AEET
ASOCIACIÓN ESPAÑOLA
DE ECOLOGÍA TERRESTRE
Ecosistemas 27(1): 96-104 [Enero-Abril 2018]
Doi.: 10.7818/ECOS.1435
Artículo publicado en Open Access bajo los términos
de Creative Commons attribution Non Comercial License 3.0.
REVISIONES
ecosistemas
REVISTA CIENTÍFICA DE ECOLOGÍA Y MEDIO AMBIENTE
ISSN 1697-2473 / Open access
disponible en www.revistaecosistemas.net
La integración del conocimiento sobre la Cordillera Cantábrica:
hacia un observatorio inter-autonómico del cambio global
J. Barquín1,*, J.M. Álvarez-Martínez1, B. Jiménez-Alfaro2,3, D.l García4, D. Vieites5, E. Serrano6, A. González-Díez7, S. Tejón8,
E. de Luis Calabuig9, Á. Taboada9, F.J. Purroy9, M. Del Jesus1, J. Naves10, A. Fernández-Gil10, Á. Serdio11, A. Javier Lucio11,
R. Suárez12, J. Araujo13
(1) Instituto de Hidráulica Ambiental, Universidad de Cantabria, Av. Isabel Torres, 15, Parque Científico y Tecnológico de Cantabria, 39011 Santander, España.
(2) German Centre for Integrative Biodiversity Research (iDiv) Halle-Jena-Leipzig, Deutscher Platz 5e, 04103 Leipzig, Alemania.
(3) Geobotany and Botanical Garden, Institute of Biology, Martin Luther University, Halle-Wittenberg, Am Kirchtor 1, 06108 Halle (Saale), Alemania.
(4) Departamento de Biología de Organismos y Sistemas y Unidad Mixta de Investigación en Biodiversidad (UMIB, CSIC-Uo-PA), Universidad de Oviedo,
C/ Catedrático Rodrigo Uría s/n, 33071 Oviedo, España.
(5) Museo Nacional de Ciencias Naturales, CSIC, C/ José Gutiérrez Abascal 2, 28006 Madrid, España.
(6) Departamento de Geografía, Universidad de Valladolid, Pº del Prado de la Magdalena s/n, 47011 Valladolid, España.
(7) Departamento de Ciencias de la Tierra y Física de la Materia Condensada, Universidad de Cantabria, Av. los Castros s/n, 39005 Santander, España.
(8) Asociación Red Cambera, Apdo. Correos 80, 39500 Cabezón de la Sal, España.
(9) Departamento de Biodiversidad y Gestión Ambiental, Universidad de León, Campus de Vegazana s/n, 24071 León, España.
(10) Estación Biológica de Doñana, CSIC, C/ Américo Vespucio s/n, Isla de la Cartuja, 41092 Sevilla, España.
(11) Dirección General del Medio Natural, Gobierno de Cantabria, Calle Albert Einstein 2, 39011 Santander, España.
(12) Parque Nacional de los Picos de Europa, Calle Arquitecto Reguera 13, 33004 Oviedo, España.
(13) Calle Fuente 36, 28944 Fuenlabrada, Madrid, España.
* Autor de correspondencia: J. Barquín [barquinj@unican.es]
> Recibido el 07 de abril de 2017 - Aceptado el 20 de febrero de 2018
Barquín, J., Álvarez-Martínez, J.M., Jiménez-Alfaro, B., García, D., Vieites, D., Serrano, E., González-Díez, A., Tejón, S., de Luis Calabuig,
E., Taboada, Á., Purroy, F.J., Del Jesus, M., Naves, J., Fernández-Gil, Á., Serdio, Á., Javier Lucio, A., Suárez, R., Araujo, J. 2018. La integración
del conocimiento sobre la Cordillera Cantábrica: hacia un observatorio inter-autonómico del cambio global. Ecosistemas 27(1): 96-104.
Doi.: 10.7818/ECOS.1422
La Cordillera Cantábrica (CC) presenta una serie de singularidades que le convierten en un excelente enclave para el seguimiento de los efectos
del cambio global. Este estudio analiza la necesidad de generar un observatorio inter-autonómico del cambio global, que permitiría integrar el conocimiento actual sobre estas montañas y determinar las prioridades en la generación de nuevo conocimiento. Para cumplir este objetivo, se presentan dos aproximaciones complementarias. La primera consiste en la revisión de la literatura científica publicada sobre la CC y su comparación
con otros enclaves geográficos de la Península Ibérica. La segunda consiste en la síntesis de información de un seminario titulado “La CC como
Centinela de los Efectos del Cambio Global”, celebrado en Santander en agosto de 2015. El análisis bibliográfico muestra que el número de publicaciones científicas sobre la CC es similar al de otros enclaves geográficos de la Península Ibérica, pero con menor riqueza de disciplinas. La producción científica está dominada por los centros de investigación más próximos y tiene una alta participación internacional. Las conclusiones del
seminario evidencian que este sistema es un candidato ideal para el seguimiento de los efectos del cambio global sobre multitud de elementos biofísicos. Se considera que la generación de un seminario permanente, junto con la consolidación de las redes de seguimiento actuales, la coordinación
de nuevos trabajos, y la mejora de la comunicación entre administraciones y comunidad científico-técnica son elementos esenciales en la futura generación de un observatorio del cambio global en la CC.
Palabras clave: biodiversidad; conservación de la naturaleza; espacios naturales; gestión integral del territorio; montañas; seguimiento ambiental
Barquín, J., Álvarez-Martínez, J.M., Jiménez-Alfaro, B., García, D., Vieites, D., Serrano, E., González-Díez, A., Tejón, S., de Luis Calabuig,
E., Taboada, Á., Purroy, F.J., Del Jesus, M., Naves, J., Fernández-Gil, Á., Serdio, Á., Javier Lucio, A., Suárez, R., Araujo, J. 2018. The Integration of knowledge about the Cantabrian Cordillera: towards an inter-regional observatory of global change. Ecosistemas 27(1): 96-104.
Doi.: 10.7818/ECOS.1422
The Cordillera Cantábrica (CC) presents a series of singularities that make this area an excellent place for monitoring the effects of global change.
This study analyses the need to generate an interregional observatory of global change, which would integrate current knowledge about these mountains and help setting priorities in the generation of new knowledge. To achieve this goal, two complementary approaches are presented. The first is
the review of the scientific literature published about the CC and its comparison with other mountain systems in the Iberian Peninsula. The second
is the synthesis of information from a seminar entitled "The CC as a Sentinel of the Effects of Global Change" held in Santander in August 2015. The
literature shows that the number of scientific publications about the CC is similar to other mountain systems in the Iberian Peninsula, but with a lower
diversity of disciplines. Scientific production is dominated by the nearest research centres and has a large international participation. The conclusions
of the seminar show that this system is an ideal candidate for monitoring the effects of global change on a multitude of biophysical elements. We
consider that the generation of a permanent seminar, along with the consolidation of the actual monitoring networks, and the coordination of new
studies and the improvement of communication between administrations and the scientific and technical communities are essential elements for the
future generation of an observatory of global change in the CC.
Key words: biodiversity; conservation of nature; natural spaces; integral management of the territory; mountains; environmental monitoring
© 2018 Los Autores. Editado por la AEET. [Ecosistemas no se hace responsable del uso indebido de material sujeto a derecho de autor]
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Introducción
Las cordilleras montañosas ocupan casi un cuarto de la superficie
terrestre del planeta y se extienden por toda su superficie (Rodríguez-Rodríguez et al. 2011). Estos sistemas cumplen funciones elementales en los procesos que sustentan el funcionamiento de la
biosfera como la regulación del clima, el ciclo del agua y los ciclos
biogeoquímicos (Grêt-Regamey et al. 2012). Las montañas albergan
una gran diversidad de especies y hábitats en un espacio reducido
debido al importante gradiente climático en altitud (precipitación, temperatura, insolación, etc.), a la insularidad geográfica, a la abrupta
topografía y a las restricciones impuestas a la actividad humana
desde tiempos históricos (MacDonald et al. 2000). Los sistemas
montañosos son, por tanto, hogar de multitud de endemismos y refugio de especies amenazadas, constituyendo hoy en día el 32% de
las zonas protegidas a nivel mundial (Rodríguez-Rodríguez et al.
2011). Las montañas constituyen además un importante reservorio
de diversidad cultural de los diferentes pueblos del planeta (Debarbieux y Price 2012), albergando formas de vida tradicionales que se
han adaptado a las condiciones dominantes en cada región. En concreto, las montañas acogen entre el 12-20% de la población mundial
y proveen multitud de servicios ecosistémicos (agua, comida, madera, etc..) a un número importante de poblaciones situadas en las
zonas de llanura y costa que las rodean (Debarbieux y Price 2012).
Sin embargo, el cambio global, que incorpora los efectos del cambio
climático, la alteración de usos del suelo y los modelos productivos,
el aporte excesivo de nutrientes, y la fragmentación del paisaje, entre
otros factores, amenazan seriamente la biodiversidad y el funcionamiento de los ecosistemas de montaña a nivel global y, por tanto, la
provisión de los servicios ecosistémicos que sustentan.
En la península ibérica, existen cinco grandes sistemas montañosos (Pirineos, Cordillera Cantábrica, Sistema Ibérico, Sistema
Central y Cordillera Bética) que coinciden con el límite de distribución de multitud de especies de flora y fauna del continente europeo,
lo que los convierte en refugio de una fracción muy importante de la
biodiversidad europea (EEA 2010). Del mismo modo, estos sistemas montañosos concentran una parte importante del sector productivo forestal español (MMA 2002) y son la principal fuente de
agua que alimenta a más de 1200 presas del país (de Cea y Sánchez 2007) dedicadas a la producción hidroeléctrica, actividades
agropecuarias, industriales y servicios. Entender los efectos del
cambio global sobre estos sistemas montañosos resulta, por tanto,
fundamental para definir estrategias de adaptación que permitan
combinar la conservación de la biodiversidad con la provisión de
servicios ecosistémicos clave para el desarrollo de la sociedad española. En este marco cobran gran importancia los “observatorios”
y las “redes de seguimiento” del cambio global, herramientas orientadas a cuantificar estos efectos y coordinar los esfuerzos de diferentes grupos de interés hacia una estrategia común de avance del
conocimiento y aplicación de los resultados obtenidos (e.g., Zamora
2010). De hecho en España hay una serie de iniciativas que forman
parte de la red española de investigación y seguimiento ecológico
a largo plazo (LTER-España; Díaz-Delgado 2010). En algunas de
estas zonas se han constituido, además, observatorios del cambio
global que amplían los programas de seguimiento, como es el caso
de Sierra Nevada (Aspizua et al. 2010) o Doñana (Díaz-Delgado
2010). Otras iniciativas como el Observatorio Pirenaico del Cambio
Climático se encarga de compilar la información existente a ambos
lados de los Pirineos, así como de generar estudios para valorar la
vulnerabilidad y establecer líneas de acción para la adaptación al
cambio climático (OPCC 2010). Existen de este modo diversas iniciativas para el seguimiento de algunos de los sistemas de montañas más importantes de la península ibérica.
En el marco actual de cambio global, es necesario disponer de
información de calidad a escala local y regional que permita desarrollar medidas apropiadas y planes de adaptación para minimizar
sus efectos. La creación de un observatorio de Cambio Global en
la Cordillera Cantábrica permitiría avanzar en este sentido. En este
trabajo de revisión queremos repasar el conocimiento generado por
investigadores, gestores, y sociedad civil, para identificar las futuras
Barquín et al. 2018
prioridades de investigación. Para ello el presente estudio se centra
en (1) una comparación de la literatura científica publicada hasta
la actualidad sobre la Cordillera Cantábrica con otros enclaves geográficos españoles, (2) la síntesis de la información compartida
por 18 expertos que participaron en un seminario sobre la Cordillera
Cantábrica como centinela del cambio global en agosto de 2015,
(3) la identificación de los pasos a seguir para la generación de un
observatorio inter-autonómico del cambio global.
El caso particular de la Cordillera Cantábrica
La Cordillera Cantábrica es un sistema montañoso localizado en
el norte de España que discurre paralelo al mar Cantábrico con una
longitud de unos 480 kilómetros (dirección oeste-este; Fig. 1). Comprende desde las Montañas galaico leonesas y Ancares, al oeste,
hasta la sierra de Aralar, en contacto con Los Pirineos, al este
(Alonso et al. 2007). La Cordillera Cantábrica se formó principalmente por dos grandes orogenias, la hercínica y la alpina, siendo los
procesos exógenos (p.e. erosión fluvial y deslizamientos de ladera)
los que han ido modelando su relieve en una segunda fase (Alonso
et al. 2007). Es necesario destacar que en las porciones más elevadas de la Cordillera Cantábrica (Picos de Europa, Peña Prieta) así
como en montañas más bajas (Valnera y Aitzgorri) existen además
elementos significativos de la criosfera y sus geosistemas asociados,
con la presencia de heleros, masas de hielo glaciar heredadas de la
Pequeña Edad del Hielo, cuevas heladas y suelos helados estacionales (Pisabarro et al. 2017). Además la acción fluvial y la dinámica
de laderas conforman geosistemas muy activos y cambiantes
(González-Dı́ez et al. 1999) que junto al escalonamiento de los procesos en altitud, configuran una elevada diversidad de ambientes
contribuyendo a una notable geodiversidad. Desde el punto de vista
biogeográfico, en la Cordillera Cantábrica convergen el límite de las
regiones Atlántica y Mediterránea. Además, también comprende ambientes alpinos y se subdivide en numerosas provincias biogeográficas y pisos bioclimáticos (Rivas-Martínez 1987).
La Cordillera supone la frontera norte/sur e incluso este/oeste
en la distribución de muchas especies y comunidades de flora y
fauna (p.e., Pleguezuelos et al. 2002; Martí y del Moral 2003; Palomo et al. 2007). Alberga una de las riquezas florísticas más importantes de las montañas de la Comunidad Europea y tiene un
elevado porcentaje de endemicidad (Jiménez-Alfaro 2009). Este
sistema montañoso concentra además una de las mayores riquezas de vertebrados de la península ibérica. Si los valores peninsulares de riqueza de anfibios, reptiles, aves nidificantes y mamíferos
son de 22, 35, 263 y 67 especies, respectivamente, en los montes
cantábricos residen 18 anfibios, 22 reptiles, 190 aves reproductoras
y 67 mamíferos (Pleguezuelos et al. 2002; Martí y del Moral 2003;
Palomo et al. 2007).
La diversidad de paisajes de la Cordillera Cantábrica es también
muy notable. En este enclave existe un vínculo muy estrecho entre
las poblaciones humanas, los usos del suelo y las especies de flora
y fauna. De hecho, los patrones espacio-temporales del paisaje y
de la fauna y flora silvestres de la Cordillera Cantábrica están íntimamente ligados a la presencia del ser humano en la zona desde
tiempos neolíticos (Fernández et al. 2013). Así, existen formaciones
paisajísticas singulares en la Cordillera provenientes de diferentes
tipos de usos del territorio, como las generadas por los efectos de
la trashumancia (Fernández et al. 2013), del uso del fuego para generación de pastos (González-Pellejero et al. 2014) o por el trasmoche de diferentes especies de árboles para leña y forraje
(Aragón 2009). Este vínculo entre uso del territorio y dinámicas del
paisaje está produciendo actualmente cambios notables en los paisajes de la Cordillera Cantábrica. Por ejemplo, la práctica desaparición de la trashumancia o la reducción de las cabezas de ganado
en algunos pastos de los puertos de montaña están originando importantes cambios en las comunidades vegetales y animales (p.ej.,
Alzaga et al. 2008). Del mismo modo, el cambio climático puede
modificar notablemente la distribución de diferentes especies en
esta zona, dado su marcado carácter de frontera entre zonas biogeográficas y pisos bioclimáticos.
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Ecosistemas 27(1): 96-104
Barquín et al. 2018
Figura 1. Situación de la Cordillera Cantábrica (enmarcada en polígono amarillo) y de los Parques Nacionales continentales de la península ibérica (polígonos verdes) utilizados en la revisión bibliográfica del presente estudio.
Figure 1. Location of the Cantabrian Cordillera (framed in yellow polygon) and of the Continental National Parks in the Iberian Peninsula (green polygons)
used in the bibliographic revision of this study.
La diversidad de especies, hábitats y paisajes culturales de la
Cordillera Cantábrica está actualmente protegida por más de 50
espacios de la Red Natura 2000 que ocupan cerca de unos 10 000
km2, incluyendo el Parque Nacional (en adelante PN) más antiguo
de España (Parque Nacional de los Picos de Europa) y numerosos
espacios naturales protegidos de las 6 Comunidades Autónomas
limítrofes (Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Navarra y Castilla y León). Estos espacios desarrollan planes de uso y gestión
que implementan diferentes actuaciones en función del estado de
conservación de especies, hábitats y procesos ecológicos y geomorfológicos. Tanto la evaluación del estado de conservación de
estos elementos como el seguimiento de la efectividad de las medidas implementadas (i.e. de cara a poder realizar una Gestión
Adaptativa) necesitan ser contrastados y monitorizados a través de
diferentes redes de seguimiento para evaluar su coherencia y eficacia a nivel de enclave geográfico. En este sentido, la vasta diversidad de figuras de protección, entidades administrativas y escalas
de aplicación de los planes de gestión de los diferentes espacios
de la Cordillera supone un reto de coordinación único en las montañas ibéricas. Sin embargo, esta característica podría ser también
utilizada como una ventaja competitiva para atraer fondos de programas autonómicos, nacionales y europeos.
Metodología
en cada uno de estos enclaves geográficos, sino más bien como
una comparación utilizando un mismo motor de búsqueda que permita establecer una línea base sobre el conocimiento científico que
se ha ido generado en estas zonas. Esta revisión se realizó mediante una consulta en la segunda quincena de diciembre de 2015
a la base de datos SCOPUS (utilizando “cordillera cantábrica” or
“cantabrian mountain” para la Cordillera Cantábrica; “aigüestortes”
para el Parque Nacional de Aigüestortes y Lago de San Muricio;
“cabañeros” para el PN Cabañeros; “doñana” para el PN de Doñana; “guadarrama” para el PN de La Sierra de Guadarrama; “monfragüe” para el PN de Monfragüe; “ordesa para el PN de Ordesa y
Monte Perdido; “picos de europa” para el PN de Picos de Europa,
“sierra nevada” excluyendo EEUU, Venezuela y Colombia para el
PN de Sierra Nevada; “daimiel” para el PN de Tablas de Daimiel).
Se escogió esta base de datos ya que es una de las más amplias
en cuanto a recopilación de publicaciones científicas, con un mayor
número de tipos de publicaciones que ISI y con la posibilidad de
realizar revisiones bibliométricas sencillas, lo cual no puede alcanzarse con otros motores de búsqueda como Google Scholar (Yang
y Meho 2006). Para la comparación de la literatura científica publicada en la Cordillera Cantábrica con el resto de Parques Nacionales se utilizó el PN de Picos de Europa, como representación de
un enclave de la Cordillera Cantábrica. En los resultados también
se incluyeron los datos globales para la Cordillera Cantabrica.
Comparación de las publicaciones científicas sobre la Cordillera
Cantábrica
Síntesis del Seminario sobre Cordillera Cantábrica y Cambio
Global
Se ha realizado una revisión de la literatura científica referida a
la Cordillera Cantábrica y se ha comparado con otros sistemas
montañosos de la península ibérica utilizando los Parques Nacionales como representantes de los diferentes enclaves montañosos.
Se ha decidido incluir también en la comparación el Parque Nacional de Doñana como enclave geográfico con el máximo número de
publicaciones registradas en los Parques Nacionales Españoles.
En ningún caso deben tomarse estas comparaciones como un examen exhaustivo de todos los trabajos científico-técnicos realizados
La segunda aproximación se basa en la síntesis de la información que se generó en el seminario titulado “La Cordillera Cantábrica como Centinela de los Efectos del Cambio Global”, que se
celebró en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo en Santander entre el 17 y el 21 de agosto de 2015. Es necesario mencionar que esta síntesis se refiere no pretende ser un estudio
sistemático de los efectos del cambio global sobre la biodiversidad
de la Cordillera Cantábrica, sino que debe considerarse como un
corolario de diferentes ejemplos destacados. En este seminario
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Ecosistemas 27(1): 96-104
participaron 18 expertos que trabajan en la investigación y gestión
de la naturaleza en la Cordillera Cantábrica. El seminario se estructuró en una introducción general, cuatro bloques temáticos, y un
debate de clausura (para más información ver material adicional
en: http://personales.unican.es/barquinj/Info_Adicional_Barquinetal2018_Ecosistemas.pdf). Los bloques temáticos del seminario
fueron el marco físico, las dinámicas del paisaje y la vegetación, la
biodiversidad faunística y la gestión y conservación del medio natural en la Cordillera Cantábrica. Cada día participaron entre tres y
cuatro ponentes con charlas magistrales y con una sesión de más
de dos horas de mesa redonda sobre los temas tratados durante
el día. Los ponentes prepararon, además, entre 4-10 páginas de
síntesis de sus charlas, recogidas finalmente en un único documento (144 páginas) que se entregó a todos los participantes. Tras
la celebración del seminario se preparó un documento de síntesis
que fue validado por todos los ponentes. En el presente trabajo se
resume la información más relevante de este documento, para
cada una de las áreas temáticas.
Resultados
Publicaciones científicas en la Cordillera Cantábrica
Se han encontrado un total de 595 publicaciones científicas
sobre la Cordillera Cantábrica en la base de datos SCOPUS. Las
primeras publicaciones científicas que aparecen en SCOPUS en
la Cordillera Cantábrica corresponden a los años 1964 (1) y 1970
(1), pero no es hasta el año 1978 cuando comienzan a publicarse
entre 3-10 trabajos/año (Fig. 2). A partir de 1990 se publican más
de 10 trabajos/año y a partir de 2005 más de 20 trabajos/año alcanzando un máximo de 48 trabajos/año en 2011. Más del 75%
de la producción científica encontrada en la Cordillera Cantábrica
son artículos en revistas científicas. Los artículos relacionados con
congresos ocupan el segundo lugar y los capítulos de libro el tercero (ver material adicional). El 85% de las publicaciones científicas en la Cordillera Cantábrica se incluyen en las disciplinas
“Ciencias de la Tierra y del Espacio” (41%), “Agricultura y Ciencias
Biológicas” (24%) y “Ciencias Ambientales” (20%). Los estudios
publicados dentro de la disciplina de las “Ciencias Sociales” supo-
Barquín et al. 2018
nen poco más del 5%. En total, en la Cordillera Cantábrica se han
publicado trabajos en un total de 19 disciplinas. Las contribuciones
de autores provienen principalmente de instituciones españolas,
siendo Alemania, Reino Unido y Holanda los siguientes en cuanto
a número de contribuciones. En total en la Cordillera Cantábrica
se han publicado trabajos que recogen la cooperación de instituciones de 39 países. A nivel nacional, las principales instituciones
que han publicado un mayor número de trabajos científicos en la
Cordillera Cantábrica son la Universidad de Oviedo (178), la Universidad de León (50), la Universidad Complutense de Madrid (32),
el CSIC (31), la Universidad de Valladolid (24) y la Universidad de
Cantabria (22).
Tomando el PN de Picos de Europa como referente de la Cordillera Cantábrica, se han encontrado un total de 123 publicaciones
científicas en SCOPUS, lo cual contrasta con las 733 publicaciones
encontradas para el PN Doñana, las 471 del PN Sierra Nevada y
las 280 del PN Sierra de Guadarrama. El resto de Parques Nacionales se encuentran por debajo de los 70 trabajos científicos. La
primera publicación en el PN Picos de Europa es del año 1966
(Fig. 2). En la década de los 80 y 90 se publican por término medio
1-2 trabajos/año, mientras que a partir del año 1998 esta producción llega a los 5 trabajos/año y alcanza un máximo de 12 trabajos/año en el 2015. La producción científica sigue una tendencia
alcista en la mayor parte de Parques Nacionales alcanzando una
mayor producción en los últimos 5 años. Los máximos encontrados
en el PN Picos de Europa están por debajo de los 40 trabajos/año
del PN Doñana o los cerca de 30 trabajos/año del PN Sierra Nevada. La publicación de trabajos científicos en el resto de Parques
Nacionales raramente supera los 5 trabajos/año (Fig. 2).
Los artículos publicados en revistas científicas son el formato
más abundante en el PN Picos de Europa, al igual que en el resto
de Parques Nacionales (Ver material adicional). El resto de publicaciones científicas encontradas se concentran en artículos de congresos, capítulos de libro y revisiones. Para más detalles sobre los
temas tratados y el origen de los trabajos científicos en los Parques
Nacionales analizados consultar el material adicional (http://personales.unican.es/barquinj/Info_Adicional_Barquinetal2018_Ecosistemas.pdf)
Figura 2. Evolución en el número de trabajos científicos publicados en la Cordillera Cantábrica (CCantabrica) y en los Parques Nacionales continentales
de la península ibérica según una búsqueda realizada en el año 2015 en la base de datos SCOPUS.
Figure 2. Evolution in the number of scientific studies published in the Cordillera Cantábrica (CCantabrica) and in the continental National Parks of the
Iberian Peninsula according to a search carried out in the year 2015 in the SCOPUS database.
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Síntesis del seminario sobre Cordillera Cantábrica y Cambio
Global
El seminario sobre la Cordillera Cantábrica y el cambio global
puso de relevancia algunos de los cambios que están aconteciendo en este sistema montañoso debido a diferentes factores y
procesos con escalas temporales muy variadas (Tabla 1). Así,
dentro del marco físico se evidencian cambios importantes en diferentes elementos de la criosfera (p.e. reducción de heleros, número y volumen de hielo en cuevas, o cambios en la innivación)
vinculados a procesos de gran escala como el cambio de clima en
el Cuaternario (Serrano et al. 2013) o a una aceleración del cambio
en el clima en las últimas décadas (Serrano et al. 2011). Del mismo
modo, se ha observado que las tasas de denudación del terreno
en la Cordillera Cantábrica se duplicaron ya en tiempos neolíticos
por la actividad humana (González-Dı́ez et al. 1999), llegando a
incrementarse en varios órdenes de magnitud en los últimos 100
años (González-Díez et al. 2014). La respuesta hidrológica de las
cuencas cantábricas obedece en gran medida al tipo de clima
atlántico templado y depende en gran medida de si existe o no influencia nival, aunque es muy dependiente también de la configuración de la cobertura vegetal que encontramos en sus cuencas
(Belmar et al. 2018).
En cuanto a la evolución del paisaje de la Cordillera Cantábrica
existen varios patrones en función de cómo ha cambiado la actividad económica en las diferentes comarcas. De este modo encontramos zonas que se están re-naturalizando con un importante
avance de las masas forestales debido a un abandono de las actividades agropecuarias tradicionales (Álvarez-Martínez et al.
2014), frente a otras en las que los cambios en las dinámicas de
pastoreo y el uso del fuego están generando una mayor cantidad
de matorral y perdiendo pastos (Carracedo 2015). Estos cambios
están afectando la configuración del paisaje vegetal de forma más
evidente que otros factores con ciclos temporales largos, como el
cambio climático. Los cambios en el régimen de pastoreo y uso de
zonas rurales han influido enormemente en la distribución espacial
de los tipos de vegetación dominantes, así como en la dinámica
poblacional de especies bandera como Aster pyrenaeus (JiménezAlfaro 2014). En relación con el cambio climático, los estudios en
curso aún no disponen de series temporales lo suficientemente
largas para apreciar cambios recientes, si bien se han detectado
síndromes de extinción local en poblaciones relictas que han perdurado en refugios micro-climáticos desde las glaciaciones (Jiménez-Alfaro et al. 2016).
Con relación a los ecosistemas acuáticos de la Cordillera Cantábrica, hay que destacar por su importancia los lagos y lagunas,
las surgencias y fuentes, las turberas y tremedales (Jiménez-Alfaro
y Díaz 2008) y sobre todo los ríos, además de los más de 100 embalses que alimentan estas montañas. Los estudios existentes
sobre estos ecosistemas demuestran que tienen una diversidad
elevada de diatomeas, macroinvertebrados y anfibios, pero faltan
estudios de revisión de muchos hábitats y componentes de la biodiversidad acuática, así como de los efectos del cambio global
sobre estos ecosistemas. Sus principales amenazas en la Cordillera son la pérdida de cobertura vegetal natural en las cuencas y
riberas, las alteraciones hidro-morfológicas por el uso del agua,
así como las barreras transversales y los vertidos (Pozo et al.
1994; Barquín et al. 2011). Las poblaciones de especies bandera
de la conservación de los ríos, como el salmón atlántico (Salmo
salar), presentan un importante declive en los últimos 100 años y
se han detectado cambios notables en la estructura y composición
de sus poblaciones en casi todos los ríos de la Cordillera Cantábrica (García de Leániz et al. 2002; Barquín et al. 2012).
La gran diversidad de fauna de la Cordillera Cantábrica está influenciada por una combinación de varios factores que interactúan
entre sí. Por ejemplo, la Cordillera Cantábrica es el punto con
mayor diversidad de aves forestales nidificantes de la península
ibérica, debido a un efecto combinado de gradientes latitudinales,
límites entre zonas biogeográficas, un “efecto península” y los cambios estacionales que tienen lugar en este sistema (Ramírez y Te-
Barquín et al. 2018
llería 2003; Santos et al. 2010). Además, el desarrollo de diferentes
actividades antrópicas ha generado una serie de cambios en los
paisajes cantábricos desde tiempos neolíticos que repercuten en
el estado de las poblaciones de la fauna cantábrica (Fernández et
al. 2013). Por ejemplo, es interesante mencionar las dinámicas que
se establecen entre aves forestales y el propio bosque. Así, la fragmentación del bosque produce una disminución en el número de
especies de aves forestales en la Cordillera Cantábrica, mientras
que la abundancia y diversidad de aves frugívoras influye notablemente en la tasa de dispersión de semillas de árboles y arbustos
(Tellería et al. 2003; Garcia et al. 2010). Otro claro ejemplo de la
influencia del hombre en los ecosistemas de la Cordillera Cantábrica, es el caso de las poblaciones de lobo, las cuales se están
recuperando en número de individuos y manadas y territorio ocupado en las últimas décadas debido principalmente al abandono
de usos tradicionales del territorio (p.ej., Sáenz de Buruaga et al.
2015). Las poblaciones de lobo, como depredador apical, podrían
jugar un papel importante en la regulación de las poblaciones de
fitófagos silvestres (Ordiz et al. 2013). Sin embargo, los controles
de población del lobo que se están practicando en algunos lugares
de la Cordillera Cantábrica pueden producir efectos contrapuestos
(Fernández-Gil et al. 2016) a los objetivos perseguidos: reducir el
conflicto entre daños al ganado y presencia de poblaciones de lobo.
La población de osos de la Cordillera Cantábrica se encuentra en
el límite sur de la distribución mundial de la especie, y está por tanto
sometida a un estrés que la hace especialmente vulnerable en su
ciclo vital (Nores et al. 2010; Balseiro et al. 2013). Aunque la especie ha experimentado un reciente incremento multiplicándose por
tres en dos décadas (Pérez et al. 2014), los efectos del cambio global pueden suponer uno de los grandes retos para la conservación
del mayor vertebrado terrestre de la península ibérica. Por ejemplo,
la mediterraneización de las comunidades vegetales de la Cordillera Cantábrica puede traer plantas que fructifican un poco más
tarde en el año, produciéndose un desacople importante con el período de hiper-fagia del oso, lo que puede desencadenar graves
problemas para sus poblaciones. De hecho se han registrado tendencias de cambio en la dieta del oso pardo con una mayor presencia en los últimos años de especies más meridionales y el
abandono de recursos más septentrionales (p.ej. Vaccinium spp.;
Rodríguez et al. 2007). Por último, el número de estudios que investigan las respuestas de las poblaciones de invertebrados terrestres frente al cambio global es muy escaso en la Cordillera
Cantábrica, a pesar de ser muy sensibles a los cambios y, por
tanto, poseer un importante carácter de bioindicador de señal temprana de efectos del cambio global (p.ej. Taboada et al. 2011). En
este sistema ya se han descrito cambios en la abundancia y desplazamientos en altura de las poblaciones de abejorros (Hymenoptera, Apidae) adaptados a bajas temperaturas en los ecosistemas
de montaña de la Cordillera Cantábrica (Ploquin et al. 2013). Otros
ejemplos son la amenaza a la conservación del escarabajo tigre
del brezal (Cicindela sylvatica), debido a la reducción y degradación de los brezales de Calluna vulgaris tras el abandono de las
prácticas de gestión tradicional (Taboada et al. 2013), principalmente la corta y la quema controlada, ligadas al pastoreo extensivo y a la agricultura de subsistencia. También es notable el
aumento de la incidencia de especies herbívoras que causan plaga
debido al incremento en las deposiciones de nitrógeno atmosférico
ocasionadas por la contaminación (p.ej. el escarabajo defoliador
del brezo, Lochmaea suturalis; Taboada et al. 2016).
Finalmente, la Cordillera Cantábrica es un enclave en el que
se registran un gran número de iniciativas de gestión y conservación de los espacios naturales. Así, en su territorio se estima
que existan más de 40 organizaciones sin ánimo de lucro que
trabajan en diferentes proyectos dedicados a la conservación de
hábitats, especies, servicios ecosistémicos y valores socioculturales a lo largo y ancho de la Cordillera Cantábrica. Se estima
que la custodia del territorio pueda ser una herramienta apropiada para garantizar medidas de gestión y conservación efectivas e integrales, en un territorio en el que es absolutamente
necesaria la cooperación entre distintos tipos de propietarios.
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Tabla 1. Bloques, temas y síntesis de los principales mensajes del seminario sobre la Cordillera Cantábrica y el cambio global celebrado en 2015 en Santander (para mayor detalle ver material adicional en: http://personales.unican.es/barquinj/Info_Adicional_Barquinetal2018_Ecosistemas.pdf).
Table 1. Blocks, themes and synthesis of the main messages of the seminar about global change and the Cantabrian Cordillera celebrated in 2015 in
Santander (for more details see additional material in: http://personales.unican.es/barquinj/Info_Adicional_Barquinetal2018_Ecosistemas.pdf).
Bloque
Tema
Principales Mensajes
Los pocos elementos de la criosfera presentes en la Cordillera Cantábrica son muy sensibles a los efectos del cambio
climático.
Marco físico
Glaciarismo
Existen unas 130 cuevas con hielo en el macizo de Picos de Europa con edades comprendidas entre 300-600 años, las
cuales tienen actualmente un balance negativo en volumen y en número de cavidades.
El conocimiento existente sobre precipitación, procesos de innivación, ciclos hielo-deshielo, así como el papel de los
suelos y las aguas subterráneas en muchas partes de la Cordillera Cantábrica necesita ser completado.
Clima e Hidrología
Los cambios en los usos del suelo tienen una gran importancia a la hora de generar patrones espaciales de variación en
los caudales y procesos fluviales en la Cordillera Cantábrica.
Los deslizamientos constituyen el mayor proceso de creación de relieve y modificador del paisaje en la Cordillera Cantábrica.
Geomorfología
Las tasas de movilización de sedimentos en la Cordillera Cantábrica han sido ampliamente afectadas por cambios en la
cobertura vegetal asociados a cambios en los modelos productivos.
Dinámica de paisaje y vegetación
Existen 2 vectores claros de cambio en el paisaje de la Cordillera Cantábrica: (1) mantenimiento de pastos y zonas
arbustivas por incendios y (2) densificación de algunas zonas y recuperación de otras por abandono de actividades.
Paisaje
Existe en la actualidad un desfase entre la utilización actual del paisaje y las necesidades de gestión para la biodiversidad
y geodiversidad de la Cordillera Cantábrica.
Los cambios rápidos que están ocurriendo desde hace décadas en los paisajes Cantábricos (clima, usos, paisaje) no
permiten una coevolución entre hombre y naturaleza como antaño, lo cual puede producir la extinción local de numerosas
especies de flora y fauna.
En relación con su tamaño y situación geográfica, la Cordillera Cantábrica presenta una gran diversidad florística y de tipos
de vegetación, como resultado de su compleja biogeografía histórica y ambiental.
Las principales amenazas a la diversidad vegetal en la Cordillera Cantábrica son el sobrepastoreo, los cambios en los
modelos productivos de las zonas rurales, la alteración del régimen hidrológico y el cambio climático.
Botánica
La vegetación de la Cordillera Cantábrica está respondiendo a cambios en los usos del suelo y al cambio climático, más
notablemente al primero.
La Cordillera Cantábrica incluye áreas de alto valor botánico como refugio de especies de óptimo alpino o mediterráneo,
que representan modelos excelentes para evaluar el efecto del clima en poblaciones y comunidades de plantas.
Las condiciones hidro-climáticas del noroeste de la península ibérica y la diversidad geológica de la Cordillera Cantábrica
originan una importante diversidad de ecosistemas acuáticos.
Ecosistemas
Acuáticos
Los salmones de la Cordillera Cantábrica son cada vez más pequeños, hay un dominio de machos sobre hembras, la entrada
de reproductores se ha retrasado hasta en 45 días y hay un aumento de los añales entre los salmones que remontan.
Los ríos de la Cordillera Cantábrica albergan una diversidad de macroinvertebrados de las más ricas en número de
taxones, en comparación con otras zonas de la península ibérica.
La riqueza de anfibios en la Cordillera Cantábrica se estima alta (>12 especies) aunque hay una falta de muestreos
sistemáticos que incluyan zonas no exploradas.
La gran diversidad de fauna de la Cordillera Cantábrica puede estar influenciada por cuestiones biogeográficas y por el
paisaje en mosaico.
Biodiversidad Fauna
La Cordillera Cantábrica es el punto con mayor diversidad de aves forestales nidificantes de la penúnsula ibérica.
La fragmentación del bosque produce una disminución en el número de especies de aves forestales en la Cordillera
Cantábrica, mientras que la abundancia y diversidad de aves frugívoras influyen en la tasa de dispersión de semillas de
árboles y arbustos.
Los osos de la Cordillera Cantábrica se encuentran en el límite sur de la distribución mundial de la especie. Hace más de
600 años que se documenta que algunos individuos no hibernan, suelen ser los individuos que se encuentran en la base
de la jerarquía social de la población.
Ecosistemas
Terrestres
Se han registrado tendencias de cambio en la dieta del oso pardo con una mayor presencia en los últimos años de
especies más meridionales y el abandono de recursos más septentrionales (p.e. Vaccinium spp.). La mediterraneización
de la Cordillera Cantábrica pueden traer plantas que fructifican un poco más tarde en el año, produciéndose un desacople
importante con el período de hiper-fagia del oso.
Los controles de población del lobo en la Cordillera Cantábrica pueden producir efectos contrapuestos a los objetivos
perseguidos, que son reducir la depredación al ganado y disminuir la intolerancia hacia la especie
Los lobos, como especia clave y apical, podrían jugar un papel importante en la regulación de las poblaciones de fitófagos
silvestres en la Cordillera Cantábrica
Las cambios en la actividad agrícola y ganadera que están aconteciendo en la Cordillera Cantábrica están produciendo
que diferentes insectos estén en riesgo de desaparición
El aumento en las deposiciones de nitrógeno atmosférico debidas a la contaminación en la Cordillera Cantábrica está
ocasionando una mayor incidencia de invertebrados herbívoros que causan plaga
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Barquín et al. 2018
Continuación Tabla 1.
Table 1 continuation.
Bloque
Tema
Principales Mensajes
Existen más de 40 entidades sin ánimo de lucro que trabajan en diferentes hábitats, especies y localidades a lo largo y
ancho de la Cordillera Cantábrica
Gestión y conservación
ONGs
La custodia del territorio se plantea como una herramienta apropiada para garantizar medidas de gestión y conservación
efectivas e integrales, en un territorio en el que es necesario la cooperación entre distintos tipos de propietarios
Participación
Ciudadana
Son necesarios nuevos modelos de planificación y gestión de espacios que incluyan modelos proactivos basados en la
concertación de diferentes políticas y con participación pública activa
Gobiernos
Regionales
Los planes y programas estratégicos, como los programas de desarrollo rural y los planes regionales de ordenación del
territorio, deberían jugar un papel fundamental en la conservación y gestión del medio natural de la Cordillera Cantábrica.
Red Natura
La política de espacios protegidos (RN2000) debe articularse con otras políticas sectoriales (agrícola, ganadera, forestal,
turística, etc.) y ser un instrumento para el desarrollo sostenible de la Cordillera Cantábrica
Parque Nacional
de Picos de Europa
El Parque Nacional de Picos de Europa cuenta con pueblos dentro de sus límites y con el desarrollo de diferentes
actividades socioeconómicas, por lo que su gestión requiere compatibilizar la conservación de su marco biofísico con los
usos tradicionales y el disfrute público
El Parque Nacional de Picos de Europa cuenta con 8 estaciones meteorológicas y con más de 20 sensores de
temperatura en cuerpos de agua, además del seguimiento de numerosas variables relacionadas con la fenología de
hábitats y especies.
Además, se estima también necesaria la implantación de nuevos
modelos de planificación y gestión de espacios naturales que incluyan modelos proactivos basados en la concertación de diferentes políticas y dotados de participación pública activa. Los actuales
y futuros planes y programas estratégicos dentro de cada Comunidad Autónoma (p.ej. programas de desarrollo rural o planes regionales de ordenación del territorio), deberían jugar un papel
fundamental en la conservación y gestión del medio natural de la
Cordillera Cantábrica. Del mismo modo, la política de espacios protegidos de la Unión Europea (Red Natura 2000) debería articularse
de un modo eficiente con otras políticas sectoriales (agrícola, ganadera, forestal, turística, etc.) y ser un instrumento para el desarrollo sostenible de la Cordillera. Finalmente, existen numerosas
iniciativas individuales para el seguimiento de indicadores físicos y
biológicos que probablemente alcancen en el Parque Nacional de
Picos de Europa su máxima concentración. En este Parque Nacional operan actualmente ocho estaciones meteorológicas y más de
20 sensores de temperatura en cuerpos de agua, además del seguimiento de numerosas variables relacionadas con la fenología
de hábitats y especies. Sin embargo, se observa una clara descoordinación de estos programas de seguimiento en un contexto más
amplio de seguimiento del cambio global a nivel inter-autonómico
que pueda ser útil para la Cordillera Cantábrica.
Discusión y conclusiones
Este trabajo ha permitido contrastar el estado de publicaciones
científicas existentes en el ámbito de la Cordillera Cantábrica con
el de otros enclaves geográficos de la península ibérica y concentrar las experiencias sobre los efectos del cambio global que mejor
se conocen sobre estas montañas y que se recogieron en el seminario de la UIMP.
En cuanto al estado de las publicaciones, el PN de Picos de Europa es el cuarto en volumen de producción de los PN continentales
españoles. La mayor parte de la literatura que se ha encontrado se
corresponde con artículos en revistas científicas y, por tanto, la revisión realizada excluye el conocimiento que se encuentra en otro
tipo de formato (p.ej. informes de proyectos y de gestión administrativa; la denominada “literatura gris”). Esto es principalmente debido al tipo de motor de búsqueda utilizado (i.e. SCOPUS), el cual
garantiza una adecuada recopilación de estudios científicos pero
un menor número de la literatura gris (ver Hooper 2012).
A pesar del buen nivel productivo en el número de publicaciones, las temáticas tratadas en la Cordillera Cantábrica son menos
diversas en comparación con otras zonas geográficas, concentrándose en tres disciplinas concretas (Ciencias de la Tierra y Planetarias, Agricultura y Ciencias Biológicas y Ciencias Ambientales). De
hecho, hay disciplinas que prácticamente no han mostrado trabajos
científicos en la Cordillera Cantábrica, entre los que destacan: Economía, Química, Energía, Microbiología o Veterinaria. Además, la
mayor producción científica de la Cordillera Cantábrica se concentra en los centros de investigación más cercanos a la misma (Universidades de Oviedo, León, Valladolid, Salamanca o Cantabria).
Hay que hacer notar que, en función de los trabajos analizados, la
mayor parte de estos estudios se realizan desde un único centro,
por lo que las colaboraciones entre universidades locales son escasas. Sin embargo, existe un claro interés internacional por estas
montañas, con un elevado número de publicaciones en la que participan instituciones de países extranjeros. Estos resultados coinciden con los resultados de otras zonas del mundo en el que los
locales tienden a fomentar la participación de científicos de centros
extranjeros. Este patrón eleva la internacionalización pero limita el
intercambio de experiencias locales (van Wilgen et al. 2016).
Como se evidencia en este trabajo, la Cordillera Cantábrica
reúne una serie de condiciones que la convierten en un candidato
ideal para el seguimiento de los efectos del cambio global sobre
multitud de elementos biofísicos. En la actualidad existe suficiente
información en forma de estudios, bases de datos y redes de seguimiento como para poder marcar las líneas base de cara a identificar efectos y principales factores del cambio global en múltiples
elementos (véase serie Investigación en Red del Organismo Autónomo de Parques Nacionales). Sin embargo, la mayor parte de esta
información no se encuentra disponible para todos los científicos,
técnicos y gestores que trabajan en la Cordillera Cantábrica. De
hecho, consideramos imprescindible realizar un mayor esfuerzo en
sintetizar la información disponible a nivel local y en la literatura gris
de cara a una mejor transferencia de conocimiento entre el cuerpo
científico-técnico, la administración y la población civil e incluso
entre diferentes equipos técnico-científicos que trabajan en la Cordillera Cantábrica. Por otro lado, apenas existen plataformas de coordinación entre las universidades y administraciones con mayor
responsabilidad. Esto resta potencial a la hora de integrar información, generando duplicidades y evitando metodologías comunes
para aplicar las políticas de gestión en datos consistentes y hechos
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objetivos (e.g., Spellerberg 2005). Consideramos que la creación
de un observatorio del cambio global a escala inter-autonómica
puede ayudar a potenciar la integración necesaria del conocimiento
existente en la actualidad sobre la Cordillera Cantábrica, así como
a identificar las necesidades más acuciantes para la conservación
de la biodiversidad y la provisión de servicios ecosistémicos en el
actual marco de cambio global. En este sentido, el desarrollo de
una plataforma web y una base de datos que permita aglutinar los
trabajos, estudios y datos existentes en diferentes disciplinas en la
Cordillera Cantábrica, y desarrollados por diferentes instituciones
públicas y privadas, traería grandes ventajas. Este avance permitiría realizar nuevos enfoques y desarrollar meta-análisis para identificar los vacíos de conocimiento, necesidades de desarrollo
científico-técnico y políticas de gestión innovadoras. Es decir, se
concentrarían esfuerzos y se optimizaría el avance del conocimiento en un frente común y coordinado. La gestión del medio natural en la Cordillera Cantábrica requiere inversiones económicas,
medios personales y materiales, pero también exige inversión intelectual que permita pensar y planificar una estrategia regional y
local de gestión de la biodiversidad y geodiversidad. Todo ello solo
es posible si se generan espacios y herramientas adecuadas para
abrir el debate y la concertación entre administraciones y disciplinas, optimizando los esfuerzos para establecer un marco de conocimiento común.
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4. Comunicación social. Necesidad de mejora de la comunicación entre las distintas administraciones y la comunidad científico-técnica, con el objeto de mejorar los flujos de transferibilidad
de conocimiento científico, de gran utilidad a la hora de tomar
decisiones en el campo de la gestión del territorio y para conseguir una mayor concienciación de la población civil sobre los impactos de la actividad humana en los ecosistemas de La
Cordillera Cantábrica. Esto incluye iniciativas de educación ambiental e interpretación del paisaje en diferentes disciplinas, así
como el establecimiento de una marca o topónimo “Cordillera
Cantábrica” común para la divulgación a los medios y entre los
científicos.
Agradecimientos
En primer lugar nos gustaría agradecer a la Universidad Internacional Menendez Pelayo por el apoyo recibido para la celebración del seminario titulado “La Cordillera Cantábrica como
Centinela de los Efectos del Cambio Global”, celebrado en Palacio
de la Magadalena en Santander entre el 17 y el 21 de agosto de
2015, así como a todos los asistentes por el interés mostrado. Además, nos gustaría agradecer también al servicio de publicaciones
de la biblioteca de la Universidad de Cantabria por sus consejos a
la hora de realizar las búsquedas de literatura para la realización
del presente estudio.
Perspectivas de futuro
La información bibliográfica y la revisión de los efectos del cambio global en aspectos clave del entorno biofísico de la Cordillera
Cantábrica ponen de manifiesto la necesidad de generar un observatorio que permita concentrar esfuerzos. La formulación específica del tipo de observatorio a generar dependerá de la
implicación de los diferentes agentes locales, regionales y nacionales. Sin embargo, existen suficientes elementos en la actualidad
que podrían comenzar a dar forma a este proyecto con una serie
de iniciativas concretas. A continuación presentamos aquellas que
consideramos que pueden contribuir notablemente al desarrollo
de un observatorio inter-autonómico del cambio global en la Cordillera Cantábrica:
1. Marco de colaboración. Generación de un seminario permanente sobre la Cordillera Cantábrica que integre la participación
de investigadores, técnicos y gestores, y que permita generar
un espacio de diálogo multidisciplinar sobre la Cordillera, desarrollando vínculos y colaboraciones entre diferentes profesionales. Este seminario permitiría revisar periódicamente el
estado de conocimiento de diferentes disciplinas, aumentando
el grado de interdisciplinariedad en los estudios y trabajos desarrollados.
2. Selección de objetivos. Identificación de indicadores físicos,
ecológicos y socioeconómicos que sirvan como alertas tempranas ante cambios importantes en las dinámicas del sistema (social, económico y ecológico) de la Cordillera Cantábrica como
un sistema único, y que ayuden a los gestores a desarrollar una
política de gestión participativa y adaptativa en función de la revisión periódica de estos indicadores.
3. Síntesis de información. Dentro de este apartado sería de
gran importancia la elaboración de revisiones y bases de datos
compartidas que permitan realizar estudios de síntesis y multidisciplinares. Además es sumamente importante, la consolidación de una red de seguimiento del cambio global en la
Cordillera, cuyo diseño, mantenimiento y supervisión esté garantizado a medio-largo plazo por un pacto entre entidades autonómicas y estatales y no dependa exclusivamente de los
esfuerzos independientes de diferentes equipos de trabajo.
Dicha red debería coordinar nuevos trabajos de investigación a
diferentes niveles (planes nacionales, trabajos fin de master,
tesis doctorales, etc.), y trabajos técnicos (relacionados con
nuevas necesidades de gestión), que incorporen e integren la
información existente.
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