de muchos
[colores distintas
efigies hombres muertos casi siempre ilustres menesterosos como cervantes llevan al
[frente presidentes
arquitecturas alegorías de dios
una bala que se estrella, frenada en seco, se achata tiene forma de moneda papel
[metálico
papel-de-curso-legal-papel-timbrado-papel-con-pautas-de-conducta-papel-del-culo- eres
[la silla musical de nuestro tiempo
la grande idée la esclavitud mejorada capital simbólico de una conciencia subyugada
[parábola de su imagen
en los hombres $ ¥ € sujeto barrado ab aeterno bajo las paralelas del redil y la
[estabilidad investido
honoris causa por las universidades entre nosotros la política es un sillón de atrezzo
[aristocrático
words words worms
allí quedaron las Columnas de Hércules non plus ultra sacro Imperio Sucesor delira
[la historiadora junto al gin-tónic
comprometida asegura la NASA que el futuro está sublimado en los satélites militares y
[los motores de la Fórmula 1
In God We Trust
dicen dinero que te acabas pero no es verdad lo dicen sólo para hacer más dinero es sólo
[un videoclip de coca-cola
[inaugurando el verano en el gueto de otra canción
Óliver A. Riera.
Rincón literario
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OMNI N°4 – 02/2012
OMNI
Achevé d’imprimer en février 2012
ISSN 2104-8363
Dépôt légal : février 2012
Imprimé en France et Espagne
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